owns my heart |KookTae |Omegaverse

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JungKook era uno más en una inmensa conejera de conejillos pequeños dentro del inmenso campo ahora cubierto de densa nieve blanca, oculto entre sus hermanos se hacía bolita pues el más pequeño era, todos cubrían al más débil y último en nacer y ese era su puesto en la familia.

No se quejaba pues era el primero en comer.

Arrinconados todos en una esquina de la madriguera esperando a que el día se hiciera presente para salir a cazar, bueno, JungKook esperaba junto a sus hermanos mientras que sus padres salían a conseguir parte de la cosecha para ellos. Pero también podían recibir ese caluroso sol por algunos minutos junto a los más mayores de otras madrigueras.

Solo unos meses en edad de conejo pero casi seis años en humano, JungKook era apenas un crío. Aprendiendo de los cazadores y jugando junto a los de su edad.

Cuando dejaba de ser un conejo de pomposo pelaje negro y manos pequeñitas pasaba a tener, salía del campo con una pequeña canasta de mimbre repleta de rojos fresones para su mejor amigo que en las montañas se refugiaba del frío campo. En una cabaña de madera muy reforzada y cálida, con una madriguera funcionando como sótano y un amplio espacio, eran de las especies que más avances habían tenido a comparación de los conejillos belier, la raza de JungKook.

Se conocen desde que nacieron, bueno, TaeHyung llegó a conocerle cuando contaba con dos añitos de edad, curioso e inocente resguardaba al pequeño bebé entre sus brazos y sus deditos pequeñitos toqueteaban sus mejillitas carmines. Crecieron juntos y siendo muy cercanos, al llegar a los cuatro años, JungKook inició su vida de cachorro nómada para encontrar puntos estratégicos y poder hacer sus propias madrigueras, entonces salía con TaeHyungnie Hyung para sentirse protegido de los lobos y linces salvajes. Era una relación simbiótica, si TaeHyung le protegía, JungKook le proporcionaba fresas enormes para su hibernación.

Así que con seis añitos ya puede permitirse salir de la madriguera e iniciar camino dentro del bosque.

Ha hecho amistades clave con los de las manadas dominantes de lobos y una muy especial con los más veloces dientes de sable, estos son los que lideran los escampados y dentro del bosque se esconden, por ello necesita respaldo para no ser comida rica y fácil para los depredadores.

Pero allí, durmiendo, era un pequeño gazapo sin experiencia alguna, apenas y podía sacar una hoja de lechuga y acabarla entera. Aún de niño era complicada su vida pues pasaba más tiempo siendo un tierno conejillo perezoso y alimentado por sus padres.

Su familia constaba de doce hermanos y los líderes Alfa y Omega, se dice que él fue un gazapo suertudo y con una orla en la cabeza. La Omega había dado a luz a once pequeños castos de pelaje, pensando que eran todos los acurrucó en el nido uno a uno con cuidado para alimentarlos y poder vigilar el nido de los depredadores. Unos minutos después de salir de la madriguera, nació JungKook.

Sus padres no le esperaban pero tuvieron que regresar junto a los demás para hacer el mismo procedimiento y que el gazapo no se muriera por el frío y los bruscos movimientos de traslado.

Afortunadamente todo estuvo en orden pero se notaba la diferencia de tamaños y hasta el color era diferente, sorprendía ver a todos con nuevos pelajes blancos y marrones claros, otros con un gris encendido y luego él, con un azabache duro, el único en la camada con aquel color.

Su vida era esa, dormir y alimentarse dos veces al día, salir al cultivo a aprender a robar las provisiones de otros y regresar a cuidar la madriguera de las comadrejas y serpientes.

TaeHyung era el único en una esquina llena de hojas secas e hierbas, un osito perezoso que amaba el invierno frío y detestable por muchos que se enfrentaban a él diariamente, mientras que él disfrutaba dos o tres dias de nieve, los demás estaba durmiendo. Su parte favorita era poder perderse en la hibernación, las cenas antes de este proceso también eran algo más para amar el invierno.

Muchos alimentos que a lo largo del año no se comían eran reservados para esas fechas, siendo el único cachorro de dos osos líderes era el más mimado de todo el bosque, asimismo era cuidado por manadas dominantes de lobos cuando salía a cazar.

Cuando el pequeño osezno nació, Alfa y Omega no podían creerlo. Tras un historial lleno de pérdidas y muertes, los líderes habían abandonado las esperanzas de tener una cría debido a la pena del Omega después de cada desdicha, no tenían grandes preparaciones para TaeHyung y ni siquiera un nido en el cual cuidarle en la época de hibernación.

TaeHyung fue ayudado por todo el bosque, líderes de todas las manadas proporcionaron a los más fuertes para acercar lo necesario y hacer un nido en condiciones para un recién nacido, más específicamente la única descendencia de los líderes.

Siempre destacó por su amor a la hibernación y a la comida en abundancia, era un osezno curioso que salía de la madriguera para ir a los territorios cercanos y robar bayas y uvas, siempre tenía a alguien de confianza rastreando sus huellas por lo que nunca fue problema para sus padres que se fuera de casa con apenas un año de edad.

También llevaba apodos por lo torpe que podía ser algunas veces, como la vez que se resbaló en el río en una gran roca con musgo húmedo, ocasionando el pánico de lobos y dientes de sable, ambas manadas corrieron a favor de corriente para recuperarlo vivo pues él parecía ir disfrutando del viaje acuático. Una semana estuvo castigado sin salir de la madriguera.

Por otro lado estaba el pequeño conejillo belier, ese pequeñajo que se asusta con facilidad y que ama los mimos, su mejor amigo.

No recuerda cuando se conocieron pues era un infante distraído, pero sí tiene recuerdos divertidos con el conejo de orejas gachas y grandes, juntos se escondían en grandes praderas e incluso dentro del bosque hacían juegos de escondite y búsqueda de insectos.

Son solo niños que buscan diversión en territorios seguros, pero los padres líderes del oso temen que TaeHyung caiga enamorado de un futuro Alfa de una manada humilde como lo es JungKook, esmeran a más y mejor, como el hijo mayor de la manada de los dientes de sable. Es un felino rápido y agresivo, despiadado con enemigos y conocido por ser un depredador temido por todos, los lobos no pueden hacerle competencia a tales felinos.

Aunque aquel sea un cachorro de dos años más que su hijo, ven un futuro mejor para la manada, ligarlos de una manera amorosa solo conseguiría un territorio de dos razas dominantes.

Pero el osito prefiere estar en compañía del conejito azabache.

Hi pollitos desaliñados, beban agüita 🤺