C2: Rododendro
Lola resopló fracasando en ocultar una carcajada, provocando que Luz volviera al tiempo presente.
─ ¿Disculpa? No te entendí...─ Dijo la castaña recuperando el equilibrio sobre sus propios pies.
─ ¡Díselo en inglés Bichita! ─ Aulló Lola, provocando un rubor en las mejillas de su hermana pequeña.
Tanto la cara de la chica cómo la de Lilith reflejaban un despiste total al no entender el idioma que las hermanas Noceda usaban.
─ Uh... ─ Musitó la joven. ─ Ya me puedes soltar...
Luz se dio cuenta de su postura y rápidamente saltó un metro hacia atrás, soltando la cintura y la mano de la joven mientras su hermana continuaba riendo silenciosamente.
─Disculpa...─ Dijo Luz al fin en el idioma adecuado. ─ No sabía que ibas a entrar y abrí la puerta de un impulso.
La joven sonrió cortésmente, mostrando una cuidada y perlada dentadura.
Wow...
─No te preocupes, le pudo pasar a cualquiera.
Lilith carraspeó, llamando la atención de las presentes.
─ Buenos días Amity, no te escuché entrar...
─ Oh, si, el timbre no sonó.
─ Necesito ver que alguien lo repare...─ La subdecana suspiró. ─ En fin... Luz, Lola, ella es Amity Blight, es la hija del doctor Blight, estará en tu grupo y le pedí que te diera un tour por la escuela antes de empezar las clases, ella podrá resolver cualquier duda que tengas, conoce completamente todos los reglamentos y políticas de la escuela.
La castaña extendió una mano hacia las hermanas Noceda, siendo Lola la primera en tomarla.
─ Un gusto. ─ Dijo la mayor estrechando la mano de la joven. ─ Me llamo Lola.
─ Igualmente. ─ Respondió Amity soltando su mano y girándose hacia Luz.
La morena tardó dos instantes en reaccionar y apresurarse a tomar la mano de la chica.
─ Yo me llamo Luz.
La pálida piel era muy suave, su temperatura levemente menor a la suya y aquella mano, elegante y delicada, era tan pequeña estrechando la suya, que Luz estaba segura qué podía rodearla por completo con sus dedos.
Wow...
Tal vez lo intentaría después.
─ Gracias por evitarme una humillación pública. ─ Dijo la chica llamando la atención de Luz de sus manos unidas.
La morena sonrió ante la cara alegre de la joven.
─ ¡Oh, no fue nada! No te hubieras tropezado de no ser por mi culpa.
La castaña rio suavemente.
─ Igual gracias.
Tras la breve charla, la sala permaneció en silencio por algunos instantes.
─Ya... Me puedes soltar. ─ Dijo Amity por segunda ocasión con una sonrisa incómoda.
Luz soltó rápidamente su mano.
─ ¡Lo siento, es que estoy nerviosa y muy distraída! ─ Se excusó de forma casi inentendible.
Lola se puso a su lado y la empujó juguetonamente con la cadera.
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El pecado de florecer
RomantikPara Luz, un nuevo comienzo en un lugar distinto, con choques culturales, diversión, lazos eternos, amistad verdadera y una fascinación que debe ocultar. Para Amity, una confusión constante, un desafío a todo lo que conoce y le educaron para creer...