Horizon Zero Dawn: Descongelando al Pasado [OCxAloy]

Allam Blake: El soldado Antiguo

Luego de haberse reencontrado con Vanasha, nuestro soldado Antiguo y Huavid prosiguieron con la misión a regañadientes.

Allam Pov

Faltaba poco para llegar a la orilla del lago, quizás si podríamos hacer esto sin problemas y sin más enfrentamientos. Escuchamos gritos a lo lejos, eran los Eclipse.

Como me imaginaba, a los Eclipse no les hizo nada de gracia que se llevaran a su rey.

Vanasha: Llévense al príncipe y a su madre, el Antiguo y yo nos encargaremos de los Oscuros-le ordenó la mujer morena a su escuadra, los cuales asintieron.

Yo: Será bueno que pudiéramos poner unas trampas, podríamos emboscarlos con ellas y rematar a los que queden-dije mientras me ponía a cubierto detrás de una roca, preparando mi arco.

La morena me pasó una bolsa, la abrí extrañado y vi que estaba llena de trampas incendiarias y explosivas.

Yo: Yippeee ki-yay hijos de puta-dije con una sonrisa mientras empezaba a colocar las trampas para los sectarios.

Nos ocultamos detrás de unas rocas y escuchamos pasos acercándose, de repente explosiones y gritos humanos se escucharon, prepararé mi arco y flecha y dispare contra sectario o máquina corrupta que estuviera en mi camino.

Otros dos escuadrones Eclipse aparecieron, pero no tardaron en encontrar el mismo destino que sus compatriotas.

Después de estar un rato luchando, Vanasha y yo salimos de nuestra cobertura, creo que ese era yo último grupo. Vanasha se acercó a hablar conmigo.

Vanasha: Oye, no sabes cuanto agradezco que aún estés aquí-me dijo ella, yo solo la miré con algo de recelo.

Yo: No tenía opción...me mentiste y me usaste-le respondí a ella con recelo.

Vanasha: Y aún así te quedaste, ¿Por qué?-me preguntó lo mujer.

Yo: Por el niño...y porque quizás esta sea la única forma en la que pueda volver a Meridian en corto tiempo-le respondí mientras seguíamos caminando.

Un gran rugido metálico fue escuchado a varios metros delante de nosotros, lo que sea que hizo ese ruido era grande, demasiado grande diría yo. Dos guardias Carja aparecieron detrás de nosotros.

Guardia: Señora, el príncipe y su madre están en el bote. Tenemos que irnos ya-dijo el hombre y Vanasha asintió.

Yo: ¿Que carajos fue eso?-dije mientras empezábamos a correr hacia el barco.

Y ahí lo vi, era un gran Tiranosaurio metálico. Media tres pisos de altura, traía armadura blanca y una especie de cañones en su lomo y en su cara.

Yo: ¿¡Que mierda es esa cosa!?-grite asustado de muerte mientras corríamos, había visto máquinas impresionantes, pero esto era un nivel de ridiculez increíble, ¿Por que carajo GAIA haría una máquina asesina?

Vanasha: Es un Atronador, una máquina de combate-me dijo la mujer.

Llegamos al bote y lo arrancamos, empezando a alejarnos de la orilla. El atronador y los eclipses llegaron a la orilla y nosotros ya estábamos lo suficientemente lejos de ellos. No se veían para nada felices.

Sobre un suspiro que tenía guardado y sentía que me desmayaría en cualquier momento. Más nunca en mi vida quiero volver a ver esa maldita cosa. Me va a dar pesadillas de tan solo pensar en ella.

Vanasha se acercó y me puso su mano en mi hombro, cosa que hizo que la mirara.

Vanasha: Oye, gracias por ayudarme...se que la mayor parte del tiempo te utilice, pero fue por una causa mayor...sin resentimientos, ¿no?-me comentó ella y a decir verdad, tenía todo el derecho del mundo el estar molesto con ella...pero por alguna extraña razón no estaba tan molesto como antes.