EL SECRETO DE UNA NOCHE

7) El Parqueadero.

Despierto, ayer no dormi para nada bien. Lo último que se de Laura es que sus tíos se la van a llevar unos meses para Londres, debe recuperarse así que para mí es mejor, me levanto yo debo seguir con mi vida, pase lo que pase, llamo a Laura antes de que parta.

-Nena- digo con una voz tranquila.

-Layla...- dice sollozando.

-No hables solo escúchame, estaré aquí siempre esperándote, ¿ok? Lo vas a superar, yo te ayudare, te mantendré al pendiente de todo lo que pase aca e iré a visitarte cuando me lo pidas mi niña, por ahora no te preocupes y ve… te amo mucho- le digo y la escucho llorar pero se que esto en algún momento iba a pasar, no soy nada cursi pero cuando de ella y de el se trata soy completamente diferente, no me da vergüenza serlo, y el que ella esté así y que me afecta es una muestra de que se puede convertir en mi jodida debilidad y yo no quiero que eso pase ~no de nuevo~ por eso es mejor que se mantengan alejada de mi.

-Yo también te amo- dice llorando algo trabada, los sollozos no la dejan hablar.

- Vale, bye, cuídate y mantente pendiente- le digo.

-Bye Layla, cuídate, volveré pronto y no te olvides de mi.

- Sabes que jamás haría eso niña tonta, bye- digo y corto, las despedidas son una mierda

Me levanto de la cama y me arreglo, ¡voy tarde! Son las 5:20 AM, la clases empiezan a las 5:30 AM y de casa a la universidad hay 15 min, no desayuno, solo arranco, al llegar a la universidad entro a clases y de nuevo veo al chico misterioso, necesito saber que quiere, pero ahora no.

Acaban las clases y salgo cuando veo a una chica acercarse.

-Holaaa- dice emocionada, lástima que yo no comparta esa emoción.

-Hola- respondo desinteresada.

-La fiesta de regreso a clase es en mi casa este año- dice dándome la invitación- espero que puedas asistir- ohh claro que iré pero antes debo confirmar algo.

-¿Van a ir TODOS?- digo refiriendome a los nuevos.

-Claro que sí, es una fiesta de bienvenida a los nuevos, no creo que nadie falte. Espero puedas ir, es el domingo… Eh, ya tengo que irme- dice apresurada después de ver un mensaje en su teléfono y con una sonrisa- adios- se va, me imagino que es su pareja.

-Adios- digo también y sigo caminando, debo prepararme para este Domingo.

Salgo al parqueadero y veo al chico misterioso de ayer, así que me acerco, vamos a ver quién eres de una vez por todas.

-Hola- digo, es un chico guapísimo.

-Hola- dice con simplicidad.

-Necesito que corras tu auto para yo poder sacar mi moto- digo, agradeciendo a Dios por darme un pretexto para poder hablarle.

-Aahh con que esa es tu moto… Es linda.

- Lo sé, ¿puedes quitarla?- digo apresurada, mi humor no es lo mejor, lo acepto.

-Va- lo veo montarse al auto y correrlo, mientras yo subo a la moto y me coloco el casco, bajando la tapa- listo, ya puedes moverte- dice y conozco las intenciones de sus palabras.

-Gracias- enciendo la moto a punto de arrancar, cuando pregunta decide pregúntar.

-¿Como te llamas?

-Layla, ¿y tú?

-Darien Smith, un gusto conocerte- dice serio y mirándome a los ojos, me intimida demasiado ¡joder! Y lo peor es que siento que he visto esa mirada antes.

-Lo mismo digo- digo arrancando de una vez por todas, hey chico misterioso, que tanto me ocultas.

Llegó a casa y caigo en cuenta de que alguien me sigue, ahora tengo guardaespaldas !wow!, son de la FMTL, no es difícil deducirlo, mi padrino debió tomar esa decisión por lo último que pasó, no me molesta para nada, aunque ahora debo aprender a vivir con todo esto, no es la primera vez que me ponen seguridad, marco el número de jeremy.

-Hola hija- dice contestando.

-Hola padrino, ¿me pusiste seguridad?- voy directo al grano, confirmando mis sospechas.

-Si hija, debo hacerlo, con lo que pasó el domingo ya no me fío de nadie, puedes correr un gran peligro.

-Ok, al menos me hubieras informado, sabes que te hubiese dado mi consentimiento.

-Lo iba a hacer ahora, pero por lo que veo ya te diste cuenta- dice riendo algo ronco.

-Si, ok eso era todo, hasta pronto padrino- digo despidiéndome.

-Chao hija- doy por finalizada la llamada.

La semana pasa tranquila, no he hablado nada con los nuevos, algunas miradas por parte de el chico de la biblioteca, que según lo que dicen mis compañeras es muy divertido y "espontaneo" para mí es todo lo contrario, su aura asusta, en fin, no se nada de ellos, pero espero acercarme a ellos el domingo, Michelle- la chica del comedor, la que me no me cae para nada bien- me saca de mis pensamientos, nos toco en parejas para hacer un trabajo en grupo, así que aquí estoy.

-¿Me estás escuchando?- pregunta algo molesta.

-Si claro- respondo- voy a tu casa el miércoles para tener todo listo ese dia, tenemos tiempo, me mandas la dirección de tu casa - digo.

-Dale, dame tu número- dice dándome su celular, se lo paso y me levanto.

-Todo bien, gracias, me voy- digo despidiéndome- mantenme al tanto, adiós.

-Adiós Layla- dice y asiento retirándome.

Los chicos nuevos son bastante sospechosos, uno que se me quiere acerca de más; Leider, otro bastante raro llamando kasumi- el chico de la biblioteca-, otro bastante misterioso supuestamente llamando Darién y por ultima la única chica, que pese a ser mujer no me inspira demasiada confianza que digamos. Todos me siembra demasiada duda, poco a poco debo ir investigando quiénes son sin levantar sospechas y más ahora que estoy entre la espada y la pared.

Esperemos que sucede en la fiesta de bienvenida.