35. El plan de Fleur

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Ninguno de los personajes me pertenecen (excepto algunos de mi invención como Audrey, Froda y otros que irán apareciendo), historia basada en las novelas de J. K. ROWLING
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La adrenalina de esa noche había pasado por completo, se encontraba acostado en su cama y escuchaba como el viento chocaba suavemente contra la ventana.

Algo no lo dejaba dormir, algo además de la muerte de Ojoloco por supuesto, y es que Remus y él no habían tenido éxito al encontrar su cuerpo.

Sin embargo sabía que había algo que se le estaba olvidando, pero no lograba recordar qué.
Regresó sobre sus pasos a días anteriores y fue cuando lo supo, no había leído una carta que Percy le había entregado pesonalmete el día que fue a probarse trajes al Callejón Diagon. Ese mismo día habían tenido la junta en donde Ojoloco les había dado las instrucciones finales para sacar a Harry de Privet Drive y fue después de la junta y hablar con Audrey que Fleur se había acercado a él.

-Bill- dijo ella- ¿gecuegdas la cagta que te entgegó Pegcy hoy?

-Cierto, no la he leído- contestó Bill sacándola de su bolsillo, mientras caminaba hacia un sillón- ¿vienes?

-Estaba pensando, no segía mejog que la leyegas en otgo momento. Becca me acaba de contag que Pegcy y ella ya no están en una gelación, y tu me dices que Pegcy se veía un poco tgiste, quizá sólo es eso. Cgeo que segía mejog concentgagnos en la misión y después de tgaeg a Haggy a salvo, puedes leeg la cagta- propuso ella. Bill lo pensó un momento. Suponía que Fleur tenía razón, cuando había visto a Percy en el callejón, se le veía triste y cansando. Había intentado hablar con él antes, pero sin éxito. Quizá sólo le diría que su relación con Audrey había llegado a su fin y, conociendo a Percy, no quería,ser molestado con el asunto, o interrogado.

-Creo que tienes razón, tenemos que estar concentrados para la misión- dijo soltando un suspiro- aunque quizá quieras guardarla tu, sé que la tentación de leerla me ganaría- terminó Bill tendiendo la carta hacia su prometida.

Sus pensamientos volvieron al presente, no podía creer que hubiera olvidado la carta. Bueno después de todo lo que había ocurrido en las últimas horas quizá sí era posible. Decidió ir con Fleur. Esta se encontraba en el cuarto de Percy, sus padres y hermana llegarían hasta dentro de cuarto días, así que estaría sola.

Todos en la casa dormían y no se escuchaba ningún sonido más que los que llegaban del bosque o del jardín. Bajó rápidamente las escaleras hasta llegar frente a la antigua habitación de Percy y sin llamar, entró rápidamente para volver a cerrar la puerta tras él.

Recibió un fuerte golpe con una silla, se tapó la boca con la mano para no despertar a todos con un grito de dolor.

-¿Bill? - preguntó Fleur alarmada, soltando la silla y examinádolo- ¿pego qué haces aquí?, casi me matas de un susto, escuché guidos y pensé que egan mogtífagos- terminó ella ayudándolo a sentarse en la cama.

-Creo que debí llamar primero, aunque agradezco que utilizaras la silla y no tu varita- contestó Bill mientras masajeaba su cabeza.

-Lo siento tanto Bill, ¿te duele mucho?- preguntó ella rodeándolo en un abrazo y depositando besos en su rostro.

-Ya no- contestó él besando a la chica de vuelta- pero espera- dijo alejándose de ella y la tentación de sus dulces besos- antes de que olvide por qué he venido, necesito leer la carta de Percy por favor.

-Oh Bill, había olvidado la cagta, espega un momento, la guagdé pog aquí.

Fleur buscó en la mesita de noche junto a su cama y rápidamente de un cuaderno, sacó la carta. Se la entregó a Bill y se quedó parada frente a él.

Conociéndonos mejor ~ Fleur y Bill Weasley ~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora