Pisadas se escuchan cada vez más cerca de mis aposentos, las puertas son abiertas y puedo sentir una segunda presencia cerca de mi a pesar de estar dando la espalda a esta, cualquiera sabría lo que sucedería después de que los aposentos de un príncipe sean profanados por la noche, tal y como sucedió con mi hermano Ibrahim.
Desde el momento de su muerte cada noche yace bajo mi cabeza la daga que de pequeños nuestro padre nos regaló, suena irónico decir que la misma persona que te dio la vida y te vio crecer en un solo pestañeo ordene tu muerte, pero en este palacio lo único que importa es el poder siendo la única diferencia entre la vida y la muerte, lo que me trae a mi vida actual en donde soy presa de mis propios demonios y miedos mientras espero cada noche despierto el momento en que por esa puerta crucen los verdugos enviados por mi padre y tal parece ha llegado el momento en donde decido morir o vivir así que cuando siento un leve toque en mi espalda decido que hoy no será mi última noche…
-Mi príncipe, soy yo mi príncipe
-Reyhan Aga ...- exclamó desconcertado ya que uno de los sirvientes personales de mi padre.
-Me ordenaron llevarlo a los aposentos del Sultán- hablo después de retirar la daga de su cuello.
Al parecer mi padre quiere tomar mi vida con sus propias manos, que clase de padre hace eso con su propio hijo
-¿Porque su majestad desea verme a esta hora? ¿Es una trampa?
Su silencio me aterra más mientras esté se dedica solo a ayudarme a prepárame para la visita a los aposentos del Sultán.
Mi cuerpo es dominado totalmente por el miedo y mientras recorro el camino tan conocido que incluso puedo andar por el con los ojos vendados recito una plegaria esperando y está me ayude a enfrentar mi destino está noche..
"Mi apoyo durante las penurias, mi ayuda en tiempos difíciles, mi señor omnipresente, protegeme y ayudame con tu infinito poder"
Perdido en mis pensamientos regreso a la realidad cuando Reyhan Aga me indica que continúe solo, es el escenario perfecto para mí ejecución, mientras recorro este pasillo guiado solamente por las antorchas colocadas en los muros observo como mi vida pasa frente a mis ojos y me detengo al llegar a las puertas de mi destino, los Agas encargados de las puertas me permiten el paso a los aposentos y lo primero que veo es como toda la habitación y concubinas de mi padre están vestidas totalmente de negro y eso solo puede significar una cosa.
-Mi príncipe- uno de los sirvientes me indica avanzar hasta el balcón donde se encuentra mi abuela la Gran Sultana Madre Seulgi junto con los pashas del consejo y sirvientes cercanos.
-Sultana Seulgi
-Jimin nuestro amado nieto,tu padre Sultán Park Siwoon ha fallecido, nos ha dejado y ha partido hacia el reino eterno- en ese momento mi mirada se posa dónde yace mi difunto padre -Tu amanecer comienza ahora, este es tu día, desde ahora el bendito trono de Osman te pertenece a ti Sultán Park Jimin.
Y mientras todos los presentes se inclina ante mi dirigí mi vista hacia el amanecer que apenas comienza intentando asimilar las palabras dichas por la Sultana Seulgi.
"Yo Sultán Park Jimin acsendi al trono cuando menos lo esperaba"...
Isla de Sefalonia, 1603
-Adios cariño te extrañare, adios- son las palabras de un hombre mientras se despide de su familia y al instante llega a sus oídos una hermosa voz tarareando la tan conocida melodía.
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EL Doncel del Harem (PAUSADA)
FanfictionEl príncipe Park Jimin visita los aposentos de su abuela la Sultana Seulgi y se encuentra con la pintura de Jiwoo un adolescente de origen griego. Jimin queda impactado por la belleza del joven y su abuela se percata de ello, por tal motivo ordena c...