𝘁𝗵𝗶𝗿𝘁𝘆 𝘀𝗲𝘃𝗲𝗻.

978 108 112
                                    

→   CAPÍTULO TREINTA Y SIETE.

→   CAPÍTULO TREINTA Y SIETE

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

──────── ✧ ────────

LONDRES, INGLATERRA.
DICIEMBRE, 1973.

──────── ✧ ────────

la luz entraba por el cristal de la ventana, generando la iluminación de algunos de los cabellos de la castaña y haciendo que su rostro relajado palideciera un poco más de lo normal, haciéndola ver tan hermosa como una muñeca de porcelana delicada y fina que roger contemplaba totalmente embobado.

observaba a faith desde el regazo de esta misma pues tenía su cabeza en las piernas de la femenina a la vez que disfrutaba de los dedos de ella jugando con sus mechones rubios.

llevaban así una hora, o quizá más. nadie lo sabía, solo eran ellos dos en la inmensidad de la casa que taylor soñaba con alquilar para ellos y sus amigos mientras estaba recostado en el piso.

se encontraban dentro, a diferencia de la mayoría de las veces que solo se quedaban en el sótano ya que faith había llegado al encuentro, sorprendiendo a roger al interior de la vivienda y luego de una pequeña súplica por parte de él, habían decidido quedarse allí aunque todo estuviera vacío.

para el ojiazul, eso no importaba. con tan solo su presencia allí, la casa estaba llena de amor y le generaba un sentimiento mucho más hogareño que el de su verdadera residencia.

al muchacho ya se le había hecho una costumbre entrar a la propiedad y recorrerla una otra vez mientras imaginaba cómo serían sus vidas allí. y aún sabiendo que no era correcto ni legal lo que estaba haciendo, mantenía el piso y las paredes limpias para cuando se mudaran.

porque sí, estaba seguro y decidido a formar un hogar allí y tener una buena vida al lado de quienes amaba.

—¿en qué piensas?— susurró ella, capturando su atención.

—en que me gustaría vivir aquí con los chicos y contigo.— sonrió. —solo imagina como tú y freddie decorarían este lugar.—

faith miró a su alrededor y sonrió también. era maravilloso pensar en una vida así.

roger se levantó entusiasmado y estiró sus manos hacia ella para ayudarla a ponerse en pie también.

—ah, y pintaremos las paredes de verde menta.—

la deacon rio, frunciendo el ceño. —¿verde menta?—

él jugueteó con uno de sus mechones castaños y lo puso tras su oído antes de voltearse a ver los muros.

—representa prosperidad y armonía.— respondió.

ella ladeó la cabeza, observándolo ahora de perfil.

𝐂𝐎𝐋𝐎𝐑𝐒  ✿︎  roger taylorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora