Tu sitio es estar conmigo

Capítulo 22

8:30 de la mañana, Portland, Maine.

Aquel día era un manojo de nervios. No había dormido nada en toda la noche. ¿Qué iba a decirla? ¿Cómo iba a reaccionar?

Por culpa de mi insomnio, me había levantado pronto. Bastante pronto diría yo. Pedí que me trajeran el desayuno a la habitación, ya que me daba pereza salir de la cama. Mientras bebía mi café, cogí el móvil para llamar a Gabi cuando vi un nuevo mensaje en mi barra de notificaciones. Era de un número desconocido. Lo abrí y lo leí.

"Hola Beth, soy Igor.
Sólo quería preguntarte que qué tal estabas".

Leí unas cuantas veces más el mensaje. ¿Era Igor? ¿Quién le había dado mi número? Miré la pantalla de mi móvil otra vez y sonreí. Tenía el número de Igor Crawford.
Lo guardé en mi agenda de contactos y decidí responderle. ¿Qué le digo? Me quedé en blanco mientras miraba la pantalla del móvil. Me tranquilicé mientras le daba un mordisco a una de las tortitas con sirope de chocolate y le respondí:

"Hola Igor :)
Pues bien y tú?"

-Espero no sonar muy borde... Dije antes de darle un sorbo al café.

Seguí desayunando intentando no estar nerviosa por mi madre ni impacientarme porque Igor no me contestase. Salí de la cama y decidí ponerme el vestido de ayer. Me dejé el pelo suelto y me eché colonia. Guardé el pijama en la bolsa de deporte y un pitido sonó desde mi móvil. Cogí el móvil y leí el nuevo mensaje.

"Bien. Me alegro de que estés bien :)
Qué haces? Ya has visto a tu madre?"

"Mm...No. Ayer Gabi me dio la dirección y ahora me estaba vistiendo para ir a su casa... Y tú? Ya le diste la paliza a tu padre?"

"Tampoco, lo bueno se hace esperar ;)"

¿Y qué le respondo ahora? Le puse un "jajaja" y, tras coger mi bolso salí de la habitación. Mientras atravesaba recepción repasaba mentalmente la conversación que habíamos tenido. Me alegraba haber hablado con él, pero no era lo mismo... Le echaba de menos, quería estar con él... Salí del hotel y llamé a un taxi. Le di la dirección y me quedé mirando el móvil. Lo desbloqueé y al ver que estaba "En línea" le mandé un mensaje.

"Ya estoy de camino, deséame suerte"

Tardó unos minutos en contestar.

"Suerte. Y ya me contarás qué tal ;)"

"Gracias ❤ Y eso está echo"

Bloqueé el móvil pensando lo cursi que quedaba el corazón y lo tonta que sonaba en el mensaje.

El taxi se detuvo frente a una casa no muy grande, blanca, de madera, que estaba en las afueras. Respiré hondo y tras darle el dinero al taxista, me bajé.

-Sólo será media hora. Dije asomándome por la ventanilla.

-Eso le saldrá más caro. Dijo sacando el periódico.

-Espere por favor. El taxista me miró y asintió.

Me aparté del taxi y me alisé el vestido. Me peiné el pelo con los dedos, mientras caminaba hacia el porche. Busqué el timbre y llamé. En seguida me arrepentí y me di la vuelta para ir hacia el taxi.

"Muy bien Beth, has ido cuando no está en casa" Pensé.

La puerta se abrió.

-¿Hola? Dijo una voz femenina.

Me di la vuelta y me quedé mirándola un momento. Era algo más joven que Sue. Tenía el pelo liso, caoba y lo llevaba por los hombros. Los ojos grises, unos pómulos marcados, unos labios rosados y era un poco más bajita que yo y más rellenita.