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La mañana del miércoles estaba llena de ansias, miedos, angustia, euforia, y sobre todo nervios. 

Ese día comenzaban las ultimas actividades desde temprano. Lo primero en la lista de todos, y sobre todo algo que habían esperado desde hace mucho, era el partido final del equipo de hockey sobre hielo, contra "Winter Wolves".

Jeno se había despertado de la misma manera que en todos los partidos anteriores, pero con un dolor en el pecho que oprimía y molestaba. Ignoró aquello todo el camino a la escuela, se dirigió derecho a la pista donde se iba a efectuar el ansiado partido unas horas mas tarde. 

Como siempre, el entrenador, Mark y Haechan eran los primeros en la pista. 

Esta es tu gran oportunidad muchacho, estarán aquí solo por ti, no debes desconcentrarte—escuchó decir al entrenador mientras Mark asentía con una sonrisa nerviosa.

¿Pero...entonces ellos estarán todo el tiempo viéndome...?

Eres el centro, nuestro mejor jugador, esto ya no es un juego de niños, Mark—retó el entrenador.

Jeno de acercó a Haechan, quien estaba de espectador a unos metros con un semblante gris.

—¿Me perdí de algo?— preguntó. Donghyuck ni siquiera lo miró al responder.

—Un equipo entero vendrá al juego directo desde Nevada, solo para ver a Mark.

—Wow, eso es estupendo ¿Por qué no estas feliz?

Donghyuck ahora miraba el piso, podía distinguir un pequeño temblor en su labio inferior.

—Lo quieren en su liga, y lo mas probable es que acepte y se vaya. No es que este enojado, estoy feliz. Hace mucho que él quería esto, ser reconocido. Pero no se si este preparado—dijo en voz baja para que nadie mas que Jeno escuchara.

—¿Quién no esta preparado? ¿Él o tu?—cuestionó mientras recibía una mirada molesta del moreno.

—Cállate, ni siquiera se por qué te cuento esto.

—Somos amigos—afirmó Jeno.

—¿Lo somos? Pensé que ya no—rio sin gracia.

—Nunca he dejado de verte como mi amigo, si estuvimos algo distanciados, pero no botare años de amistad en unas semanas—sonrió.

Haechan quedó pensativo—deberías tomar tus palabras y aplicarlas con alguien mas.

Jeno lo miró desconcertado, mientras Haechan caminaba hasta Mark y lo tomaba de la mano. 

(...)

Las horas pasaron mas rápido de lo imaginado. Las gradas ya se estaban llenando, el ambiente estaba tenso, pero con mucho animo por parte de aquellos que iban a apoyar a sus cercanos.

—En 5 minutos todos entraran a esa pista y darán lo mejor de si mismos—comenzó el entrenador con sus palabras de aliento. Casi siempre las escuchaba atento, y otras, como ahora, solo vagaba por su mente. 

Su mirada en las gradas, con la imagen de Jaemin en los partidos anteriores en su mente. Esta vez no lo vería, estaba seguro. 

Había sido un idiota, se lo había repetido casi toda la mañana y ya comenzaba a aceptarlo. 

Lo único que lo volvió a la realidad fue el fuerte sonido que anunciaba por fin el primer tiempo del partido. Todos entraron a la pista animados y se pusieron en sus respectivos lugares. Ya no había tiempo para divagar, era dar todo o nada.

No había tiempo para imágenes en su mente, no había tiempo para pensar en las lindas sonrisas que le dedicaba Jaemin todas las mañanas, ni en los sonrojos que amaba provocar, ni en los suaves toques de sus manos, que recordaba a la perfección debido a aquella cita que el mismo había planeado. No, ya no había tiempo.

El pitido nuevamente anunció el inicio del partido, ahora con el disco en movimientos, y todos tras él.

(....)

El primer tiempo había pasado sin ningún inconveniente, aunque ningún equipo logró anotar un punto. 5 minutos de descanso era mas que suficiente para los 6 muchachos que ahora se miraban entre si, parecía que sus ojos estaban en llamas. 

—¿Harás el cambio?—dijo el entrenador a Ten

Todos los demás los miraron expectantes. Ten asintió y se sacó el casco mientras otro jugador se arreglaba para suplirlo. 

Jeno lo miró por ultima vez antes de volver a entrar a la pista. 

Este seria un tiempo mas reñido. Se hizo notar desde el primer momento, cuando el centro del equipo contrario empujó con todas sus fuerzas a Mark. Por poco y el canadiense cae, y no hubiera sido una caída muy bonita. 

Jeno miró a Haechan y este entendió de inmediato, debía proteger a su pareja de esos salvajes. 

Todos los jugadores se movían rápido y preciso. Haechan estaba frente a Mark, pero una sucia jugada hizo que el moreno terminara acorralado por dos tipos y a Mark a la intemperie. Todos sabían que iba a suceder ahora.

Se deslizó lo mas rápido que pudo hasta su compañero, pero no fue lo suficiente rápido y solo pudo ver la dolorosa escena y como segundos después el arbitro interfería para que todos dejaran de patinar y entraran los paramédicos. 

El grito de Mark se escuchó por toda la pista, mientras los abucheos y gritos llenaban los oídos de los presentes. Haechan aun estaba algo lejos de los demás, pero eso no les impidió escuchar como este gritaba enfurecido a los del equipo contrario y patinaba hasta donde estaba el que había dañado a su pareja.

Jeno y Winwin fueron tras Haechan, mientras este estaba a punto de agarrarse a golpes con el chico. Sus ojos estaban llenos de ira, pero sobre todo preocupación. 

—¡Basta, Donghyuck!—intentaba parar el líder del equipo, pero el moreno hacia oídos sordos a todos, solo quería golpear al hijo de puta de hirió a Mark y lo sacó de la pista en una camilla

El arbitro vio como ambos equipos discutían fervientemente, y vio a ambos chicos gritarse con cólera. Fue tras ellos y solo él pudo parar la pelea tras insistir y amenazar en ponerle una sanción a ambos por mala conducta. 

—Vamos, hay que ver a Mark— dijo Jeno a Haechan, este asintió de inmediato y fue hasta donde se encontraba el canadiense 

El entrenador lo miraba con enojo, pero no le importo. Solo podía ver como su movió se quejaba por el intenso dolor en su pierna izquierda. 

—Tiene un gran desgarre en todo su muslo, no puede continuar—dijo uno de los paramédicos

El entrenador vio a Mark, quien ahora estaba siendo consolado por Haechan, quien intentaba aguantar sus lagrimas. 

—¿Qué hará?—cuestionó Winwin

La mirada del adulto fue a parar a los demás chicos que miraban hacia donde estaba Mark, enfocándose únicamente en el único chico que podría suplir al canadiense. 

—¡Sungchan, vas a entrar!— gritó el entrenador mientras caminaba hasta el muchacho

Play and Love ·NCT·Donde viven las historias. Descúbrelo ahora