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Dos semanas después.

-Listo, ve por tu desayuno, lo dejé echo para ti -dije poniendo de vuelta el pomo de perfume en su lugar.

-mami, ¿Bob esponja es ahora? -asentí mirándola- . Iré a verlo, ¿qué hiciste de desayuno? -pregunta saliendo por la puerta para ir a verlo por si misma.

No le respondí y me dediqué a hacer la cama. Hoy tenía mi segunda ecografía y esta de más mencionar que Taehyung iría conmigo. Ahora que sabe todo es difícil que se niegue a algo tan importante y menos si trata sobre el bebé.

Es el padre más preocupado del mundo y me cuida mucho.

Me acerqué a mi armario y elegí cualquier ropa, una casual. Blusa de botones color blanco con un pequeño cuello y un también pequeño amarre que dejaba ver un poco mi abdomen, el cual parecía no querer crecer, no se dejaba ver mucho, se notaba un muy muy pequeño cambio pero si no digo que estoy embarazada nadie lo sabría.

Un jeans no tan ajustado color negro y unos converses del mismo color, más una gargantilla. Le apliqué un leve brillo a mis labios y recogí mi cabello en una coleta.

Eché todo lo necesario en mi bolso y salí para ver a Eun-Sang mirado atenta al televisor a la vez que se comía lo que le preparé.

Puse mi bolso sobre un sillón y me preparé una comida rápida para mí. El helado de la madrugada ya lo había vomitado por completo en el retrete cuando me levanté, así que si o si iba a comer algo.

Le encargué a Eun-Sang a Jungkook mientras yo salía y bajé para encontrarme con Tae.

(...)

Miré como la amable doctora de anteojos que me atendió la vez pasada esparció el contenido frío y transparente sobre mi vientre tras yo subir mi blusa.

-Veamos cómo va ese pequeñín- comentó tomando el aparato para colocarlo sobre mi piel embarrada del denso líquido y conseguir que el extraño dibujo se reflejara en la pantalla del computador.

Giré un poco mis ojos para ver a Taehyung a mi lado. Hace mucho que me cuesta mirarlo porque solo me recuerdo a mi misma lo mucho que lo quiero y lo mucho que me quiere él a mí.

Un nudo se provocó en mi estómago al verlo sonreír con los labios entre abiertos mirando con suma curiosidad.

Dios, ¿me quieres siquiera un poco?, ayúdame a vivir con esto. Este embarazo es la cereza del pastel de los problemas

Guié mis ojos al centro de atención para deleitarme con la imagen borrosa y dispareja.

No es que detestara a la vida que llevo en mi vientre, claro que no, es mi hijo, o hija, independientemente del género. No es que lo desprecie o algo, tal vez al principio si, quería abortar pero lo decía sin pensar porque estaba dolida y no quería cargar con más preocupaciones. He sabido aprender a encariñarme un poquitín más.

-Evoluciona bastante bien, está creciendo fuerte, a pesar de que la madre es delgada. Tn, deberías comer más- dijo riendo levemente

-Oh, como mucho créame- respondí haciendo que los ojos de Tae me enfocaran

-Perdone la pregunta pero, ¿dónde está exactamente el bebé?...estoy algo perdido, disculpe -habló él apenado llevándose una mano a la nuca.

-Descuida- dijo ella- Es aquí, ¿Lo ves?- Tae lo encontró y asintió frenéticamente mientras reía - No está del todo definido, es normal que a veces le pierdas el rumbo. Conforme pasen los meses se podrá visualizar mejor tanto por el crecimiento del vientre de la mamá como por el ultrasonido.

Broken Wings (ᴋ.ᴛ.ʜ ʏ ᴛᴜ)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora