Prófuga (Tsukishima x Lectora)

El Partido

-¿Ya todos me dieron sus permisos?- dice el entrenador Ukai con varios papeles en las manos.

-falto yo- dice Nishinoya mientras se esfuerza por salir entre los chicos para entregarle el papel al coach.

-si ya es todo, recogan sus cosas y entren en orden al bus- el profesor desaparece un momento para poder entregar los recados.

Haciendo caso omiso a las indicaciones, Tanaka y Nishinoya empiezan a entrar de forma muy brusca y haciendo desorden.

-dije en orden- el profesor desde lo lejos les lanza una mirada asesina.

Y con esas mágicas palabras se hizo un orden al entrar y al viajar por al menos 5 minutos, cosa que cambió ya que Nishinoya puso música pero el profesor Ukai no se quejó, el ambiente fue alegre y se compartían risas, no había tensión, excepto que Hinata estaba nervioso y quería vomitar.

Llegamos y todos bajaron, Hinata bajó corriendo a los baños, menos Shimizu y yo, no quedamos a repartirnos los papeles y bebidas para cargarlas.

Shimizu bajó primero y voltea a verme- ¿necesitas ayuda?

-no gracias, puedo sola- digo y le regalo una sonrisa, aparte de Hinata ella me daba tranquilidad, no hablamos mucho pero es una buena persona.

Asiente y se va, yo intento recoger mi mochila, los registros y mínimo 5 botellas de agua con las partes de mi cuerpo más flexibles, piernas, brazos, boca y me impresiona que también con el cuello.

Bajo un escalón del bus y mi pie resbala, no debí cargar tanto, pienso mientras me doy por vencida y simplemente dejarme caer.

-¡¡cuidado!!- dice esa voz que me ha atormentado estos días, y a la vez siento esos brazos que ya me han abrazado antes, había olvidado como se sentía...

Me sostiene con los dos brazos en mi espalda y estamos tan pegados que nuestra respiración se escucha más. Me carga con esos brazos que en los entrenamientos se ven increíbles y me deja en el pavimento de la escuela.

-deja que te ayude con eso- dice Tsuki dándome la mano queriendo recibir algo.

Yo solo obedezco, estaba muy extasiada por ese momento y no sabía cómo reaccionar, además necesitaba ayuda. Le doy mis papeles pero el no se mueve para nada.

-es todo vamonos- digo e indico con la cabeza la entrada de la cancha.

-tu mochila- señala la pesada mochila que posaba en mi cuello.

-tengo muchas cosas- hago referencia a que no puedo solo quitármela y dársela, tendría que soltar las botellas.

El no dice nada, solo se acerca y me mira fijamente, me siento tan insignificante a su lado, es muy alto a comparación de mi metro cincuenta; se inclina ante mi presencia y pasa su larga mano alrededor de mi cuello, se acelera mi respiración y comienzo a sentir un hormigueo en mi cuello ya que el me toca tan gentilmente. El momento acaba cuando toma la mochila y me la quita, mi cuello siente un alivio aunque mi ser quiere más de él... ¡¡T/n concéntrate!!

-entremos- dice y señala la puerta del gimnasio.

-oh si... - exclamo absorta por el suceso que acaba de suceder.

Entramos y me acompaña a la banca, me deja los papeles que cargaba y se quita mi mochila para ponerla a un lado de mi asiento, después de eso se despide con la mano

- gracias y...¡Buena suerte!- digo con entusiasmo noto la expresión de felicidad que denota ese rostro.

15 minutos antes de comenzar, entra el equipo contrario que se llama "Nekoma" suena lindo me recuerda a los gatos... Entran en fila y veo a ese moreno de cabello negro con esa altura llamativa. Por todos los Dioses, debe ser por obra del destino, Kuroo está aquí...

-hey t/n, ¿como has estado?- Kuroo dice mientras se acerca cada vez más a mi.

-eh hola... Bien ¿y tú?- digo muy sorprendida ante su presencia.

-estoy muy bien, lo he estado pensando y después de este partido, ¿no te apetece salir? Ya sabes para conocernos- exclama casi seguro de lo que será mi respuesta.

-oh pues fijate que...- sin previo aviso Tsukishima interrumpe la conversación.

-otra vez tú, ¿es que no te cansas?- me sorprende el tono de su voz, se puede notar la furia que enmanan las palabras.

Kuroo y yo dirigimos nuestra mirada hacia el, y Kuroo cambia su torso para mirar a Tsuki.

-¿acaso hablaba contigo?- responde Kuroo con arrogancia y cruza sus brazos.

La tensión es tanta que ya no cabe en este lugar, en cualquier momento alguien puede soltar un golpe y empezar una pelea, no me gusta ver gente pelear y la verdad es que no sé como intervenir, ¿qué debo hacer?

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Andan muy bravos ellos dos -_-

Le dedico este capítulo a Zurinel por  apoyar esta historia, ¡¡gracias!!

Nya:3

Knightpiece.