Hunting Under The Metallic Moon (James HetfieldxTu)

49 Una Despedida

-lo que TN trata de decir es... que tu tomes esta decisión, sea cual sea, te apoyaremos- interviene Kirk –no es así?- pregunta hacia mi

-sí, eso...- digo bajando la mirada mientras me levanto, sintiéndome cobarde por no poder decir lo que pienso

-gracias, a todos, pero...- dice volteando a ver al anciano –voy a respetar mi decisión: me iré con mis amigos, pues aún tenemos un álbum que terminar- responde a lo que yo suprimo una sonrisa colocando mi mano sobre mi boca

-pero, volverás?... verdad?- habla Selene, mientras baja sus orejas y mira a James con los ojos muy abiertos

-claro que sí, quizá en un par de meses; después de todo no planeo dejarlos sin un líder- dice el gris acercándose más de lo necesario a la loba roja

-bien, entonces, vámonos. Recuerden que mañana deben regresar al estudio- digo interviniendo

-oh mierda, olvide completamente lo de nuestras "pequeñas vacaciones"- dice Lars –gracias por recordarme- me dice después

-cuando quieras- digo sonriendo con cierta malicia, sabiendo que Selene me está viendo, a lo que en su mirada se refleja el enojo y para mí, eso es una pequeña victoria

-entonces, nos veremos- se despide el gris de la loba, guiñándole desapercibidamente el ojo

-ok, estuvo muy bien el tour y todo eso, pero ya debemos irnos- Lars al anciano

-de acuerdo. Hadvar, ven aquí!- dice Rasmodius mientras por la puerta entra el lobo acompañado de su hermano

-me llamaste- dice

-si, por favor, acompáñalos hasta que sea seguro su camino- pide el anciano

-así lo hare. Esperare en la barrera- dice el lobo para después irse

-y que hay de mí, puedo ir?- pregunta Elliot

-me temo que no, después de lo que me has dicho, lo mejor es que no salgas por un tiempo- responde aun con molestia al pequeño

-bien- dice con molestia mientras sale también de la choza

-ya se le pasara- dice Rasmodius mientras niega ligeramente con la cabeza

-supongo que debo devolver esto- digo mientras me quito el collar de cuentas, lo coloco en mi mano y la extiendo hacia el anciano

-no, no, considéralo un regalo, por salvar a Elliot- dice el tomando mi mano y llevándola a mi corazón, causando que por un momento sienta como un pequeño calor crece en el interior de mi mano, hasta que el me suelta

-gracias- digo mientras vuelvo a colocar el collar en mi cuello, dejando ver por un segundo los cuatro dijes de plata, a lo que rápidamente ajusto mi chaqueta, esperando que él no los haya visto

-andando- dice Lars y todos los seguimos, sin antes dar una última mirada a esa loba roja adulta, pues aun intentaba recordar en donde la había visto antes...

-así que...se van- dice Lucio mientras aparece caminando por uno de los techos de una choza cercana, para después dar un salto y ponerse delante de nosotros

-así es- dice James, mirándolo y midiendo sus movimientos –porque?- chasquea con brusquedad

-por nada, solo quería darles una recomendación: cuiden sus espaldas- dice mientras gruñe en bajo

-Lucio, ya que has vuelto, ven a la choza, Minerva te estaba buscando- dice Rasmodius saliendo de su choza, detrás de nosotros

-como ordenes- dice entre dientes y pasa a un lado de James, empujándolo un poco con su hombro a lo que el de ojos azules gruñe también por el pequeño impacto

-déjalo, estoy seguro que pronto arreglaras cuentas con el- dice Lars calmándolo, a lo que James resopla y reanudamos el camino. Cruzábamos la barrera cuando el pequeño Elliot apareció detrás de nosotros

-esperan, quiero despedirme y... agradecerte nuevamente por salvarme TN- dice el pequeño lobo

-claro, espero volvamos a vernos pronto- digo agachándome y acariciando su cabeza

-pues no será muy pronto mientras estés castigado- dice Hadvar

-lo sé, lo sé, solo, espero que el abuelo me perdone pronto- dice bajando las orejas y gimoteando un poco –en todo caso, adiós- dice mirándonos a todos y cruza la barrera de nuevo corriendo hacia la choza de su abuelo

-iremos lo más rápido que podamos, si desean volver Los Ángeles en el menor tiempo posible- dice Hadvar estirando sus patas delanteras

-sí, puedo seguir el paso- aseguro antes de que alguien pregunte

-andando- dice el mientras todos corremos siguiendo el camino hacia el túnel

Algunas horas después corríamos entre el bosque, cerca de aquel local donde estaba la ropa de los chicos, cuando por el rabillo de mi ojo me pareció ver algo que corría junto a nosotros, solo podía ver con claridad un par de ojos amarillos que iban a nuestra velocidad

-alguien más puede ver eso?- pregunto a los demás

-qué cosa?- pregunta Jason

-algún animal nos está siguiendo y va a nuestro paso, a nuestra derecha- digo y todos nos detenemos casi de golpe

-yo no veo nada- dice Kirk

-yo no percibo nada- dice Lars inhalando con fuerza con su nariz al viento

-debió de ser algún zorro o algún lobo salvaje, después de todo, estamos en un bosque- dice con algo de molestia Hadvar, por detenernos tan bruscamente

-sí, tienes razón, mejor sigamos- digo, pensando como pude olvidar que hay toda clase de seres vivos en este bosque, por lo que después de esa pausa continuamos hasta llegar al local abandonado, donde todos toman de nuevo su forma humana y vuelven a vestirse

-supongo que a partir de aquí pueden continuar seguros- dice Hadvar

-sí, volveremos a Los Ángeles en nuestro jet- dice Lars peinando con su mano su cabello algo desacomodado

-gracias Hadvar, por todo- dice James mientras estrecha manos con el joven

-no, gracias a ti. Con ese pequeño acto de presencia, créeme que has cambiado mucho en el clan y lo más importante, le has demostrado a Lucio que hay más de uno dispuesto a clavar sus dientes sobre su engreído cuello- responde Hadvar para después ambos reír un poco

-antes de irme- dice Hadvar caminando un poco hacia mí –quería disculparme por haberte juzgado tan duro antes, ahora veo que no todos los humanos son malvados- continua

-olvídalo, está en el pasado y eso es lo único que importa- digo sonriendo a lo que el asiente con la cabeza

-hasta entonces- dice y corre en dirección al bosque, perdiéndose entre los arboles

-vámonos, antes de que se pregunten dónde estamos- dice James y nos internamos en la ciudad, alumbrando con su luz artificial la noche