14.

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- ¿Entonces te enfandaste? —Mark se encontraba junto a Jackson en una de las mesas de la cafetería, ambos estaban almorzando mientras el menor le contaba los sucesos de su noche con April.

- No me enfadé. —corrigió.— no me pareció adecuado lo que hizo el camarero.

- ¿Darle unas papas gratis?

- No lo veo así. —se defendió Avery.—estaba cuidando a April.

- ¿De qué? ¿Era un asesino en serie o algo así? —preguntó con diversión Sloan, realmente la situación le daba gracia, observó a su amigo poner los ojos en blanco.

- Tú no entiendes.

- Lo único que entiendo aquí es que tú estabas celoso. —levantó una mano al ver que Jackson se preparaba para responderle.— y lo peor es que no quieres admitirlo.

- ¿Qué? Ya te he dicho que no son celos, ella es mi amiga.

- Si, claro... tu amiga. —Sloan alzo las cejas para acompañar su mueca.

- No quiero hablar más del tema. —resolvió Jackson llevando un poco de la ensalada de su almuerzo hacia la boca.— ¿donde está Alex?

- Ha tenido que viajar para recibir un donante. —explicó el mayor.— para ese niño de la enfermedad extraña que viene atendiendo hace un tiempo.

- ¿Qué niño? —juntó lo último que quedaba de comida en el plato para poder comerlo y tomó una servilleta descartable para pasarla por su boca antes de volver a hablar.— no he escuchado nada del tema, he tenido la mente en otras cosas.

- ¿Quieres que te diga en qué cosas?

- No lo necesito.

Jackson apretó la servilleta en su mano logrando formar así una pequeña bolita con esta, que le arrojo a Mark en la cara para darle a entender que realmente no iba a hablar más del tema.

Revisaron algunos pacientes, completaron fichas y chequearon que todo estuviera en orden en emergencias, realmente se trataba de un día tranquilo en el hospital.
Ya estaba terminando la tarde, las enfermeras habían convencido a los muchachos de ayudarlas en la tarea de trasladar algunas cajas desde el depósito hasta la sala de urgencias. Jackson cargaba una caja cuando la vio entrar por la puerta general, primero pensó que se trataba de un error o que estaba confundido, pero luego la gente se movio un poco y pudo verla cargando a Leo en su cadera mientras hablaba con uno de los enfermeros de turno. Dejó con cuidado la caja y se aproximó con pasos rápidos hasta donde se encontraba April.

- Hey, ¿todo en orden? —dijo como saludo una vez que se paró detrás de la pelirroja que, al oírlo, giró quedando frente a frente.

- Hola. —le dedicó una ligera sonrisa.— si si, todo está bien... solo vine a dejar a Leo con Owen, me ha dicho que lo traiga hasta aquí.

- ¿Le has dicho que llegaste?

- A él, no. Pero le he pedido a un enfermero que estaba por aquí para que le avise. —se observaron en silencio durante unos segundos.— ¿crees que le dirá realmente?

- ¿Por qué desconfías? —lo dijo con un tono divertido que hizo reír a la joven que levantó los hombros con ligereza.— seguro le dijo, pero puede que este en cirugía.

- Seguiré esperando. —Jackson asintió mientras flexionaba un poco sus rodillas para quedar a la misma altura que Leo, le hizo unas muecas que ocasionaron la risa del pequeño y también de April que lo observó con una sonrisa.— ¿tú cómo estás?

- Genial. —sacó su lengua y cruzó los ojos levemente para que Leo siguiera riendo.— ha sido un día tranquilo por aquí.

- Me alegro por ti.

I knew you were trouble. | JAPRILDonde viven las historias. Descúbrelo ahora