Verano en Daegu // KookTae

Capítulo 12

Taehyung iba ocupado pensando en las notas de producción, escenario y decorado cuando entró por el camino que llevaba a su casa.

Subió las escaleras del porche luchando por mantener en equilibrio la montaña de papeles que amenazaba con caérsele de los brazos. No vio que Jungkook estaba allí, de pie, dándole la espalda frente a la puerta de entrada hasta que se chocó contra él y todo lo que llevaba en los brazos se le cayó al suelo.

- Eyyyy... ¿eras tú quien conducía el autobús que acaba de atropellarme? - Lo sujetó del brazo para que no se cayera y se acuclilló a su lado para ayudarle a recoger los papeles que había esparcidos por ahí.

- Lo... lo siento - tartamudeó - Estaba distraído pensando en mis cosas, haciendo malabarismos con los papeles y ni siquiera te había visto. Dios mío, qué desastre - dijo, observando el montón de papeles que cubría el porche de la entrada. Se había levantado una suave brisa y algunos de los papeles empezaban a volarse hacia el jardín - ¡Oh no, que no se vuelen!

- No te preocupes, te ayudo a recogerlos todos- Los dos salieron disparados tras los papeles como si fueran una pareja de cazadores de mariposas; en cuanto se acercaban lo suficiente a una de las hojas, el viento volvía a levantarla del suelo y tenían que salir corriendo tras ella de nuevo. Se rieron mientras perseguían los papeles por el jardín de la entrada, como un par de niños. En cuanto, por fin, tuvieron todos los papeles, se dejaron caer en el columpio del porche y Jungkook le ayudó a ordenar el desastre. Aún seguían sin aliento, riéndose como locos.

Jungkook tomó uno de los papeles que había recogido y le echó un vistazo.

- ¿Notas de producción? - preguntó Jungkook con cierta sorpresa

- Sí - respondió Taehyung, sonriendo- Al parecer me he dado de lleno con un trabajo a tiempo parcial: voy a dirigir el musical del Festival de Verano.

- Supongo que les habrás caído del cielo. Yoongi me dijo que Minho se había fugado y que estaban buscando un nuevo director.

- Bueno, pues creo que ese soy yo.

La expresión de Jungkook se volvió seria. - Taehyung, el nuevo teatro estatal es importante para los habitantes de Daegu. No te lo tomes a la ligera sólo porque no sea Seúl.

El comentario le dolió mucho más de lo que le habría gustado admitir. - El que viva en una gran ciudad no significa que no sepa apreciar las representaciones de un pueblo. Crecí aquí, Jungkook, y sé lo importantes que son las cosas pequeñas cuando no tienes la oportunidad de ver las grandes.

- Oye, no te lo tomes tan a pecho - dijo Jungkook, alzando las manos - sólo quería que lo supieras. No te gustan los pueblos ni nada de lo que implique vivir en ellos; sólo pensé que no querrías perder el tiempo en una producción sin sentido como la de Daegu.

Puede que al principio no hubiera querido implicarse en el asunto, pero a medida que pasaban las horas, la idea le había ido pareciendo cada vez más apetecible. De todas formas, ¿proyectaba ese tipo de actitud con respecto al pueblo? ¿Cómo si pensara que el no tenía nada que ver con lo que sucediera allí?

- No creo que sea una obra sin sentido, ¿así es como me ves?

Se encogió de hombros con indiferencia y respondió:

- Sólo digo lo que pienso; no tengo ni idea de qué pensará el resto.

Trató de ignorar la punzada de dolor que le atravesaba el estómago.

- ¿Cómo te atreves a suponer que sabes nada acerca de mí? ¿Se puede saber quién te crees para juzgarme? Apenas nos conocemos.

- ¿He tocado algún tema delicado? Tal vez estés revelando tu verdadera naturaleza más de lo que te gustaría.