{LA MEJOR AMIGA} JAMES POTTER

[SOMETHING'S WEIRD]

"El momento en el que el telón de la verdad cayó"

DECIR LAS COSAS en voz alta es terapeútico.

Al menos eso creí hasta el momento en el que solté aquellas estúpidas palabras.

A lo largo de mi vida había comprobado que el amor era un sentimiento increíble. Lo vi desde que tenía memoria con mis padres, viendo como se amaban cada día sin importar cuántas adversidades o obstáculos apareciesen. Vi a Molly enamorarse un poquito cada día más de Arthur y mira hasta dónde ha llegado su amor.

Y siempre había creído que cuando experimentase el verdadero amor, la sensación de enamorarse... estaría en paz.

Paz era lo último que sentía en aquellos instantes.

El amor es precioso si es recíproco. El amor es precioso cuando no te hace cuestionar si lo que sientes es correcto. El amor es precioso cuando no tienes esa sensación horrible de que estás a punto de arriesgarlo todo cuando lo ves.
Quería arrancarme las entrañas tan solo de pensar en el, porque enamorarse de James Potter fue el primero de muchos errores que cometería respecto a él.

Sentí náuseas, los nervios recorriendo todo mi sistema al pensar que, finalmente, lo había aceptado.

La única realidad de la que más quería huir me había atrapado y no soportaba sentirme tan desdichada porque este sentimiento jamás sería correspondido.

A fin de cuentas, James ya tenía a su pelirroja.

¿ y yo?

solo la mejor amiga.

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— Ten, te ayudará a entrar en calor — me dijo mi hermana mientras me ofrecía una taza de té.

Aún seguía sin recordar muy bien como había llegado a la madriguera y los momentos después, ni dos segundos de ahora, estaban completamente difusos para mí.

Tan solo podía pensar en las ganas de desgarrarme las cuerdas vocales para nunca volver a decir aquellas palabras.

Molly, al verme aún sin poder mantenerme por mi misma, me llevo a la sala de estar donde Arthur se encontraba con Bill y Connor.

Cuando me depositó en el sofá, volví a la realidad.

Miré a los dos pequeños infantes con gran ternura para distraerme y comencé a hacerle carantoñas que ellos disfrutaban.

Sin embargo, había cuestiones que necesitaban ser alzadas en aquel preciso momento.

— Así que... — dijo Arthur, mirándome picarón — ¿Sientes amor por James? Me alegra que por fin lo admitas, debe haber sido agotador estar ciega durante cinco años.

En cualquier otra situación me hubiera reído con él pero realmente me pregunté ¿sentía amor por James?

Una mirada a Arthur y Molly me hizo comprender que jamás seríamos James y yo así.

No estábamos destinados para serlo.

Entonces, estallé.