Miraba esa alma con detenimiento podía ver los números alrededor de esta, podía ver su esencia, era el alma de frisk podía jurar que era así.
Giro su vista para ver a los esqueletos, ellos sólo miraban el alma de cada humano de su propio mundo pensando en mil formas de solucionar todo ese embrollo, suspiro para volver a ver el alma que se posaba sobre sus guantes, ese pequeño punto debía ser la solución; cerró sus ojos con fuerza tratando de recordar los momentos en los que había tenido el poder del reset sabía que en parte ese poder funcionaba por el deseo de querer cambiar algo que hiciste y después sólo aprendes a controlarlo, abrió sus ojos y se concentró en esa alma intentar ya do crear una pantalla concentrándose en su deseo de regresar en el tiempo, pero nada, no sucedía absolutamente nada.
-soy humano no puedo absorber almas-
Recordó y se dijo mentalmente, había olvidado ese pequeño detalle había estado capturando almas gran parte de su vida e investigando las, era obvio que no podía usar la magia de un humano si no la absorbe, pero es humano no puede hacer eso, sólo monstruos pueden.
-Iré a la sala del rey-
Hablo antes de alejarse de los esqueletos, se adentró a la del rey mirando aquel trono que sólo le recordaba aquellos momentos en los que frisk hacía rutas pacíficas, lindos recuerdos. Recordaba perfectamente la batalla del rey contra frisk, como papyrus aparecía repentinamente y todos poco a poco empezaban a reunirse en aquella sala; sonrió de forma ladina al recordar el momento en que aquel fantasma los atacaba y frisk lo enfrentaba, esa escena emotiva en que ese fantasma se rendía y empezaba a llorar y disculparse.
-tú jamás absorbiste un alma ¿Cómo hiciste para destruir la barrera? No diste tu vida, no te sacrificaste, en cambio esas almas te seguían e hicieron lo que tu querías ¿Cómo? -
Chara habla en su propia mente mirando esa pequeña alma que flotaba sobre sus manos, al parecer no había investigado lo suficiente como para saber qué hacer para que un alma haga lo que tú quieres. Camino al trono del rey sentándose en este cerrando sus ojos, apenas se sentó su cuerpo se relajó y le pedía un descanso soltó una pequeña risa al imaginarse a asriel regañando por su flojera, sin más se durmió sobre ese trono creando una pequeña cueva entre sus manos y su pecho manteniendo el alma inmóvil.
- ¿QUE ESTA PASANDO? -
-no lo sé, sólo dejó de funcionar-
Se levantó notando un profundo negro a su alrededor muy conocido, siempre veía esa infinita oscuridad cuando frisk reseteaba, podía escuchar voces discutir giro entre si buscando de donde provenían; bastó con caminar un poco para ver a lo lejos a frisk discutiendo con alguien más que parecía flotar ligeramente.
-que acaso tu alma ya no tiene energía -
-estaría muriendo entonces-
Se quedó mirando y escuchando, se le hacía muy conocida aquella forma flotante, miro con detalle a quienes discutían y aún no se percataban de su presencia, pudo notar un gran parecido entre esos dos seres, uno era ligeramente más alto que el otro, su vestimenta era similar; el mismo abrigo, el mismo pantalón corto, los mismos zapatos y podía jurar que tenían el mismo corte de cabello con la diferencia de que uno parecía emo.
Se concentró únicamente en la compañía de frisk, su abrigo era negro con una franja rosa, pantalones azules y zapatos negros, cabello corto negro y desordenado además de que tapaba uno de sus ojos igual de negros. Fue entonces que su mente recordó a aquellos amigos fantasmas del segundo humano caído, los de aquel accidente y de los que había varias grabaciones que frisk ya había estado husmeando, tomó con fuerza su cabeza negando varias veces ¿Cómo podía ser eso? Ese fantasma debía de estar muerto debería de estar inexistente en esos momentos ¿Cómo seguía con vida? ¿Por qué estaba junto a frisk? Nada tenía sentido.
Dio un paso hacia atrás de manera brusca haciendo que los que discutían giraron sus cabezas a esa dirección en ese momento los ojos de chara se dilataron y se movió con brusquedad.
-la sala del rey-
Esa espesa oscuridad había desaparecido, estaba en la silla del rey aun sosteniendo do ese torso de alma.
-hey, capucha verde-
-eeh, papyrus, perdón no vi que estabas ahí-
-ya lo creo estabas en un profundo sueño-
Habló el más alto moviendo a un lado dejando ver también a Sans.
- ¿Cómo hiciste eso? -
-mm hacer que, ¿Dormir? -
Habló el de azul con seriedad creando un ambiente tenso que fue roto con la respuesta del de verde.
-a lo que él se refiere es que mientras dormías el alma en tus manos brillaba y por un par de segundos frente a ti se abrió una pequeña grieta, no servía nada de igual forma, pero ¿Cómo lo hiciste? -
Chara se quedó en su lugar abriendo sus ojos dejando ver sus pupilas cafés encogerse mientras procesaba esa información, ¿abrió una grieta?
-yo no sé-
Bajo su mirada a aquella alma, luego la giro a las manos de sus contrarios notando que ellos llevaban también ese fragmento de alma.
-donde están las sombras-
-en el pasillo, dejaron de moverse, parecen muertas-
Chara apenas escuchó eso salió corriendo al pasillo, pudo ver como los huesos y cuchillos aún mantenían a las sombras, era verdad. no se movían.
-hey capucha verde no corras así-
Habló el de naranja soltando humo de su cigarrillo.
-hey-
Trato de llamar su atención siendo algo nulo, chara ni siquiera le ponía atención sus ojos estaban concentrados en las tres sombras. Sans y papyrus se mirón entre sí, la actitud de su acompañante estaba siendo algo rara.
Sans mostró desconfianza ante esto
-creo saber cómo salir de aquí-
Sus ojos se manteníanentre esas sombras, era la misma profunda oscuridad de aquel lugar que ya habíavisto infinidad de veces, giro su mirada a las almas de sus compañeros, teníacódigos diferentes, podía verlo, pero aquellas sombras parecían ser lo mismo,más allá de su distinta forma y tamaño eran lo mismo, la misma profundaoscuridad.
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no es real
FanfictionTodo eso que en algún momento llegaste a amar lo vez destruirse alfrente de ti, y no importa cuánto hagas, no sabes cómo terminará todo. Solo espera que sea bueno