Embarazo al estilo Senju-Uchiha [HashiMada]

🔸5 Mes🔸

Había llegado ese día, ese día en donde finalmente iban a saber sobre si iba a ser niño o niña. La panza de Madara ya se veía más.

Madara y Hashirama acordaron verse en el hospital a la hora acordada para el chequeo, era algo que el Senju no se lo queria perder.

Madara llegó al hospital en busca de la pelirroja, la vio acercándose hacia él y se saludaron. Luego Mito llevó a Madara a una especie de consultorio que a lado estaba una máquina que era el ultrasonido, una camilla y un tipo de gel que se utilizaba para estos casos de embarazos, Mito le pidió que tomará asiento en la camilla y él asintió.

— ¿Y Hashirama?.

Preguntó, no quería empezar sin él, veía como Mito ordenaba algunos papeles y se desinfectaba las manos.

— De seguro ya no tarda, le dije a un amigo que si lo veía que lo guiará hasta aquí para empezar con el chequeo. Así que no te preocupes.

Sonrió de manera maternal para tranquilizar al azabache, Madara suspiro frustrado, no sabía porque se frustaba si Hashirama tiene más o menos esa costumbre desde niños de llegar tarde a un lugar, sólo esperara que su hijo no heredara eso.

Después de algunos minutos, la puerta se abrió dejándose ver al Senju con una sonrisa nerviosa mirando como Madara le dedicaba una mirada asesina.

— Lo siento Maddy.

Río nerviosamente, para después tragar saliva. Madara bufo para después suspirar y debatiendo si matar a su esposo o no.

— ¡Buenos vamos a empezar!.

Mito aplaudió antes que en su consultorio hubiera una posible  masacre.

— Madara ahora si acuéstate y levanta un poco tu camisa para ponerte el gel en tu panza y así poder ver como anda él bebé.

El Uchiha obedeció, Hashirama se puso a un lado suyo de mientras que le daba un beso en la frente  y estrelazaba sus dedos con las de su amado.

Mito se enternecio ante aquella escena, sabía que ambos habían sufrido mucho por la guerra, ya era tiempo de que Hashirama y Madara tuvieran su propia felicidad.

Le puso gel a la panza de Madara sintiendo un pequeño cosquilleo y una sensación fría. Mito puso la sonda sobre este y miró al monitor viendo si no había alguna anomalia, Madara y Hashirama vieron al monitor apreciendo que esa pequeña cosita que se podría figurar en la pantalla era su hijo o hija. Mito sonrió y volteo hacia ellos.

— ¿Quieren saber si es niño o niña?.

Vio como ambos se miraran y asintieran.

— Si queremos saber  Mito.

— Bueno, será un niño, felicidades chicos.

Hashirama y Madara sonrieron con entusiasmo en forma de agradecimiento hacia su amiga.

Después de que Mito limpiará el gel y se despidieran, regresaron a la casa y se acurrucaron en el sofá sin lastimar la panza del Uchiha, no querían hacer nada por ahorita, querían estar un momento a solas y estar juntos por aquella noticia del bebé.

— Oye Maddy, aún no decidimos que nombre le vamos a poner a nuestro hijo.

Madara se medio despertó, se había dormido en los brazos de su esposo.

— Tu escoge uno Hashi.

Hashirama rio de manera tierna y beso la frente de Madara.

— Acuérdate que soy malo con los nombres Maddy, después de todo tú le diste el nombre a la aldea cuando yo estaba pensando en nombres raros.

Madara rio, a veces se sentía como si Konoha fuera como su hija o hijo, ambos estaban viendo como su aldea estaba prosperando y se sentían orgullosos por eso.

— Tienes razón en ese día tú te estabas quemando las pocas neuronas que tenías para escogerle un nombre a la aldea.

Hashirama  puso su aura deprimente, Madara rodó los ojos, también esperara que eso no sea hereditario.

—Que te parece.... Obito.

Hashirama sonrió y estrujo levemente más entre sus brazos a Madara sin la necesidad de lastimarlo.

— Me parece perfecto Maddy, siempre eres bueno con los nombres.... Tal vez te hagas cargo de nombrar a todos nuestros hijos que tengamos.

Madara se sonrojo y hundió su cabeza más en el pecho de Hashirama, queria que le tragara la tierra y nose tal vez después de que nazca Obito dejar en abstinencia por toda la vida al tarado de su esposo.

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