El valor de un Azteca (CanMex / UsaMex).

Capitulo 8.

[ Señales de vida]

Voces...

Era lo unico que podía escuchar a su alrededor, voces y uno que otro molesto pitido de alguna máquina cercana a el, mientras más conciencia ganaba logró diferenciar de entre las ruidosas voces la sirena de lo que dedujo era la ambulancia en la que venía, aliviado pero adolorido entre tanto movimiento brusco tanto su cuerpo como su cabeza parecían querer explotar, quería abrir los ojos y romperle la boca al cabron que le había disparado pero su cuerpo no respondía a ninguna de sus acciones...

México intento siquiera levantar su dedo medio en señal que estaba consciente, pero ni eso parecía querer cooperar con el hoy, sin mucho que hacer pensó en dormir de nuevo pero por más que intentará hacerlo aquellas voces que le rodeaban seguían quitándole el sueño, y entre ellas estaba una que reconocía bastante bien, una molesta voz según sus propias palabras que ahora sonaba triste y preocupada.

"Pinche España, ni morirme a gusto deja". Pensó riendo por dentro al imaginar a España preocupado por alguien como el, bueno, si no se movía por el lo intentaría por ese viejo rarito que tanto quería. "Ya no chilles wey, sigo vivo... todo puteado pero vivo.".

Con un poco más de esfuerzo logro mover la mano, un patético intento de movimiento que fue suficiente para poder rozar la mano del Europeo.

-¡¡NUEVA ESPAÑA ESTAS VIVO!! -. Grito aferrándose a la mano del latino logrando que este sonreirá de apoco aún sin abrir los ojos.

-Y dale con el pinche nombrecito ese... -. Replicó con un hilo de voz. - No más porque estoy todo fregado te la dejo pasar viejito -.

-¿Pues en que estabas pensando al regresar dentro de ese infierno? -. Regaño el Español jalando su orega en forma de castigo. - ¿¡Tienes una puñetera idea de lo preocupado que estábamos todos por vos!?-.

- Lo siento, pero uno no deja al amigo solo en medio del desmadre -. Hablo tranquilo abriendo los ojos de apoco. -Tu bien sabes como soy-.

- Y porque se como eres me preocupa que un día acabes muerto por alguien que no haría lo mismo por ti, ¿Crees que Usa o Canadá habrían vuelto por ti si hubiera sido al revés?-.

-Quién sabe -. Dijo riendo al finalizar aún con voz cansada. -  Pero sin importar lo que decidan, yo meteria las manos al fuego por ellos, por mis hermanos y hasta por ti viejo amargado -. Finalizó apretando un poco su mano.

España suspiro, tal y como recordaba el niño seguía siendo ciegamente amable, todo un tonto sin remedio para el.

- Debería romperte una escoba en la cabeza a ver si así reaccionas gilipollas... -.

-Pero si ya lo intentaste, y le pegaste a Chile en la nuca mientras iba pasando, ese día el wey vio a dios a los ojos del tremendo putazo que le diste -. Río un poco parando de golpe sujetando donde había entrado la bala. - Chingados todo me duele, no traerás una paracetamol entre tus cosas o ya de menos dile al  conductor que se calme que no trae vacas -. Seguía quejándose mirando como el Español sonreía divertido por sus disparates.

- Conduce así porque tenemos que llegar al hospital lo antes posible -. Respondió nuevamente  jalando un poco su oreja. - Te acaban de disparar subnormal y aunque la bala salió eso no significa que estés fuera de peligro -.

- Entonces ni hablar de pararnos a comer, ¿verdad?... -.

-México... -.

-Está bueno, ya me callo -. Sonrió intentando darle calma a su acompañante sintiendo como de apoco sus párpados comenzaban a pesar. - Me está dando mucho sueño España... -.

-Es por la morfina niño, te ayudará a apaciguar el dolor mientras llegamos, deberias intentar dormir un poco -. Pidió el de rojo y amarillo acariciando su cabeza. -Aún falta moverte cuando lleguemos al hospital y no me gustaría que sufras más -.

-Ta' bueno pues, confío en ti para cuidar que no me lleve la chingada mientras llegamos al mentado hospital -. Dijo medio consciente tomando su con cada vez menos fuerza. - No más no vayas a chillar viejito, no quiero verte triste ni mucho menos amargado por mi culpa, sonríe que cuando me den la alta nos vamos a ir por una bien frías tu, chile y yo mero... -. Y entre desvarío México fue quedando dormido mientras el Español suspiraba aliviado.

México no había muerto y sus otros hijos estaban a salvó, más tranquilo pudo respirar sin aquella horrible precion en su pecho.

"Madre mía, si esto que pasa es un castigo por mis pecados llévame a mi y no a mis retoños, son lo único que en verdad amó en esta vida". Pidió al cielo entre susurros besando la frente del tricolor esperando que eso fuera suficiente para evitar más desgracias.

Unos cuantos minutos después pudo escuchar como los para médicos le avisaban de su llegada al hospital pidiéndole que bajara para poder sacar al paciente con más facilidad, se dirigió a las puertas de la parte trasera pero antes de siquiera poder tocarla la puerta se abrió de manera abrupta ante sus ojos dejándolo ver a quienes menos quería en este momento.

- ¿Que hacen aquí? -.

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Continuará...

(Que bien se siente volver... :3 )