₁₅

2.7K 200 13
                                    

Me removí entre sus unos fuertes y cálidos brazos, hacía frio, pero el pecho de Tae era calentito y acogedor. Sentí unos labios posarse en mi coronilla y luego escuché el chasquido de un corto beso. Levanté la cabeza recién tomando autocontrol y conseguí ver a Tae, quien ya estaba despierto. Me regaló una sonrisa y me dió un tierno pico en los labios. Yo sonreí y volví a acomodarme en su pecho.

-¿Dormiste bien?

-Como un bebé -respondí sonriendo levemente volviendo a cerrar los ojos- ¿Qué hora es? -sentí como su mano comenzó a acariciar mi cabello.

-Las siete - responde

-¿Las siete?

-Aún es temprano. Sigue durmiendo si quieres -me alejé de de su pecho, me apoyé en mi brazo como pude sujetando las sabanas con mi otra mano para cubrirme y mirarlo a los ojos.

-Tengo que irme a casa. Ashh, Dios mío soy una irresponsable por no estar con mi hija ahora mismo -iba a levantarme pero recordé que no tengo ropa.

-Oye, oye, espera -lo miré- ¿Quieres calmarte?, posiblemente Lisa y Eun-Sang estén durmiendo, solo irás a despertarlas, ve más tarde ¿Está bien? -sugirió pasando un mechón de mi pelo detrás de mi oreja, suspiré volviendo a su regazo.

-¿Cómo es que estás tan... despierto? Yo estoy muriendo de sueño.

-Estoy programado para despertarme a las seis, es algo automático de mi sistema nervioso -reímos- mentira, es la costumbre

-Lo sé.

-No  podré dormir. Nunca sé aprovechar ni siquiera los domingos, algo me impide no levantarme a las seis -emití un sonido para indicarle que lo escuchaba.

-Tae...

- ¿Sí?

-No tengo ropa.

-¿Y qué? Me gustas más sin ropa -de forma auténtica mis mejillas estuvieron rosadas por la vergüenza.

-Oh vamos no hables así -pedí casi inaudible

- ¿Así como?. Me gusta decir la verdad -cerré los ojos deseando que se callara- ¿Nos duchamos juntos?

- Hablas como un pervertido -recriminé.

- ¿Pervertido yo?. ¿Quien me pedía más fuerte ayer ah?

- ¡Oye! -esta vez si me aparté de su pecho para regañarlo de frente.

-¿Qué? ¿Estoy mintiendo?. Oh, ya sé! quieres que te lo recuerde, ¿verdad?

-Por supuesto que no!- Rectifiqué de inmediato con las mejillas más que rosadas. Con una sonrisa me tomó de las mejillas para unir nuestros labios en un beso que me tomó por sorpresa. Me besó hasta el cansancio, asegurándose de que no pudiera separarme ya que me tenía sujeta a él.

(...)

Miraba a Tae vestirse con un común jeans de mezclilla teniendo ya puestos unos converses blancos marca Fila. Ahora se colocaba una sudadera celeste que cubriría su torso. Yo solo tenía un albornoz, no sabía que camisa tomar. Las moví cada una con mi dedo pero estaba indecisa, eran muchas y no sabía cual escoger. Tal vez le molestara que escogiera alguna en especial

-Solo toma una me dice sonriendo, y me da una color blanco.

- Oh... bueno, de todas formas todas son iguales -me encogí de hombros con un leve puchero.

- Ven aquí, dame un beso -me quitó la camisa de las manos lanzando ésta a la cama y me atrajo para besarme.

Partiendo de juntar nuestros labios los movimos saboreandonos mutuamente. Pasé mis brazos por sus hombros y los dejé detrás de su cuello. Sus manos iniciaron un toque en mi trasero que me encantaba pero no quería excitación de por medio así que me aparté y lo miré a los ojos.

Broken Wings (ᴋ.ᴛ.ʜ ʏ ᴛᴜ)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora