𝐝𝐞𝐥𝐭𝐚 𝐞𝐬𝐭ú𝐩𝐢𝐝𝐨 - 𝐬𝐞𝐨𝐤𝐡𝐚𝐨

06

"Omma... Duele...". Se quejó el omega recostado en su cama en posición fetal.

La omega mayor hizo una mueca mientras pasaba un paño húmedo por la frente de su hijo, limpiando cualquier rastro de sudor en ella.

"SeokMinnie... ¿No se supone que aun faltaba para tu celo?"

"Se supone que si... Pero no sé qué pasa ahora"

"¿Pasó algo en la casa MingHao, anoche?"

SeokMin dejó de quejarse, mirando a la nada, reflexionando sobre todo lo que sucedió anoche. "Mierda" pensó, "¡¡¡¿MingHao adelantó mi celo?!!!"

"Ay no..."

🐺

"Kim MingHao, ¡¡basta ya!!"

SehYoon se encontraba tratando de evitar que MingHao saliera de su habitación, el menor se había vuelto loco al despertar, jadeando el nombre de SeokMin. El alfa detectó el aroma del delta, estaba intranquilo por lo que se levantó corriendo a la habitación de su hijo.

"Quiero a SeokMin". Gruñó MingHao. "Déjame salir".

"No estás en posición de ir con ese omega, ¡así que cálmate ya!"

MingHao logró tranquilizar a su delta y se dejo caer al suelo tratando de regularizar su respiración mientras sentía una opresión en su pecho por no tener al omega cerca.

"Tengo que ir a verlo..."

"No". Su appa se sentó a su lado, cansado por tanto luchar con su hijo. "No puedes ir a ver a SeokMin, lo más probable es que haya entrado en celo..."

"Es mi omega"

"Supongo que si... Parece un buen chico"

"El mejor". Sonrió cansado sin poder evitarlo al pensar en ese rebelde omega.

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SeokMin había faltado a la escuela, se sentía indignado, nunca había faltado por uno de sus celos, siempre tomaba supresores y ya, sin embargo ahora, ya ni siquiera esos servían. Lo único que pasaba por su cabeza era la imagen de ese estúpido delta, gimió por volver a pensar en él.

"Ya ve a dormir omma". Trató de sonreír pero solo logró hacer una mueca. "Ya me siento un poco mejor".

"No tengo sue...". Un bostezo interrumpió su oración haciendo reír al menor.

"SeokMin tiene razón, omma". Jun estaba recargado en el marco de la puerta de la habitación. Era el único que podía resistir el olor del omega al igual que la mayor.

"Esta bien...". Besó la frente de su hijo. "Aun así estaré al pendiente, bebé".

Los dos mayores salieron de la habitación y SeokMin se arropó tratando de dormir sin embargo tembló al sentir una ligera corriente de aire entrar por la ventana de su balcón, la cual estaba abierta. Maldijo para sus adentros y se levantó a cerrarla.

"Ahh...". La mano de Minho cubrió su boca interrumpiendo su grito.

"No grites, tus hermanos me mataran si me descubren". Quitó su mano de la boca del menor recibiendo un golpe para nada ligero en su hombro. "¡¡Auch!!"

"Idiota... ¿Qué haces aquí? ¿Cómo subiste?"

MingHao por fin entró por completo a la habitación, reincorporándose bien frente al menor a una corta distancia, lo suficiente para que ambos sintieran el aroma del otro.

El omega de SeokMin volvió a gemir e inconscientemente saltó al delta, enredando sus piernas en la cintura ajena, hundiendo el rostro en su cuello aspirando el amargo aroma que lo volvía loco.

MingHao hizo lo mismo con el cuello del omega, mezclando ambos aromas. El mayor fue hasta la cama y se sentó en el borde de ella con SeokMin sobre su regazo. Se separaron un poco para mirarse el uno al otro, se acercaron más, rozando sus narices sonriendo.

El delta se inclinó un poco y comenzó a besarlo lentamente siendo correspondido, el omega abrazo su cuello dejándose llevar por el beso, era la segunda vez que lo besaba y ya estaba seguro de que amaba los labios del mayor.

"Te vas a quedar conmigo, ¿cierto?"

Kim se quedó callado un poco sorprendido por el cambio radical en el menor, hablaba tan melosamente que el mayor se sentía derretir.

"Si..."

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Abrió los ojos encontrándose solo en la cama, se levantó de golpe buscando a su delta pero no lo halló. El lobo de SeokMin se sintió triste y abandonado por el mayor.

Negó varias veces ignorando a su lobo y se levantó, se sentía estúpido y avergonzado por cómo actuó con el delta anoche, no volvería a pasar. Solo había sido el celo, si, solo eso.

Al entrar al baño y desvestirse para darse una ducha, notó que sus ropas y él mismo tenían impregnado el aroma a café. Sonrió inconscientemente y por unos breves segundos consideró la idea de no ducharse y seguir teniendo el aroma de MingHao. Idea que fue rápidamente desechada antes de meterse bajo la regadera de agua.

Se vistió y tomó un supresor, estaba harto del comportamiento de lobo por ese delta imbécil, así que dejaría atrás todo lo que pasó con MingHao. Ellos solo habían echo un trato en el que ambos salían ganando, no eran amigos y mucho menos algo más.

Colocó brillo en sus labios muy levemente y bajó con una sonrisa mientras mandaba un mensaje a SoonYoung para salir, le hacía falta, así que disfrutaría su fin de semana sin ver a MingHao. La próxima semana tendría que volver a estar con él para terminar su proyecto de inglés y con las prácticas de baile.

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Tocó tres veces la puerta deseando que el menor le abriera, estaba ahí, lo sabía por el rico olor a fresas.

"Bebé... Sé que estás ahí...". Hansol pegó su frente a la puerta del pequeño departamento. "Abre por favor... Tenemos que hablar"

"Vete...". SeungKwan estaba sentado en el suelo recargado en la madera de la puerta que lo separaba de quien, antes, consideraba su alfa. "Fuiste tan idiota de usar tu voz de mando conmigo... Mi lobo sigue dolido".

"Fui un idiota, lo sé... También sé que tu lobo, MI omega, está herido, necesitan mimos y amor que solo yo puedo darles...". El menor lo pensó por unos segundos.

Hansol se separó un poco al ver que la puerta se abría dejando ver a un pequeño SeungKwan con una de las camisetas del mayor que le quedaban gigantes, su cabello despeinado, sus ojos llorosos, tenía ojeras y a pesar de todo eso, el pequeño omega seguía siendo lo más hermoso para el alfa.

"Kwannie...". Acarició su mejilla recibiendo un ronroneo de parte del menor haciéndolo sonreír.

Lo envolvió entre sus brazos dándole calor, Boo hundió su nariz en el cuello de su alfa tranquilizándose con el aroma a chocolate.

"No vuelvas a ser un idiota... Por favor"

"No lo haré, bebé, lo prometo"

Un poquito de Verkwan no hace daño a nadie