She Is My Light. (Ella es mi luz. Traducción)

Capitulo 5 💫

Los personajes del manga/anime Naruto son propiedad intelectual del Sensei Masashi Kishimoto. Esta historia pertenece a la autora littlebear9297 quien con su autorización me permite traerles esta traduccion. ありがとう
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Narrador omnisciente.

Sasuke miró a su alrededor, realmente se había quedado dormido por un minuto, se frotó los ojos y notó que el saco de dormir de Hinata estaba vacío. Se quedó un segundo observando, tal vez ella se había ido a hacer sus asuntos privados. Después de 20 minutos se levantó y camino hacia donde vio un par de pasos.
Una vez que Sasuke llegó a un claro, vio a Hinata meditando frente a una pequeña cascada. Se quedó y vio como ella se levantaba lentamente y comenzaba a estirarse y girar, parecía como si estuviera bailando con el viento.
Sasuke se apoyó contra el árbol y solo miró. Hinata había sentido que el estaba cerca pero lo ignoró. Han estado juntos durante casi un mes viajando. Ella puede sentirlo de inmediato.
Seguía estirando todos sus músculos doloridos, le encantaba sentir el viento en la piel, hacía un tiempo que no podía dormir. Tenia pesadillas sobre la muerte de Neji.
Hinata giró una vez más bajando el pie, se sentó y respiró hondo.  No ha practicado este aflojamiento muscular desde hace mucho tiempo. Consiste en diferentes estiramientos en forma de baile.  Dar vueltas mantiene su cuerpo fresco.
Dejó caer su cuerpo en posición sentada. Ella gimió y dejó que su cuerpo cayera hacia atrás sobre el frío suelo.
-Nunca había viajado tanto tiempo- se rió a carcajadas. Hinata podía escuchar sus suaves pasos acercándose a ella.
-Hmm, parece que han pasado unas 3 semanas desde que estuvimos en una posada, ¿no es así, pequeña Hime?  Lo siento.  Supongo que me he acostumbrado a dormir afuera- Ella rápidamente negó con la cabeza.
-No, está bien, me gusta dormir afuera- Sasuke se giró para mirar a Hinata. Llevan viajando casi 1 mes. Ella ha mejorado muchísimo.  Solo se quita la venda de los ojos de vez en cuando.
Sasuke se ha estado divirtiendo mucho, ella es una buena compañía, trabajan muy bien juntos. El recordo a la pequeña y tímida Hyūga que veia cuando los clanes tenian su reunion anual.  Recordó haber hablado con ella cuando la dejaron sola y llevarla de regreso a su padre.
Solía pensar que sus ojos eran muy hermosos, todavía lo hace.  Todavía tienen ese tinte lavanda. Nunca había visto a otro Hyūga con ese color.
-Sasuke, recuerdas cuando éramos pequeños y teníamos citas para jugar? –  seguía mirando a Hinata. Su largo cabello estaba extendido a su alrededor. Parecía que tenía reflejos azules. Su piel era clara y pálida, pero sus mejillas estaban enrojecidas.
-Hmm, pensaba que eras un chico con una yukata- Hinata rápidamente se levantó y lo enfrentó quitándose la venda de los ojos. Sus grandes ojos lavanda pálidos brillantes se enfocaron en él.  -Sasuke, realmente me veía como un niño cuando era pequeña? –
-Todavía lo haces, esta vez con el pelo largo- Hinata hizo un puchero y Sasuke sonrió, sin pensar le tocó la frente. Se quedó helado cuando lo hizo. Sus ojos se agrandaron, Hinata le sonrió y se frotó la frente. Antes de que pudiera preguntar qué era eso, Sasuke se levantó rápidamente y comenzó a alejarse.
-Volveré antes de que salga el sol- Desapareció de inmediato. Hinata se sentó y miró donde había estado parado hace unos segundos.
A Hinata le preocupaba si hizo algo mal, tal vez no debería haber traído el pasado. No es bueno para el. Hinata hizo una mueca de dolor, probablemente le había hecho recordar las muertes de su clan.
Hinata se palmeó -Deberías haberte quedado callada, Hinata-. Se regañó a sí misma. Se recostó y miró el cielo lleno de estrellas.  Realmente deberías quedarte callada Hinata- murmuró en voz baja para sí misma. Cerró los ojos esperando que esto no hiciera mella en su creciente amistad, bueno, así es como Hinata ve este entrenamiento / vacaciones.
Sasuke pov.

Miré mi mano moviendo los dedos. Estaba en la cima del árbol más alto que pude encontrar. Suspiré y miré al cielo. No puedo volver a tener estos sentimientos por ella. Fue simplemente un flechazo por el amor de Kami, básicamente eramos niños pequeños.
Cerré los ojos cuando comencé a escuchar voces, gritos de personas que había matado. Podía ver sus muertes incluso con los ojos cerrados. Me estoy volviendo loco lentamente. Cuanto menos duermo, más empiezo a alucinar. Hice una mueca cuando la muerte de mis padres se repitió en mi mente.
Respirando profundamente, traté de concentrarme en otra cosa.
-Está bien!! No tengas miedo, estarás bien. Lo prometo! –
Mis ojos se abrieron instantáneamente. Miré a mi alrededor
-Hinata- dije su nombre como si hubiera pasado por mis labios varias veces.
Llevé mi mano a mi frente frotándola y suspiré.
Recordé a Hinata diciéndole esas palabras exactas a una niña pequeña que no podía bajar de un árbol. Había estado jugando con otros niños así que pensó que era una buena idea esconderse en el árbol. Pero supongo que olvidó que no tenía idea de cómo volver a bajar. Estaba llorando suavemente cuando casi llegamos al pequeño pueblo escondido entre las nubes. Era un pueblo en lo alto de las montañas. Fue genial para meditar, por eso sugerí este lugar. Hinata esta mejorando cada vez más con sus otros sentidos.
Ella escuchó los suaves sollozos primero y rápidamente caminó hacia alla, yo la seguí. Ella se aferraba con fuerza a la rama casi rota.  Hinata rápidamente le aseguró que estaría bien y así era. Ayudó rápidamente a la pobre niña.
Gracias a eso la pequeña volvió a casa. Supongo que reproducir esas palabras en su voz suave ayudó a que todas estas alucinaciones desaparecieran. Por ahora han empeorado.
El problema es que si duermo y tengo un ataque de nervios, podría lastimar a Hinata sin querer. Estoy seguro de que escuchó de todos que me diagnosticaron clínicamente inestable. Lo soy, lo se. La última vez que tuve un ataque de nervios cuando estaba con Naruto, me desperté en el hospital.
Sakura me dijo que estaba asfixiando a Naruto, pero él usó su última fuerza para noquearme. Rápidamente me llevó al hospital.  Antes de eso, pensé que me estaba torturando a mí mismo al recordar cada muerte que había ocasionado, pero no, está grabado en mi mente.
Suspiré y me froté los ojos. Sigo olvidando que solo tengo un brazo cada vez más. Mi equipo sigue presionándome para que me haga el implante, pero creo que esto es apropiado para mí.  Es exactamente lo que merezco después de todo el infierno que he causado con ambos brazos.
Miré al suelo a mi izquierda cuando escuché voces. Entrecerré los ojos y activé mi Sharingan. Rápidamente agachándome donde estaba sentado, me incliné tratando de ver mejor. Retrocedí instantáneamente cuando dos adolescentes cachondos aparecieron casi desnudos. Me incliné tanto hacia atrás que me caí de la rama en la que estaba, golpeándome con todas las demás ramas todavía nervioso por lo que había visto.
Me caí y me quedé sin aire, los escuché hablar más fuerte y no esperé más, me levanté rápidamente y regresé al campamento.  Cuando estaba lejos, y casi en la cascada donde dejé a Hinata, me detuve y me apoyé contra un árbol. Gemí y me agaché, me dolía la espalda y podía sentir un par de cortes profundos.
-Sasuke? Oh, Sasuke! Estas bien? Oh querido kami, mírate.  ¿Peleaste con alguien? Hay alguien todavía siguiéndote? Oh, déjame activar mi..-
-NO-
Rápidamente la agarré del brazo y la bajé al nivel de mis ojos agachados. Ella chilló y con los ojos muy abiertos cayó de rodillas frente a mí. La miré profundamente a los ojos. Mi Sharingan estaba girando, solo la idea de que ella activara su Byakugan me preocupa, quién sabe qué podría pasar.
-Escúchame y quiero que grabes esto permanentemente en tu mente, NUNCA y realmente quiero decir NUNCA activaras tu Byakugan mientras esté aquí, te protegeré. Nunca dejaré que nadie te lastime. Sé que no eres débil, pero te protegeré pase lo que pase. Me escuchas? – la miré a los ojos asegurándome de que entendiera la seriedad de mis palabras.
Sus ojos se llenaron de lágrimas y rápidamente me abrazó poniéndome tenso.
-Oh Sasuke, estaba preocupada de que lo que había dicho antes, hiciera mella en nuestra amistad- miré a la cabeza de la niña llorando. Es por eso que ella todavía estaba aquí? Le preocupaba que dejara de hablar con ella o que me enojara de alguna manera?  Oh, Hinata, si supieras que los sentimientos que había intentado dejar atrás estan regresando. Pero lo sé y todos los demás lo saben.  -Te mereces algo mejor, mi pequeña Hime-
-Eh, has dicho algo Sasuke? – miré sus grandes ojos brillantes.  Negué con la cabeza y le di unas palmaditas en la espalda.               
-Pequeña Hime solo estoy un poco herido, nadie me atacó. De repente me sentí mareado y me caí del árbol. Eso fue todo.-
Raspé mi cabeza, miré hacia abajo cuando comencé a sentir que mi cara se calentaba. Por lo que había visto y la pobre excusa que acababa de decir. Debería haber dicho que había peleado con alguien, me había encargado y ya.
Rápidamente me soltó y me miró fijamente. Entrecerré los ojos y la miré cuando sus labios empezaron a temblar con ganas de sonreír, luego se mordió el labio tratando de no sonreír y sus ojos se movieron rápidamente. De repente, soltó un bufido y se echó a reír. Entrecerré los ojos y fruncí el ceño alejándola suavemente, rodando los ojos, haciéndola caer, pero ella siguió riéndose de mí.    
-Lo-lo siento mucho, de hecho me-imaginé eso- Se reia suavemente entre sus manos. Respiró hondo y se puso de pie, el sol comenzaba a salir. Yo también me pare, quedando más alto que ella. Su cabeza llegaba a mi barbilla.
-Vamos pequeña Hime, busquemos una cama caliente. Estoy bien, nada serio-
-Insisto Sasuke, déjame comprobar si estás bien-
Pasé junto a ella y rápidamente me siguió. Cuando me volví para mirarla, todavía estaba sonriendo. Negué con la cabeza hacia ella.  
-Estoy bien Hime, vámonos- No la dejé discutir el tema rápidamente mirándola, ella cerró la boca y suspiró asintiendo. Le di un último asentimiento y lidere el camino de regreso para recoger nuestras cosas.