(Adaptación de mi historia de Offgun)
Harry Styles es un chico de veinticuatro años que está en su último año de Universidad.
Los amigos de su pandilla están todos felizmente emparejados y eso lo trae al borde de la locura pues debe soportar sus in...
Louis estaba realmente triste y su hermano lo notó enseguida pues dos días después, este fue a verlo a la cafetería donde trabajaba.
..-Hey Lou, ¿Qué haces aquí?, creí que estabas en la biblioteca...Harry me dijo que...
El más bajo soltó un profundo y desolador suspiro, tras dejarse caer en uno de los taburetes de la barra.
-Hey, ¿por qué estás así?, ¿Has tenido algún problema en el instituto?,
Este negó.
-¿Acaso no te tratan bien en la casa de mi amigo?
-Si, si lo hacen, todos son muy amables conmigo pero quiero irme a nuestra casa.
El mayor resopló con pesar.
-Lo siento pero por el momento no puede ser posible, Lou... yo no puedo ocuparme de ti mientras mi madre está en el hospital...Además sabes que tengo que trabajar, no puedo perder este empleo.
—Pero tengo diecisiete años, puedo quedarme solo unas horas.
Liam negó rotundo.
—No, no puedo permitir que estés tanto tiempo solo, debes entenderlo por favor...tienes que quedarte por más tiempo en casa de mi amigo.
Al escuchar eso, los ojos del más joven se llenaron de lágrimas y entonces su hermano salió de detrás de la barra y lo abrazó con fuerza.
-Lo siento, ya sé que esto no era lo que teníamos planeado pero es lo que nos ha tocado vivir...te prometo que en cuanto pueda pasaremos mucho tiempo juntos y haremos cosas de hermanos, ¿está bien?.
El ojiazul asintió
-Si, está bien.
Luego de eso, el mayor le sirvió un refresco y un trozo de tarta para que ver si este se animaba pero pareció no funcionar, ya que pasados veinte minutos, el menor seguía cabizbajo y sin apenas probar bocado.
-Está bien, cuéntamelo, ¿Qué te pasa realmente?-Habló ya bastante preocupado Liam-...¿Harry te ha regañado por tocar sus cosas?, ¿Es eso y no quieres decírmelo?.
Estr levantó su cabeza y lo miró fijamente.
-No, no es eso.
-Ah, ya sé, te ha prometido darte una vuelta en su moto y no lo ha cumplido.
-No, tampoco es eso.
-Bueno, lo que sea no se lo tengas en cuenta...lo cierto es que es un poco excéntrico pero es un buen tipo... yo confío mucho en él, es como mi hermano.
Louis soltó otro gran suspiro.
-Oye Li, ¿Qué me dirías si te digo que me gusta alguien?
El mayor lo miró con asombro.
-Oh vaya, eso es genial-dijo feliz -... mi hermano enamorado, ¿Has escuchado Tin?—le habló a su compañero de trabajo— … mi hermano está enamorado.
-Hey, oye baja el volumen, no quiero que se enteren -Habló avergonzado el menor.
-Hey, ¿por qué?, esa es una noticia increíble... tienes diecisiete años Lou y tienes que vivir y experimentar, los primeros amores son muy importantes.
-Ya bueno pero no creo que vaya a ser nada-apuntó este con tristeza.
El ojimiel lo miró entonces con preocupación.
-¿Acaso la niña que te gusta no te hace caso?
El ojiazul lo miró con confusión y luego negó.
-Oh entiendo, no es una niña, es un niño ¿no?.
Este negó de nuevo.
Liam se quedó un poco confuso.
-Ah ya sé, ¿entonces se trata de un amor platónico con tu maestro?.
-No.
-Buff pues entonces no entiendo-dijo el ojimiel muy extrañado.
Louis entonces bebió un gran trago de su refresco.
-Me gusta alguien mayor pero no es nadie de mi Instituto...él es un chico que...
-Ah no, no, nada de eso-negó rápidamente Liam-...tú tienes que estar con alguien de tu edad... no puedes estar pensando en cosas imposibles, eres demasiado joven.
El ojiazul lo miró con molestia.
-Tengo diecisiete y dentro de seis meses cumpliré los dieciocho... tú no puedes decirme con quién puedo estar o no.
-Si puedo-dijo rotundo el mayor-... eres mi hermano y mis deber es protegerte... no dejaré que caigas en manos de un degenerado y pervertido hombre.
Las lágrimas empezaron a rodar por las mejillas del más joven.
-De todas maneras da igual, no tienes por qué preocuparte...él no me hace caso, ni siquiera sabe que existo...creo que piensa que soy un mocoso y que solo estorba, al igual que tú.
Liam le puso su mano en el hombro.
-Oye, yo no pienso eso, es solo que no quiero que te hagan daño... todavía eres muy joven y tendrás mucho tiempo para enamorarte... en este momento en lo único en lo que debes pensar es en tus estudios, ¿Ok?
-Si claro-Dijo Louis resignado-...bueno, me voy ya, tengo muchos deberes que hacer, adiós.
—Adiós, ah y portate bien, te llamo en la noche.
Tras salir del local, el ojiazul se apoyó en la pared del edificio y se dejó caer en el suelo mientras lloraba desconsoladamente.
—¿Qué voy ha hacer?, joder, duele demasiado.
Luego de un rato allí, se levantó y caminó ante la mirada confusa de varios viandantes, este se sentía morir pues estaba completa y absolutamente enamorado de Harry pero ni siquiera había podido contárselo a su hermano.
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