¡taráaaaan!
Han pasado casi 6 años desde mi última actualización y woow, hasta la fecha recibo notificaciones de corazones y comentarios. En parte, esta última actualización es debido a eso.
Preparé 4 historias más, serán oficialmente las últimas de este libro, solo espero no estar muy oxidada y lograr que la espera haya valido la pena:).
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Headcanon: Ruby se hace muy buena amiga de Tweek, ellos se vuelven tan unidos que Craig comienza a ponerse celoso.
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- Cuando digo que quisiera que pasáramos la tarde en mi casa no me refiero a esto, ¿lo sabes, no? - se quejó Craig mientras apoyaba el codo sobre la diminuta mesa de té y descansaba su barbilla sobre su mano en un gesto de aburrimiento total.
- Cállate, tienes suerte que dejemos a la servidumbre tomar el té con nosotros - Le contestó su pequeña hermana harta ya de todos los lloriqueos provenientes del más alto de los tres.
Tweek por su parte, sólo se limitó a reír sin disimulo. Le resultaba en extremo gracioso ver como discutían los hermanos Tucker, ya que los comentarios infantiles de la pelirroja lograban sacar de quicio a Craig.
Era la segunda vez esa semana que Craig invitaba a su novio a pasar la tarde en su casa después de la escuela, había planeado un maratón de Red Racer y una ingesta de comida insalubre que dejaría sus estómagos a reventar. Sin embargo, no pasaba más de un minuto de que Tweek entraba a la casa y su molesta hermana menor ya había acaparado toda la atención del de ojos verdes.
No sólo eso, si no que también el rubio también disfrutaba mucho de las ocurrencias de Ruby, y eso es lo que más enfurecía a Craig.
La pequeña siempre encontraba la manera de tomar todo el tiempo de visita de Tweek para ella, ya fuere con sesiones de dibujo o fiestas de té (como lo era en ese momento) orillando a Craig a participar en sus actividades pues genuinamente quería estar con su novio y parecía ser la única forma.
- Terminando esta fiesta de té podemos empezar a ver Red racer, ya puedes estar tranquilo - Prometió Tweek después de escuchar las quejas de Craig.
-¿Verán Red racer? ¡Yo también quiero! - exclamó Ruby, había pasado parte de su infancia viendo esa serie por su hermano, tanto que se había hecho una fan inconscientemente.
- Creo que mamá te habla - Dijo Craig fingiendo haber escuchado dicho llamado mientras señalaba la puerta en un intento desesperado por no permitir que su hermana siguiera quitándole a SU NOVIO.
Tweek notó lo que el pelinegro hacía y le dio un codazo a Craig.
La niña no era tonta, ya conocía ese truco así que paró el dedo a su hermano y dirigió la mirada hacia Tweek buscando su aprobación, a lo que el rubio asintió, logrando que la niña saltara eufórica de su sillita.
-En tu cara, idiota, Tweek dijo que sí- se pavoneó ante su hermano y corrió hacia la puerta pero antes que saliera el rubio la detuvo.
-Princesa Tricia, ¿no va a despedirse de sus invitados? - preguntó Tweek.
-Que se jodan, yo quiero palomitas - respondió Ruby, se dio media vuelta hacia la salida y continuó con su camino.
- Allá va nuestro momento en pareja - se quejó nuevamente Craig, esta vez por la adición de su hermana a la cita.
-Eres un quejumbroso - se rio Tweek plantando un pequeño beso en sus labios antes de levantarse de las pequeñas sillas.
- Deberías darte prisa si no quieres que encuentre los chocolates - añadió el de ojos verdes.
-Mierda - musitó Craig antes de levantarse abruptamente y correr por donde antes había salido su hermana. Si la niña descubría dichos dulces, no solo tendría que aguantarla toda la noche si no que tampoco podría callarla.
Esa tarde, ambos hermanos Tucker y Tweek la pasaron frente la televisor, comiendo y disfrutando. La pequeña se encontraba con la cabeza recostada en el regazo del rubio, mientras que Craig rodeaba los hombros de Tweek con el brazo.
"Al final, no fue un día perdido" pensó Craig mientras saltaba al siguiente episodio.
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Sé que oficialmente el nombre de la hermana de Craig es Tricia, peeero, así venía en la imagen y hay que mantenerlo por los viejos tiempos.
