Guerra de Dioses

Negación

Mientras pasaban todas estas batallas en el mismo momento Hermes se encontraba en el inframundo.

Aunque en su recorrido tubo muchas dificultades para entrar al inframundo más de lo normal estaba algo extrañado, porque al entrar no solo estaba Cerbero protegiendo la entrada si no también Tifón tuvo que correr lo más rápido que pudo para escapar.

Y por el camino se encontró con un montón de expectros y monstruos que lo atacaron.

Después de un duro y largo viaje.
Hermes llega al castillo de Hades y Persefone pero en la puerta del castillo estaba Hecate vigilando y le detuvo el paso.

Estuvo un buen rato debatiendo con Hecate para que le dejara pasar y que el no tenía ninguna intención de dañar al dios del inframundo después de un rato Hecate se lo pensó y le dejo entrar al castillo.

Cuando se adentra en la sala del trono ve a Persefone y a Hades en sus tronos igual de altos e imponentes pero de materiales similares y con diferencias realmente discretas.

Hades se levanta de un golpe al ver a Hermes y Hermes se estremece ante su presencia y algo sorprendido.

Hades: Hijo de Zeus ¿Que estás haciendo aquí? ¿No tienes una guerra por terminar? - Cuestiono y a la vez sorprendido.

Hermes: ¿Urano no te había maldecido?- Pregunta extrañado.

Hades: ¿Como te atreves a dirigirte de esa forma tan vulgar ante mi? - Digo enfadado y amenazante.

Persefone: Hermes si has venido para molestar será mejor que te vayas antes de que te mande hacia el Tártaro.

Hermes: Perdone Reina Persefone Rei Hades necesitamos su apoyo y del inframundo usted es el único dios que puede sellar a los Titanes fuera del inframundo.

Persefone: Primero atacais a mi esposo y lo tachais como traidor ¿Acaso esperabas que os ayudáramos?- Digo con un tono de enfado en la voz.

Hermes: Por favor os lo imploro si el Olimpo desaparece vosotros también desaparecereis.

Persefone: El inframundo siempre a ido por un lado diferente al Olimpo así que en teoría no.

Hermes: ¿Que queréis? Y yo os lo daré con gusto.

Hades: Soy el dios de las riquezas así que no necesito nada material y el amor de mi vida esta a mi lado así que no me falta nada.

Hermes: Tiene que haber algo que quieras siempre se quiere tener algo. - Dice desesperado.

Persefone: Hermes márchate antes de que te eche yo a patadas.

Hermes: Al menos hazlo por tus hermanos o por tus hermanas.

Hades: Ash, que pesado eres. Antes he sentido como muchos han muerto y tengo bastante trabajo. Así que tomad esto y vete de una maldita vez- Le da el Rosario para sellar a los Titanes- Zeus y Poseidon sabrán como utilizarlo no me necesitáis cuando terminéis me lo devolveis y lo pondré en lo más profundo del Tártaro ahora márchate.- Ordena.

Persefone: Tienes suerte Hermes porque si hubiera sido yo te hubiera tirado al Tártaro.

Hermes: Gracias, supongo.- Me fui a toda velocidad que pude volvi al mundo mortal.

Se fue hacia el Olimpo donde se desataba la batalla final pero Hermes tenía un mal presentimiento. El sabía perfectamente que aunque Zeus y Poseidon sellarán a Urano, lo más probable es que antes de llegar al inframundo para sellarlo por completo saldría, ya que ellos al no saber manipular almas ni nada lo máximo que duraría Urano dentro son 30 segundos como máximo.

(En un capítulo mencione que Poseidon y Zeus sellaron a los restantes titanes, era porque estaban en el inframundo ahí tenían muy pocas probabilidades de salir aquí en el Olimpo nada les ata asi que podrían escapar.)