oh ana ⚰️ senpai x lectora

♡ ⸝⸝ :: capítulo seis.

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POV : ______.

Estaba asqueada, me metí a la casa rápido y le dije a mis padres, no soporté las ganas de vomitar y corrí hacia el baño. El dolor de cabeza había empeorado, mi cuerpo se sentía débil.

Pasaron varias horas de eso, aún seguía sin comprender quien pudo haber hecho tal cosa pero estoy segura de que lo pagará, pobre e inocente gato.

Estaba tan confundida en ese momento, ya no sabía que pensar sobre quién me mandaba las cartas, el suicidio de Pico era aún más raro para mí al igual que la muerte del gato.

Estaba viendo lo blanco del techo, mientras tenía mis manos en mi cabeza acostada. Acababa de salir de bañarme... recordé la tarea... no la hice. Miré al reloj con algo de dificultad, eran las 9:28 de la noche, solté un bostezo y me acomodé de lado, siendo sincera tenía flojera de hacerla además de que el sueño me consumía poco a poco.

Amanecer de un nuevo día.

Dormí sin darme cuenta, la alarma para ir a la escuela sonó cerca de mi oído haciéndome despertar rápido. Me cambié y después desayuné, me lavé los dientes y salí hacia la escuela.

Mientras caminaba me ponía a pensar en lo mismo de ayer, ¿todo habrá sido una casualidad? no, esa carta que estaba junto al gato... la letra era la misma que la que siempre Nene me da. ¿Será ella? tampoco lo creo... estaba tan confundida y estresada.

Llegué, fui a mi salón, ahí estaba Cherry. Me senté en mi pupitre, ella se sienta detrás mio.

— Hola. — Dije, con una pequeña sonrisa en mi rostro intentando hacer que me viera, pero sólo miraba hacia el suelo con la mirada vacía. — ¿Te sucede algo?

— No nada, no dormí bien ayer. — Respondió mientras se frotaba los ojos y sonreía. Solté una carcajada, seguido asentí.

Pero siendo sincera me preocupé, Cherry no es así. Regresé a mi escritorio, sentía que mi corazón saldría de mi pecho; latía violentamente y me mareé un poco. Tomé un poco de agua y me calmé, estaba tan nerviosa pero no sabía porqué. Tal vez el actuar de Cherry.

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El receso comenzó, aún estaba sentada en mi pupitre pues ella no tenía ganas de salir. Saqué mi almuerzo, giré mi asiento hacia donde Cherry haciendo que quedemos frente a frente.

Ella comía de forma lenta, su mirada parecía estar perdida. Soltó un gran bostezo, contagiándome. Tal vez no estaba mintiendo y si durmió mal ayer. Sonreí a medias pero seguí comiendo. El ambiente era raro, no había nadie más en el salón que ella y yo. No pronunciaba palabra alguna, me preocupé un poco.

Acabamos de comer e intenté componer mis pensamientos en palabras, ¿por qué los nervios me dominaban? no lo sabía.

— Salgamos a caminar un rato. — Farfullé, pero ella negó de nuevo. No sabía que le pasaba. Me quedé junto a ella todo el receso.

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POV : Senpai.

"...Entonces, desabroché de manera violenta su blusa; ella sólo sonreía de lado. Me miró y murmuró: — Hazme lo que quieras, no me quejaré de nada. Golpéame, bésame... — Me miró de manera atrevida, puso sus manos en su pecho. Ante esto yo solté un suspiro y comencé a besarla."

No, no y no. No me convence esto. Es inútil si no puedo verla, no me puedo inspirar del todo. Cerré mi cuaderno y salí del salón, tenía hambre así que fui a la cafetería. Miré a los lados pero no veía a ____ por ningún lado. Me senté en una de las mesas y comencé a comer.

Mientras lo hacía me ponía a pensar en ella, no podía sacarme de la cabeza su belleza, su lindo cuerpo... no podía. Mi cara no paraba de arder y suspiros se me escapaban.

