Abuso || Tododeku

Cada vez peor.

Habían pasado ya varias semanas de que Denki apareció para llevarse sus cosas.
En todo ese tiempo Todoroki se ponía cada vez peor; todo a su alrededor era un desastre, él era un desastre.

Aún esperaba que Izuku llegará.

-Él está bien... Seguramente fue de viaje o algo...

Se la había pasado marcando al número de Izuku, tenía la esperanza de que contestara.

Marcó nuevamente esperando respuesta pero lo único que sonó fue el mensaje de voz que decía:

¡Hola, soy Izuku! Por el momento
no me encuentro disponible,
marca más tarde y tal vez conteste.

Nos vemos.

Todoroki estaba desesperado, intentando convencerse a sí mismo de que Izuku estaba en un viaje, que volvería pronto con su hijo en brazos. Su preocupación llegó demasiado lejos, empezando a tener temblores por todo el cuerpo; necesitaba saber de Izuku ya.

Kaminari era su última opción. Le marcó a Kaminari para preguntarle si su esposo estaba con él; tal vez sí, después de todo eran mejores amigos.

-Vamos, contesta..

No fueron hasta la tercera llamada que contestó.

-¿Qué quieres, Todoroki?

-¿Izuku está contigo?

-¿Qué mierda? ¿Es una broma acaso? Dejate de idioteces, Todoroki. Esto no para nada divertido, imbecil.

-¿No está contigo? Mierda, ¿entonces dónde está? Esto de verdad me está preocupando, no lo he visto hace semanas.

-Todoroki, deja de decir idioteces, ¿okay? Estas dándome miedo.

-Ven a mi casa, por favor. Llegaremos al fondo de esto y lo encontraremos. Tú puedes saber algo por estilo. Necesitamos encontrarlo, Kaminari.

Maldición, maldito Shoto, maldita curiosad, y maldito él por ser tan curioso.

-De acuerdo. Estaré ahí en veinte minutos, si no abres rápido me iré.

Aunque no lo pareciera, Kaminari era alguien puntual, cuando quería, pero lo era.
Llegó en veinte minutos exactos, no tuvo la necesidad de tocar la puerta pues ya estaba abierta. Seguramente Todoroki la había dejado abierta en toda su locura.

Kaminari entró a la casa y pudo presenciar todo el desastre y chiquiero que había. Era todo un asco y sólo veía la sala de estar; no quería imaginar cómo estaría la cocina o el baño, y su curiosidad no llegaba a ser tanta como para revisar. Quería conservar sus ojos sanos por el momento.

Fue directamente a la escalera, temiendo en cada escalón que pisaba, tenía miedo e intriga de lo que podría encontrar; afortunadamente sólo encontró un desastre de ropa en el suelo, y a un Todoroki llorando y llamando sin parar al número de Izuku.

-Ya estoy aquí, Todoroki.

-¡Al fin llegaste! Oh Denki. -Todoroki se levantó para ir corriendo con este, le había esperado con ansias- Tenemos que encontrar a Izuku. Él no ha llegado a casa desde hace semanas.

-¿Tú de verdad no estás bromeando con esto?

-Me gustaría que también fuera una broma, pero es verdad. Izuku no contesta, ni las llamadas ni los mensajes. Incluso llame a sus padres pero ellos... No me dijeron nada, simplemente me colgaron, supongo que también estaban preocupados por su desaparición. Ayúdame por favor, Denki, te lo ruego.

Kaminari suspiró con pesadez. ¿Hasta dónde llegaría esta broma? Pensó mientras se tayaba un poco los ojos, después miró nuevamente a Todoroki.

-Bien. ¿Quieres saber dónde está?