Capítulo 2

3.9K 310 9
                                    

*Narra (T/N)*

     Otro día igual a los demás... me desperté en una habitación blanca, tan blanca que me dolerían los ojos si ya no estuviera acostumbrada. 

     Tenía un dolor punzante en mi tobillo, aunque ya estaba acostumbrada, después de todo desde que llegué aquí tengo esa cadena que no impide que me levante, pero si que me acerque a la puerta de mi habitación/celda. 

     Por el largo de mi desordenado cabello y las visitas que he estado recibiendo de un chico y una chica se que ha pasado un año y medio o dos años... no se muy bien, sin nada que hacer no se darme cuenta del tiempo. Hoy si no mal me equivoco me tenía que venir a ver el chico para examinar mi estado de salud mental y mi salud física, la cual se había deteriorado un poco por la falta de movimientos como correr o acarrear cosas, sin embargo al poder levantarme seguía estirando y ejercitándome un poco para que mi salud física no se deteriorara por completo. 

     Estaba estirándome un poco mientras esperaba al chico cuando vi la perilla de la puerta comenzar a moverse, esa, junto con el dolor de mi tobillo, era mi señal para detenerme y volver a sentarme. 

     Miré a un punto fijo en la pared, así era como el chico siempre me encontraba así que no quería perder la costumbre. 


-(T/N) - Esa no es la voz del chico, giré de inmediato mi cabeza y vi a la chica parada en el marco de la puerta. - ¿cómo estas hoy? - Me preguntó mientras cerraba la puerta tras ella. 

-Bien... ¿dónde esta él? - Pregunté refiriéndome al chico. 

-Ya no vendrá más, pero es posible que lo veas pronto. 

-Solo si llego a salir de aquí... extraño ver y sentir el pasto del área. - Ella era la única con la que podía hablar así que solía desahogarme con ella. - Ver el cielo... las paredes del laberinto... hasta extraño los malditos rugidos de los penitentes por la noche. 

-¿Y extrañas a alguien? - Me preguntó sentándose en el suelo frente a mi. 

-... Extraño... a Minho - Respondí con una sonrisa ligera. - hablar con él por las noches me relajaba mucho... también extraño al larcho de Gally con su constante mala cara... y Newt... ese shank es a quién más extraño de todos los habitantes.

-¿Nadie más? - No se porque me hace tantas preguntas. 

-A Clint y a Jeff... principalmente ellos cinco son a quienes extraño. 

-¿Y a los demás? 

-También... solo hay una persona a la que no extraño pero de la que no me puedo olvidar por más que lo intente. 

-¿El chico del que me hablaste cunado llegaste? - Asentí. - ¿Cómo se llamaba? 

-Alexander... - Sin darme cuenta mis manos comenzaron a cerrarse y a temblar. - ese...

-Tranquila - Me dijo la chica tomando mis manos y haciendo que volviera en mis sentidos. - ya ha pasado mucho tiempo desde eso, y aquí no pueden hacerte daño. - Bueno me parece que tiene razón. - Escúchame (T/N), es posible que en unos días más yo ya no este aquí. - Eso me alarmó. 

-¿C-como que no?

-Tranquila - Volteó rápidamente la mirada a la puerta y luego volvió a verme a mi. - escúchame bien - Comenzó a hablarme en voz baja. - una de estas dos noches, dos noches, vendrá alguien aquí, no te resistas si trata de sacarte de la habitación, no te harán ningún daño. 

-¿Pero para que lo-?

-No puedo decírtelo (T/N), solo advertirte que no te resistas, estarás bien así que no te resistas, ¿de acuerdo? - Lo pensé unos segundos, de momento no había tenido razones para desconfiar de ella así que asentí. - Bien, recuerda, una de estas dos noches y no te resistas. - Asentí de nuevo y entonces la chica me abrazó, era extraño, nunca lo hacía pero yo correspondí. - Ya debo irme (T/N), recuerda lo que te dije, ¿si? 

-Lo haré. - Me abrazó de nuevo, luego se levantó y se acercó a la puerta. 

-Nos vemos. - Me dijo dedicándome una sonrisa, aunque en sus ojos se la notaba algo triste. 


     Cuando cerró la puerta comencé a pensar mejor en las cosas que me había dicho. ¿Por qué quería dejar tan en claro que no debía resistirme? ¿por qué el chico ya no esta?... debo distraerme de eso un poco o si no mi mente comenzara a... no se como llamarlo pero debo hacer algo para que no pase... haré unos abdominales en... mi cama, no quiero tirarme al piso... si eso haré, haré unos abdominales antes de que vengan con mi comida.

Es nuestra única corredora T2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora