Mi mejor amigo.

Capítulo 4: El beso.

Cuando logre visualizar a mi amado, me abalancé sobre él, lo choqué y me dijo, o intentó decirme

-Tan... Y lo besé, apoye mis labios sobre los suyos, y el siguió mi beso, me tomó por la cintura y nos fundimos en un apasionado beso.

Cuando el beso había terminado, Matías me miró extrañado y preguntó

-¿Por qué me besaste? Me asuste, sentí miedo de que él me rechazara, di media vuelta y me fui a buscar a Francisca, la encontré muy entretenida con Sebastián su estúpido ex.

-Fran vamos, dale. Le dije tomándola del brazo.

-¡Ey! -Exclamó- ¿Qué paso?

-Hola Tania- saludo Sebastián. Ese chico no me agradaba, no entendía como alguien tan inteligente como Francisca podía estar con alguien así, lo mire y volví a decirle a Francisca

-Después te cuento, pero vamos.

-Pff está bien, vamos. Se despidieron con Sebastián y salimos.

Mientras esperábamos al taxi, mi amiga me sometía a un interrogatorio.

-¿Cómo fue? ¿Qué dijo? ¿Le gusto? No dejaba de preguntarme sobre el asunto.

-Fue lindo, me preguntó porque había hecho eso, y no sé si le gustó porque me fui asustada. Le respondí.

-Para, para, para ¿Cómo que te fuiste? ¿Estás loca? Arruinaste mi plan maestro. Me decía la pelirroja.

-Entendeme nena, ¿Qué iba a hacer si él se enojaba? ¿Eh decime?

-Ibas a hacer lo que habíamos acordado, ¿Y ahora? -Ya íbamos adentro del taxi camino a mi casa, Fran se quedaba a dormir, como cada vez que salíamos.

-Ahora no sé, pero pienso que algo le gusto, sino ¿Por qué me tomo de la cintura? Estaba pensando mucho en eso, por algo me siguió el juego, no creo que me haya abrazo y besado así, si no le gusto.

-Tenemos que averiguar si le gustó Tania. Y averiguarlo ya, llámalo. Dijo Francisca.

-No, ni loca, ni porque me paguen, voy a esperar a que él me busque.

-Ah, ojo, es buena esa idea. Bien hace eso, espera a que él te busque.

Y eso fue lo que hice, espere.