Volver a la escuela

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-¡Emilia despierta!

- Ahí voy ma

-No, Emilia. Ahora.

-Bueno, en un minutito

-Vos me obligaste...

De repente siento frio y estoy mojada, mamá me tiró agua.

-Mami... Adivina que... ¡NO ME GUSTA QUE ME TIRES AGUA!

- Perdon, es que se nos hace tarde...

- ¿A qué hora es la entrada?

-A las 8:10 Am...

Me fijo en el reloj y se me cambia la cara

-Mamá son las 6:00

- Si

-Ya lo sé, mamá está loca- interrumpe nuestra convesación mi hermano

-Aghh, ahora no podre volverme a dormir...

-¡¡¡De nada!!!

En ese momento quería tirarle la almohada por la cabeza a mi madre

-Lo lamento chicos, es que el trabajo que conseguí es a las 7:00 y es algo lejos.- se defiende mi mamá- Si yo no estaba, ¿Cuándo se despertarían?

-Ok, voy a aprovechar este tiempo libre para bañarme-dije, para hacer algo y no aburrirme

-Uff, ¡Ya era hora!- dijo mi hermana

-Realmente estoy muy irritada ahora... No te conviene molestarme, en serio...

-Ok basta de pelear, vos anda a bañarte y vos arreglate tu pelo.

- Mamá, si vos no vas a estar, ¿Quién nos lleva?- dije.

-Los va a pasar a buscar el micro escolar a las 7:50 Am...

-Ok perfecto.

Cada uno hizo lo que tenía que hacer y a las 7:48 estábamos afuera esperando al micro. Cuando éste llego y nos subimos, me sentí en una película estadounidense... Era tan raro.

Al llegar al colegio vi las caras de mis hermanos, estaban impresionados... Yo les había contado como era el colegio (ellos me preguntaron) pero nada se compara con verlo con tus propios ojos.

A medida que uno iba entrando, te avisaban que vayas a la sala de actos y te daban indicaciones de como llegar. Cuando llegué a la sala, me senté al lado de mis hermanos y preste atención a la persona que intentaba hablar y pedía silencio, supongo que era el director de la secundaria.

Director:

Bienvenidos a la secundaria "Argentina" y les deseo buena suerte para su trayecto de estudio, entiendo que todos ustedes son nuevos y van a empezar el ultimo año de secundaria aquí. Es algo gracioso porque será su primer y último año aquí. Bueno, a continuación explicaré algunas normas vitales del colegio y les explicaré a que aulas tienen que ir:

La norma más importante del colegio es que no se permite la portación de ningun tipo de arma ni sustancia peligrosa, como drogas.

Despúes está la norma de que no se permite venir al colegio con una prenda inapropiada, como prendas inferiores que terminen por arriba de la rodilla ni ningun tipo de remera sin mangas. No esta permitido en este establecimiento ningun tipo de bullying.

Los apellidos con la letra inicial desde A hasta K irán al salón 1, los demás, tienen que ir al 2.

Doy por finalizado el acto, muchas gracias por su atención.

Cuando me dirigía al salón 1 me choqué con un chico

-Fijate por donde caminas, tarada.

-Lo siento es que tu estupidez me cegó

Dios que ganas de insultarlo de boca abajo. Me tiró al piso y ni siquiera se disculpó.

Pero de pronto:

- Dejame ayudarte, hay muchos idiotas por aquí, ¿Estás bien?

-Gracias, sí solo fue una caída- aunque me dolía el tobillo- auch, creo que no estoy bien del todo. Me duele el tobillo, creo que me lo doblé, ¿Ahora como llegaré al salón 1 si hay que subir escaleras?

-No te preocupes, yo te ayudo, total voy al mismo salón. Excepto que no quieras, digo, no quiero molestarte...

- No molestas en lo absoluto, agradecería tu ayuda.

-Bueno, estonces andando, sube.

- Ok... -me subo a caballito- perdón, ya se que soy muy pesada...

-No lo creo, no es dificil llevarte, ya casi llegamos.

Era impresionante lo fuerte que era...

-Y, ¿Cómo te llamas?

-Llegamos- me deja en el suelo- mi nombre es Jake, ¿Y el tuyo?

-Gracias, me llamo Emilia.

-Emilia, qué lindo nombre, ¿Quieres sentarte junto a mí?

-Gracias, tambien lo es Jake y sería un placer...

En el recreo continuamos hablando...

-Y Jake, ¿Vos sos de acá?

-No, yo soy de Argentina, pero mis padres son de acá, nos acabamos de mudar, fué un gran cambio...

- ¡¡¡Yo también!!!, es decir, todo lo que dijiste excepto que mis padres son de Argentina

-Wau, ¡¡¡Eso es una gran coincidencia!!!, y, ¿Por qué te mudaste?

En ese momento no supe que decir, solo se me ocurrió

-Por trabajo...

-¡Increíble!, yo también...

-Tenemos mucho en común...

-Jajajaja sí

Al volver a casa, mi mamá nos preguntó

-¿Cómo les fue?

Los tres al unísono contestamos

-Bien, perfecto...

-Me alegro- contestó mi mamá, con una gran sonrisa...

Y así amigos, fue volver a la escuela.

EmiliaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora