Capítulo 6

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Capítulo 6

MÍA

Que deba quedarme en el lugar del evento es el motivo por el cual no pude acompañar a Lara y sus amigas de trabajo al sitio a donde iban, hubiera sido muy divertido. Pero aquí estoy, los invitados se han ido poco a poco y solo quedamos gran parte del personal organizador del evento y yo. Debo estar aquí para cuadrar el pago y el envío de las fotos luego de editadas, lo cual debo hacer durante la madrugada para entregarlas a primera hora mañana.

Luego de ponerme de acuerdo con los organizadores del evento, ya lista para irme a casa, decido dar una vuelta más por el lugar y tomar algunas fotos a la decoración antes de marcharme de allí. Camino hasta llegar al gran salón donde se celebró el evento, el decorado está realmente hermoso. Tomo unas cuantas fotos más y antes de guardar la cámara decido fotografiar una especie de planta enredadera que hay en uno de los costados del salón, quiero esta foto como un recuerdo, es algo muy agradable de ver. Cuando termino salgo del salón y a las puertas del lugar está el hombre que me contrató teniendo una especie de discusión con un hombre que realmente no alcanzo a ver. Me dispongo a salir de allí lo más rápido posible, no quiero ser testigo de una bronca o algo parecido. A medida que me voy acercando a la salida escucho una especie de disculpas por parte del otro hombre, me atrevería a decir que es el fotógrafo que falló a última instancia, con razón el enojo del que fue mi jefe por hoy. Me apresuro para pasar desapercibida pero no lo logro ya que el señor Thomas, el director del personal encargado del evento, me llama.

-Lo siento mucho señor Terry pero su fallo de hoy es imperdonable, fue a última hora y gracias a esta joven, Mía, fue que pudimos avanzar y no cancelamos todo, hubiésemos pasado mucha vergüenza. –sí, es el chico del curso, vaya coincidencia.

-Tiene toda la razón señor Thomas. –dice el chico. –Pero realmente no podía llegar, fue un imprevisto, lo siento de verdad. Me alegra que haya podido encontrar una buena fotógrafa para su evento. – oh, vaya, gracias, que majo el Terry.

-Bueno, yo debo irme –digo y rápidamente comienzo a caminar, salgo y espero un taxi. Soy capaz de sentir pasos hacia mí.

-¡Vaya!, realmente no esperaba volver a verte hasta que comenzara el curso, ¿qué casualidad no? –me giro y observo a Terry que viene hasta mi lado.

-Opino exactamente lo mismo, pero supongo que sea una agradable coincidencia ¿no? –le digo y este sonríe.

-Puedo llevarte a casa si quieres, tengo el auto en la esquina.

-Vale. –acepto porque ya es tarde y tengo que editar las fotos del evento, además no me apetece esperar mucho a un taxi.

Terry trae su auto y me abre la puerta del copiloto, entro al coche y lo pone en marcha. Por el camino ambos estamos silenciosos, yo la verdad es que no paro de pensar en la larga noche que tendré hoy para poder acabar con las fotos.

Al llegar al edificio realmente se hace un silencio incómodo, quisiera invitarlo a subir pero aún no lo conozco del todo y no confío mucho, además estaré sola y no creo que Otto pueda defenderme de un asesino o algo así, no es que crea eso de él, nada más alejado de la realidad pero aun así mejor lo dejamos para otro día.

-Ehmm, muchas gracias por traerme, de verdad, seguramente aun estaría esperando un taxi.

-No me tienes que agradecer, lo hago con gusto.

-Te invitaría a subir pero estaré toda la noche trabajando en las fotos que hice hoy. –le digo y eso me hace sentir un poco mal, el chico se ha portado bien.

-Tranquila, sé cómo es trabajar para el señor Thomas, siempre quiere las fotos el día después. –ambos reímos.

-Bien, entonces...me voy, nos vemos. –le digo y finalmente salgo del coche y me dispongo a entrar al edificio.

Ambos Choques Donde viven las historias. Descúbrelo ahora