Si pudieras cambiar el pasado, ¿serías capaz de dejar atrás a todos aquellos que alguna vez formaron parte de él por un deseo egoísta? Los deseos son peligrosos; son peligrosos porque reflejan quienes realmente somos. Son peligrosos porque también son el reflejo de los sentimientos egoístas que se pierden en lo efímero; en nosotros. Porque no importa si tenemos que pisotear a otros para hacer que se cumplan. Porque no nos fijamos en nada más que en nosotros mismos cuando se nos presenta la mínima posibilidad de hacerlos realidad. No importa cuánto dañemos si al final vamos a progresar como seres vivos.
El fin siempre justifica los medios, ¿no es así?
Está bien tener deseos; nos fortalecen, nos hacen luchar por un futuro. Está bien detenerse a descansar un rato en el lado oscuro de la luna, pero si dejas que te consuma, quizás sacar esa oscuridad de tu interior sea más difícil de lo que imaginas.
Blue Sky tenía un secreto. Blue Sky era la ciudad producto de una calamidad. Una calamidad que lo había destruido todo muchos años atrás; y que según muchos creyentes había dejado en el camino un peligroso legado. La magia.
Incapaz de mantenerse en secreto, no era de extrañar que uno de cada diez niños nacieran con habilidades físicas superiores y genes mágicos. Esos niños, quienes más tarde se convertirían en Arém, eran retirados de sus familias, siendo las mismas condenadas a guardar el secreto. La existencia de estos niños superdotados debía mantenerse en la oscuridad. Aquella regla buscaba evitar que los jóvenes pudieran ser explotados tanto de forma doméstica como para propósitos militares.
Y había alguien que se encargaba de realizar ese trabajo.
El líder de los Arém.
Con ayuda de las brujas más poderosas de Blue Sky decidió que la mejor opción era levantar una barrera que impidiera a los habitantes de la ciudad salir de ella y a la gente del exterior formar parte de una sociedad a la que no pertenecían.
Pero esto solo es una leyenda con verdades a medias, ¿no?
—Señor Ray, tenemos dos nuevos.
—Envía a Número 2 y a Número 6 por ellos. Ya saben lo que tienen que hacer después.
—Es extraño que no vaya usted mismo Señor. ¿Ha sucedido algo?
—Sí, tengo algo importante que hacer. No te preocupes Lyka, regresaré por la noche a más tardar. Necesito que mientras tanto hagas algo por mí.
A medida que se alejaba del hotel, las calles iban quedando cada vez más vacías y silenciosas. No tenía idea de cuanto llevaba caminando, pero suponía que mucho porque su rumbo ya no tenía sentido. Estaba completamente perdido y todas las construcciones le parecían idénticas. En el cielo, el sol comenzaba a quemarle la piel, pero no parecía tener intenciones de cambiar de acera. Sus sentimientos revueltos y el pesar de su caminar acompañaban a Tyler hacia ninguna parte en busca de una mínima pizca de regocijo.
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Blue Sky: El comienzo del fin
FantasyEn la enigmática ciudad de Blue Sky, donde los sueños más oscuros cobran vida y la magia palpita en cada rincón, Tyler y Kiara se encuentran atrapados en una historia de calamidad y repetición. Atrapados en un ciclo del que no pueden escapar, los jó...