🅃🄸🄽🄳🄴🅁🔥
~¡Felicidades, Metawin!
𝙋𝙖𝙧𝙚𝙘𝙚 𝙦𝙪𝙚 𝙩𝙪 𝙮 𝘽𝙧𝙞𝙜𝙝𝙩 𝙨𝙚 𝙜𝙪𝙨𝙩𝙖𝙣. ❤️
¿𝙀𝙣𝙫𝙞𝙖𝙧 𝙪𝙣 𝙢𝙚𝙣𝙨𝙖𝙟𝙚?
"[Si]🔥
"[No]
Lo único que el pequeño Metawin pudo pensar fue un:
"¿Como dices que dijiste?".
Lo único que p...
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Bright estaba disfrutando demasiado la situación. No podía creer como era que tenía tanta suerte últimamente.
Si bien al principio había estado cabreado, todo sentimiento negativo se había ido luego de ver a su pequeña bolita de algodón -porque si, Metawin ya le pertenecía a Bright, sólo faltaba la confirmación del menor y listo- Y todo había sido tan... Loco, que el Alfa casi creía que todo ese percance/encuentro había sido planeado.
¿Por quién? Quién sabe. Pero Bright definitivamente le daría las gracias.
En serio, la vida era tan buena, que había quedado sentado al lado del amor de su vida. Aunque eso tenía bastante que ver con el señor Opas-iamkajorn, que parecía haberlo hecho a propósito.
Luego de haber entrado al restaurante todos juntos, el señor Opas-iamkajorn le había dicho a la recepcionista que irían al lugar de siempre. Al parecer, su jefe tenía una zona reservada sólo para él y su familia en la segunda planta.
Bright por un momento creyó que iba a ser un área diminuta, puesto que la familia del señor Opas-iamkajorn sólo era de tres personas. Pero unos pasos más adelante, les explico que en el lugar iban a cenar con más personas de su familia; como los primos de Metawin u otras familias amigas.
Cuando llegaron al lugar, habían preparado una mesa para seis personas junto al ventanal, pero solamente dos sillas estaban pegadas a este. Bright imaginaba que la familia de su jefe se iba a sentar en una fila y ellos en otra, pero al parecer eso no estaba en los planes del señor Opas-iamkajorn, ya que antes de que se sentaran comentó de forma casual:
"Ah. A mi esposa y a mi Winnie les gusta sentarse al lado del ventanal. Por eso cuando venimos solos, Winnie se sienta frente a nosotros. Espero que no les moleste que uno de ustedes se siente junto a mí, para que mi bebé pueda sentarse también junto al ventanal... Entiendan a éste padre consentidor". Dijo con una sonrisa.
Y Metawin sólo se pudo convertir en un tierno tomatito, otra vez.
"Por supuesto que no nos molesta señor". Habló rápidamente el bronceado.
