-Monedas de Cobre- Libro 4 Sin Cambios

70 Encuentro efímero (I)

La voz de los aldeanos sonaba inquieta, como si hubieran alebrestado un enjambre de abejas, zumbando constantemente. Unas cuantas voces distintivas destacaban...

"¡El ave fantasma! El ave fantasma está aquí..."

"¿Por qué esa ave fantasma viene a nuestra aldea? ¿Será posible que cualquiera que lo provoque sufrirá una desgracia?"

"Se acabó, se acabó, vamos a morir, ahhhh...."

"No debería ser tan grave como morir, ¡pero puedes estar seguro de que algo malo va a suceder!

La supuesta ave fantasma no era una criatura extraña, era el ave negra que habitaba en la garganta de la montaña Boji y parecía haber sido criada por Xuan Min. Probablemente, como constantemente estaba empapada por la neblina densa de la montaña y su llanto era bastante peculiar, había sido demonizada por las personas de esta aldea.

Parecía que el ave negra fuera un cometa con alas y, si daba un par de vueltas más, toda la aldea acabaría cubierta de sangre.

"Oye..." El suave graznido sonó de nuevo y Xue Xian torció la boca. Este suspiro podría sólo asustar a otras personas, pero no era lo mismo para él, después de todo, cuando se había comportado lascivamente, ese suspiro se había transmitido a través de la densa neblina y había cantado en armonía con sus propios jadeos.

Esto era bastante vergonzoso.

Cuando Xue Xian escuchaba ese sonido, le dolía la cabeza, sus mejillas se sentían adoloridas y las manos le hormigueaban, quería golpear a esa ave y comerse a la gente.

Sorprendentemente, esa ave parecía tener conciencia propia y después de dar un par de vueltas sobre la aldea, sin saber que truco estaba llevando a cabo, voló en picada directamente hacia Xue Xian y los demás.

Afortunadamente, estas tres personas no habían llegado a las profundidades de la aldea, de otra manera, habría habido un completo caos a su alrededor.

El ave negra no era muy discreta, dio dos vueltas alrededor de ellos, se posó firmemente en el hombro de Xuan Min y le graznó suavemente, de manera cariñosa.

En ese momento, las personas de la aldea voltearon a mirar hacia ese lugar y gritaron aún más...

"¡Es un ave fantasma! Realmente es un ave fantasma, ¿lo ven? ¡Se quedó perchada en el aire!"

"Sí, sí, sí, es como si hubiera algo ahí que la está sosteniendo, pero no hay nada ahí, ¿¿cómo se puede sostener así??"

Originalmente, Xue Xian había usado un método que los hacía invisibles para poder entrar a la aldea sin causar revuelo, pero ahora, con esa tonta ave exponiéndolos de esa manera, los tres parecían ser un desfile y todos los aldeanos estaban mirando hacia el lugar donde estaban ellos con unas expresiones extremadamente vigilantes, si no hubiera sido por el rumor que decía que las aves fantasma no debían ser perturbadas, probablemente ya habría volado una escoba hacia ellos desde algún lugar cercano.

Sin embargo, la tonta ave no paró ahí, parecía que no le tenía miedo a los extraños en lo absoluto, inclinó la cabeza para mirar con interés a los aldeanos que no estaban muy lejos, y cuando vio que estaban temblando por el miedo, grazno de nuevo. "Oye..."

Muchas vueltas y giros después, el eco de su graznido aún perduraba y de pronto soltó otro.

Xue Xian estaba extremadamente sensible al sonido que emitía y, sin decir nada, le hizo señas al dueño del ave para que la callara sellándola con un talismán.

El ave negra. "..."

Parecía que había nacido en desacuerdo con Xue Xian, sus ojos negros y redondos miraron a cierto dragón que estaba haciéndose el tonto, se le erizaron todas las plumas del cuerpo y estiró el cuello para picotear hacia él con su agudo pico.