Conexión: Nuestra mejor versión ↬ Chensung [NCT]

Capítulo 6

Trauma

Domingo, 21 de julio.

Su pecho no había dolido tanto como ahora, sus ojos nunca habían botado tantas lágrimas hasta ese momento, y definitivamente jamás había sentido tanto miedo como lo estaba sintiendo justo allí.

Su mejor amigo estaba al borde de la muerte y aunque sentía que todo le dolía, tanto física como mentalmente, se sentía seco, drenado. Sus pensamientos se habían detenido, sus lágrimas también y posiblemente su corazón. No lo sabía exactamente, pero estaba seguro de que la escena que había quedado impregnada en su cabeza jamás lo dejaría vivir tranquilo.

No cuando tuvo el cuerpo casi moribundo de su mejor amigo entre sus brazos llenos de sangre por una bala.

Y Hendery se sentía enfermo, porque cada vez que cerraba los ojos, lo único que podía hacer era revivir esa fatídica noche. Sus sueños eran fríos, gélidos, llenos de sangre, con gritos y llantos, balas por doquier y luego todo era silencio... hasta que Yukhei suplicaba por su ayuda mientras sangre brotaba de él.

Y después despertaba gritando con lágrimas corriendo sin piedad por su rostro y no se sentía seguro hasta que Xiaojun lo sujetaba con fuerza entre sus brazos a pesar de tener a los demás chicos allí con él mirándolo con lástima. Siempre se trataba de Xiaojun cuidándolo, protegiéndolo.

No fue una sola vez, fueron muchas las veces en las que Xiaojun lo sostuvo fuertemente, cantándole, contándole historias con finales felices, haciéndole saber cómo era su día en su reciente trabajo con libros... Y Hendery solo podía escucharlo con ojos abiertos y atentos, porque si los cerraba, la pesadilla comenzaba de nuevo.

—¿Cómo te fue hoy en la terapia? —Xiaojun preguntó lentamente, bostezando luego de hacer la pregunta porque se notaba lo cansado que estaba. Pues aún si trabaja desde casa –afortunadamente–, se sentía agotado por corregir los libros que la editorial en la que trabajaba le mandaba.

—Bien, Yuqi me llevó —comentó lentamente porque incluso decir esas palabras en voz alta lo avergonzaban.

Había desarrollado una clase de fobia salir de la casa de Chenle sin la compañía de ninguno de sus amigos, tenía miedo de que le hicieran daño, pues Yuta le había explicado que desgraciadamente el hijo de puta que estaban buscado había escapado y aún no podían hallarlo.

—Sé que llevas poco tiempo, ¿una semana, tal vez? —Xiaojun movió su cuerpo, acomodándose mejor en la cama consigo Hendery, porque estaba abrazado a él como una lapa. —Pero, ¿has sentido algún cambio? Vas casi todos los días con el terapeuta por tu trauma.

—Dice que... probablemente deba ir a ver a Yukhei para poder decirme a mí mismo que está bien, que no está muerto y así dejar de culparme... —su voz comenzó a bajar drásticamente, volviéndose apagada y Xiaojun lo miró a los ojos, encontrándolos fijo en un punto de la habitación bajo la tenue luz de la lámpara.

—Mírame, Dery —pidió Xiaojun tomando su barbilla y haciendo que sus ojos se fijaran en él porque sabía que cuando Hendery comenzaba a perderse en su mundo, era porque comenzaba a revivir aquella escena que tanto mal le hacía. —¿Y qué piensas tú acerca de lo que te pidió el terapeuta?

—Pienso que aún no estoy listo para ver a mi mejor amigo en una cama de un hospital en un coma indefinido —terminó respondiendo, aferrando más sus brazos al cuerpo de Xiaojun y juntando sus cuerpos de manera en que su rostro quedó en su cuello. —No quiero hablar de eso, Junnie, hablemos de otra cosa, por favor.

—Está bien —suspiró, con su mano libre acariciando la espalda del menor. —¿Algo de lo que quieras hablarme?

—No, realmente —Hendery negó con la cabeza. —Es tarde, ¿vas a quedarte aquí?