Capítulo 6.

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–Si Jackson no sabe lo que está haciendo, entonces probablemente... tendrá que olvidar todo. El asesinato.– Dijo Allison por teléfono.

–O no lo recuerda.– Me encogí de hombros.

–¿Y si es lo mismo que le pasó a Lydia cuando salió del hospital?– Sugirió Stiles.

–¿Un estado de fuga?– Dijo Allison.

–No sabe que alguien lo está controlando.– Dijo Scott.

–Deshaciendose de la sangre.– Añadió Allison.

–Pero tuvo ayuda con una cosa; el video. Y alguien más lo ayudó a olvidar eso.– Dijo Stiles.

–Quien lo esté controlando.–

–¿Estás seguro de que Jackson no tiene ni idea de nada de esto?– Preguntó Allison.

–Él piensa que todavía se está convirtiendo en un hombre lobo y que estar con Lydia de alguna manera retrasó todo.– Respondió Stiles.

–Entonces, ¿tratamos de convencerlo de que no lo es?– Cuestioné. –Si nos ayuda a descubrir quién lo controla, entonces sí.–

–¿Crees que hablará con nosotros después de lo que hicimos?– Dijo Allison.

–Sí, somos nosotros– Stiles se rió un poco. –Él hablará con nosotros. ¿Verdad?–

~

–No os acercaréis a menos de 50 pies de Jackson Whittemore. No hablaréis con él. No se acercaréis a él. No lo podéis agredir ni acosar física o psicológicamente.– Nos informó el alguacil Stilinksi.

–¿Qué tal la escuela?–

–Puedes asistir a clases mientras intentas mantener una distancia de 50 pies.–

–Está bien, ¿qué pasa si ambos tenemos que usar el baño al mismo tiempo y solo hay dos cubículos disponibles y solo están uno al lado del otro?– Preguntó Stiles. Su padre le dio una mirada furiosa. –Solo lo sostendré.–

–¿Tengo que recordarte lo afortunados que somos de que no presenten cargos?– Dijo el Sr. Stilinski.

–Oh, vamos, fue solo una broma.– Stiles se rió.

–¿Una broma?–

–Sí, no pensé que lo tomarían tan en serio. Papá, el humor es muy subjetivo, ¿de acuerdo? Quiero decir, estamos hablando de múltiples niveles de interpretación aquí.–

–Uh-huh. Uh-huh. Está bien, bueno, ¿cómo se supone que debo interpretar exactamente la camioneta de transporte de la prisión robada, eh?– Levantó las cejas.

–¡Llenamos el tanque!– Stiles exclamó.

–Shay, danos un momento.– Su papá me sonrió.

Asentí con la cabeza y dejé a Stiles y a su padre solos y me dirigí al pasillo. Podía ver a Scott y su mamá en la distancia.

–No es solo esto. Aunque, una orden de restricción es un nuevo mínimo que no pensé que llegarías tan pronto. Es todo por encima. El comportamiento completamente extraño, las noches de regreso a casa, tener que suplicar Sr. Harris, para que recupere esa prueba de química que te perdiste.– Dijo su mamá.

Los ojos de Scott se agrandaron. –¿Me perdí un examen de química?–

–¿De verdad, Scott? ¿De verdad? Tengo que castigarte. Te estoy castigando. Estás castigado.–

–¿Qué hay del trabajo?–

–Bien, aparte del trabajo. Y sin televisión.–

–La televisión está rota.–

¹Fallen. - Isaac LaheyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora