Algunos diálogos fueron copiados y adaptados del increíble libro.
LOKI DONDE LA MALICIA YACE
DE: MACKENZIE LEE***
Loki cayo de rodillas. Las nauceas lo hicieron vomitar, vertió el liquido espeso sobre el suelo pulido del balcón. Su estómago le dolio por las arcadas.
Froto su vientre (hinchado por la indigestión) trazando lentos circulos con la mano.
Tomo un respiro profundo y exhalo lentamente. Las nauceas regresaron cuando penso en los alimentos recién consumidos. Brochetas de cerdo y piña cubiertos de crema; cubitos de queso, camarones, pescado y una copa de vino.
Loki últimamente, padecia de hambre voraz de todo tipo de carne de ganado. Extraño, pero desde hace dos semanas atras, sentía aversión hacía las frutas y verduras, siendo esto su principal fuente de alimentación durante gran parte de su corta vida.
Ahora, solo deseaba consumir cosas fritas y grasosas, cuando antes las aborrecia.
Se pellizco las mejillas para darle color.
"Fue la comida" penso Loki "Los cocineros del palacio real desempeñan un pésimo servicio" intento darse a si mismo una explicación logica, por incontable vez en los últimos tres meses y medio.
Loki tenia un estomago delicado a diferencia de Thor, que podía consumir grandes cantidades de comida sin sufrir las consecuencias de una terrible indigestión.
Loki se enojo y Fruncio la nariz. Otra razón, en la larga lista, para despreciar a su hermano.
Metió su estomago para lucir delgado y hermoso. Loki era vanidoso, preocupado de su aspecto físico. No podia evitar verse bien.
Regreso al Gran Salón Real, incómodo por el abrigo que llevaba puesto, que se apretaba en la región de su estómago algo prominente.
El Festín Real de Gullveig, como toda celebración asgardiana, era motivo de deleite. Siempre estaba abarrotado de cortesanos y dioses.
Loki estaba convencido de que todos odiaban los banquetes y de que nadie se atrevía a decir nada al respecto para no parecer de mente estrecha.
Ya que él tenía plena confianza en el (gran) tamaño de su mente, no tenía problema en decirlo.
Thor no dejaba de esbozar la sonrisa de político que había estado practicando para ocasiones de Estado como aquella ocasión.
Solo dejó de sonreír momentáneamente cuando Loki comentó que, al enseñar tanto los dientes, se le veía un trozo de comida enganchado a ellos. Thor los recorrió con la lengua durante unos minutos, frunciendo los labios de manera grotesca y provocando que varios cortesanos que se aproximaban cambiaran de dirección al verlo. Tras un rato, se dio cuenta de que no tenía nada.
—Los días de fiesta son importantes —replicó Thor—. Inculcan cobranza en los líderes asgardianos de nuestra corte.
—Confianza —lo corrigió Loki. La sonrisa de Thor no desapareció, pero frunció el ceño. —¿Qué?
—Yo también he memorizado esa cita —respondió Loki—. Es confianza.
—¿Y yo qué he dicho?
—Has dicho... Olvídalo. —Loki esbozó su propia gran sonrisa y alzó la voz para que Thor pudiera escucharlo por encima de los músicos, que interpretaban una animada canción popular—. Lo has dicho perfectamente bien.
Thor era tan torpe, carecía de modales y era su hermano. Entonces ¿porqué Loki lo amaba?
La logica del amor era absurda.