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Dylan Yandere.
Parte 1.

Aiden: ¿Oye que es eso? *Mira una planta de menta sobre un charco de sangre seca*

Dylan: *nervioso* Oh... No lo sé...

Aiden: Dulzura... Sabes que vivimos con asesinos... Seguro... Fue papá *refiriéndose a Toby*

Dylan: *respira profundo* ...

*Entonces Aiden nota una cosa inusual, una cosa brillante entre las ramitas una cadena con un dije de A*

Aiden: Sam...

Dylan: Aiden, ¿tenías que ser tan perspicaz? *Su mirada se vuelve sombría y pierde brillo*

****

Dylan: *hablando con el lector* Bueno, se lo que parece... Soy un hipócrita que finge ser un niño inocente y consentido. Pero no finjo y deberían conocer mi versión...

Desde pequeño siempre considere a Aiden un modelo a seguir, era lindo, divertido e incluso me divertía como coqueteaba con mi papá Cody, después de todo era su tío. Yo pasaba mucho tiempo a su lado, lo cual me hacía sentir como si tuviera un hermano mayor.

Pero entonces, llegó esa mocosa molesta.

Miranda, la primer novia de mi tío, era bonita debo admitir y yo para ese entonces tenía 9 años y ella solía jugar con mis mejillas cada que iba a casa era linda conmigo. Pero la odiaba. La aborrecía y deseaba que papá experimentara con ella, que la hiciera horrenda a los ojos de Aiden, vomitiva tal y como yo la veía.

La última vez que la vieron con vida.

Aiden había salido y ella llego de sorpresa. Solo estábamos yo y Papá, pero él estaba ocupado. La recibí y le servi un vaso de jugo no sin antes darle su ración diaria de saliva. Me sentía fascinado de saber que esa idiota bebía mi saliva y que parecía disfrutarla.

—Pequeño Dyl —me llamo mientras yo lavaba los platos, la ignore pero ella insistió —¿Dyl?
—Dylan... —dije con fastidió.
—¿Qué?
—Dije... DYLAN, ¡ME LLAMO DYLAN!

La mire a los ojos y no se veía que le sorprendiera mi reacción.

—Y ahí está... Sabía que me detestabas, y créeme es mutuo pequeño engendró —dijo y jugo con mis mejillas una última vez, sonrió y soltó todo el veneno que pudo —Sé que estás enamorado de mi novio mocoso, pero él es mío y me lo llevaré para siempre, haré que te olvide.

En ese momento tenia un cuchillo en las manos y ella seguía y seguía, no sé callaba y estaba harto. Entonces volteé hacia ella y clave el cuchillo en su costado, ella se desplomó en el suelo y se arrastro justo a la salida mientras yo caminaba despacio con aquel enorme cuchillo goteando sangre. Ella grito y escuché una puerta abrirse tras de mi, entonces me lance sobre ella y la apuñale gritando:

—¡CÁLLATE! ¡CÁLLATE! ¡CÁLLATE!
—Dy... Dylan... —era la voz de mi papá.

Incorrect Quotes Creepypasta #3 (Shipps Creepy)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora