🅃🄸🄽🄳🄴🅁🔥
~¡Felicidades, Metawin!
𝙋𝙖𝙧𝙚𝙘𝙚 𝙦𝙪𝙚 𝙩𝙪 𝙮 𝘽𝙧𝙞𝙜𝙝𝙩 𝙨𝙚 𝙜𝙪𝙨𝙩𝙖𝙣. ❤️
¿𝙀𝙣𝙫𝙞𝙖𝙧 𝙪𝙣 𝙢𝙚𝙣𝙨𝙖𝙟𝙚?
"[Si]🔥
"[No]
Lo único que el pequeño Metawin pudo pensar fue un:
"¿Como dices que dijiste?".
Lo único que p...
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Metawin caminaba dando saltitos por la universidad; ese día no había podido almorzar con su Alfa, primero porque llevaba clases desde la mañana y segundo porque al parecer su pareja tenía un compromiso, sin embargo no tenía problema con ello, ya que tendría clases con él toda la tarde y eso era algo que el Omega le gustaba mucho. Y estaba aún más emocionado, porque sus papás le habían dado permiso para que el Alfa durmiera en su casa y con él en su camita. De todos modos los mayores sabían que no podían hacer mucho si intentaban mantenerlos separados, estando los dos bajo el mismo techo.
Iba tan ensimismado en sus bonitos pensamientos, que no pudo evitar asustarse y gritar cuando unos brazos lo rodearon por la cintura y empezaron a darle vueltas rápidamente. No fue sino hasta que la persona se detuvo y que escuchó la risa de su mejor amigo, que se dio cuenta que todo había sido una cruel trampa. Y cuando se dio la vuelta, efectivamente pudo ver a su amigo y cuñado Alfa, con una sonrisa culposa y con su brazo rascándose la nuca debido a la vergüenza.
"Lo siento, WinWin. Khao me amenazó con no dejarme besarlo su no te asustaba y te daba vueltas". Dijo como excusa el pelinegro.
Metawin respiró agitadamente tratando de contar hasta diez para poder calmar sus nervios los cuales se habían puesto de punta, pero simplemente no podía; se había asustado demasiado. El castaño al ver que su amigo seguía sin reírse y con la mirada cristalizada, se apresuró a abrazarlo y ayudarlo a que tomará asiento, mientras le susurraba palabras tranquilizantes y conciliadoras.
"Lo siento, bebé, en serio lo siento. Oh por dios, ¿Qué hice? ¡Ohm esto es tu culpa! Nonono, es mi culpa. Aish, que mal amigo soy. Winnie Boo, tranquilizate, en serio no quería asustarte tanto. Por favor no vayas a llorar o tu Alfa pateara el trasero de Ohmchis y de seguro también el mío. Aunque me lo merezco pero... Nonono, perdóname, te prometo que no lo voy a volver a hacer. Te prome-".
"¡Deja tu diarrea verbal y sueltame!". Le interrumpió enojado y un poco más recuperado del susto el pelirosa. "¡Te retiro la palabra y no me sigas! Estoy decepcionado de ti, Khao".
Sé pudo de pie mientras trataba de verse serio y demostrar claramente su disgusto con la broma.
El de mechas verdes sabía el miedo que tenía hacía los Alfas, y aunque el pelinegro fuera su amigo, del susto inicial ni siquiera pudo detectar su aroma.