— ¡Senpai! — Oigo de nuevo sus irritantes voces, ellas... me hacen sentir sucio, pero es irónico que yo lo diga, ¿no? — ¿En qué tanto piensas? tu rostro parece estar algo rojo.

— Es obvio que está pensando en mí. — Dice una chica, sonriendo triunfante mientras pone una mano sobre su pecho. Las demás fruncen levemente el ceño mientras ríen, pero de igual manera se sientan junto a mí.

No le doy demasiada importancia y sigo comiendo, ellas sacan sus bentos e igualmente se ponen a comer. Mi imaginación se había visto estropeada, ya no podía pensar en ____ porque una chica que estaba sentada al lado mío comenzó a hacer unos jadeos. Los únicos que quiero oír son los de ____.

Solté un suspiro, estaba comenzando a ponerme un poco... umm... raro. Eso de pensar tanto en ____ me puso mal. Me levanté de la silla sin terminar mi comida, llamando la atención de las chicas.

— ¿A dónde vas, Senpai?

— Iré a mi salón, tengo cosas que... hacer. — Farfullé, alzando un poco la cabeza manteniendo una sonrisa falsa y patética en mi rostro. Ellas soltaron un suspiro y asintieron, me sentía falso como siempre. — Ustedes quedense con mi comida.

— ¡Yo lo haré!

— No, yo lo haré. — Las chicas comenzaron a pelear no por la comida, sino por la cuchara. Solté una carcajada y me fui.

Caminé y salí, realmente había ido al baño. No podía irme al salón estando de esta manera. Miré mi rostro en el espejo y aún tenía mis mejillas sonrosadas.

Hice lo que tenía que hacer, me lavé las manos, me sentía tan bien. Salí del baño y caminé hacia mi salón, el timbre ya había sonado.

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Narrador.

Estabas sentada en tu pupitre, realmente haciendo nada, faltaba poco para el segundo receso así que sólo tomaste tu lápiz e hiciste un rayadero en tu cuaderno. Cherry hacía lo mismo, el profesor no hablaba nada y el salón estaba en silencio sólo esperando el sonido del timbre.

Pero sentías que sólo sería el sonido, pues Cherry no quería salir, y si ella no sale tú te sientes vulnerable. Tenías tu mano en tu mentón mientras mirabas hacia afuera.

Finalmente el timbre sonó, todos salieron corriendo y el profesor ni se inmutó. Miraste a Cherry de reojo, sólo parecia estar cabeceando. Sonreíste y te paraste.

— Iré un rato a la cafetería, ¿no quieres venir?

— No, de verdad no he descansado bien... tengo tanto... — Bostezó. — Tengo tanto sueño. — Cruzó sus brazos y los puso encima del pupitre, acostándose. Le acariciaste la cabeza mientras sonreías, asentiste y fuiste caminando hacia la cafetería.

Compraste lo mismo de siempre... sabías que te hacía mal pero aún así lo comprabas. Yendo hacia la mesa donde solías sentarte con Pico, estaba Nene en su lugar, miraste a sus alrededores pero parecía estar sola. Caminaste hacia ella de manera cautelosa. Antes de que llegaras se levantó y se fue, soltaste una sonrisa de confusión pero de igual te sentaste.

No lograbas hallar que hacer, cada vez te sentías más y más sola. Soltaste un largo suspiro mientras jugabas con el fideo.

— ¿Oh, Senpai? ¿qué tanto miras? — Escuchaste una voz casi detrás tuya, levantaste la mirada y la dirigiste hacia atrás. Él estaba ahí, rodeado de unas 3 chicas. Una de ellas te volteó a ver. — ¿Es a ella?

Esa chica te apuntó con el dedo. La mirada de Senpai se apartó en el instante que lo miraste. Tú te asustaste un poco, tu corazón latía con tanta fuerza; te habías puesto nerviosa otra vez y sin razón.