"La Casa de Verano" (BTS Jikook Fanfic)

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"¿Estás seguro?" Jimin preguntó. La propuesta lo tomó por sorpresa y se sentía extraño. El menor siempre había sido bueno, bastante. Nunca sintió la urgencia de un cambio y... nunca pensó en ello como una posibilidad. Incluso en ese momento pensaba que era una broma. Hasta que Jungkook asintió, y aquello bastó para que un poder, casi sobrenatural, permitiera a Jimin poner a Jungkook contra la cama. "Hmp, está bien..."

La imagen sola de aquel muchacho aparentemente rudo, tornándose totalmente sensible debajo él, era... emocionante.

Plantó un corto beso en sus labios y lo ayudó a quitarse su camisa. Después volvió a unir sus bocas, sin permitir que Jungkook levantará su espalda de la cama. Aunque Jungkook ni siquiera pretendía intentarlo. Estaba nervioso. Cuando Jimin dejó sus labios, le preocupó que viese la inquietud en sus ojos. Pero Jimin tan solo se apartó para empezar un rastro de besos desde su mentón hasta su abdomen. Aún sin ver la angustia en el rostro de Jungkook, sabía que debía ser cuidadoso. No era su primera vez con un primerizo.

Cuando sus besos llegaron al borde de los pantalones del chico, se apartó para deshacerse de ellos. Y por un curioso sentido de justicia, sacó la boina de su cabeza y la arrojó junto con su propia camisa a otra parte de la habitación.

Sonrió a Jungkook, y él apenas pudo corresponderle. Ya se habían visto desnudos cientos de veces, mas no podía evitar sentirse intimidado. Había algo diferente en la forma en que Jimin lo miraba. Una fiereza que nunca había visto antes.

Y lo tenía claro. Disfrutaba de ver como las expresiones seductoras de Jimin se tornaban blandas y gentiles cuando lo hacían. Creando un contraste total con la intensidad de la situación.

El recuerdo le hizo sonreír, pero también ruborizar por vergüenza. Se preguntaba si en ese momento él mismo se veía gentil y blando a los ojos de Jimin.

"¿Qué pasa?" Jimin preguntó cuando vio aquella extraña sonrisa, "¿Te preocupa que te vaya a gustar?" Agregó con ironía y rodó sus ojos. No quería molestarse con Jungkook por algo como eso, pero es que era lo que siempre decían todos antes de empezar.

"¿Eh? No" Jungkook respondió de una y Jimin levantó una ceja. Eso era nuevo.

"¿Entonces?" Dijo despacio, acercándose una vez más a su rostro.

"Me preocupa que a tí no te guste" Jungkook respondió en un susurro y Jimin sintió su corazón temblar. Se apartó de él de inmediato y, en un intento por no arruinar el momento, forzó un par de risas.

"¿Cómo no me va a gustar?" Dijo, mas ya no pudo disimular. Su corazón se estaba volviendo loco dentro de su pecho. Sabía lo que le estaba pasando y no le gustaba. Jungkook quiso acercarse a preguntarle si estaba bien, pues se había quedado callado. Pero antes de que pudiera llamar su atención, Jimin volvió a besarle.

Lo besó hasta que su espalda volvió tener contacto con las sabanas, y siguió acariciando su cuerpo hasta acomodar sus piernas a sus costados. Empezó a presionar su rodilla contra el trasero de Jungkook, y a simular embestidas para crear fricción entre los dos.

No se apartó hasta que sus pulmones exigieron más que pequeñas bocanadas de aire y un hilo de saliva se formó entre sus bocas. La cabeza de Jungkook daba vueltas y Jimin sonrió al ver las pequeñas marcas de humedad en el bulto de su ropa interior.

Su propia erección también se marcaba a través de la tela de su pantalón, y aunque empezaba a molestarle, no se lo quitó. No quería perder el control. Había tenido cuidado con todos los chicos que estuvieron en esa posición antes que el menor, y no iba a ser distinto. Se levantó de la cama para tomar el lubricante del primer cajón junto a su cama...