24

125 23 0
                                    

Se miró al espejo de cuerpo completo, su torso desnudo lleno de marcas rojizas al igual que sus caderas acompañadas de uno que otro moretón, bajó su vista a sus piernas, el interior de sus muslos también tenía chupetones.

Sonrió colocándose su bóxer y trató de peinar su desordenado cabello sin embargo no hubo ningún cambio. Unos ejercitados brazos rodearon su cintura desde atrás, MingHao besó su hombro desnudo y luego escondió su rostro en el cuello de SeokMin.

El delta también se encontraba con chupetones en su cuerpo, no tantos como en el omega, pero se reponía con las marcas en su espalda causadas por las uñas del menor.

A los demás les parecería enfermo, pero ellos dos se enorgullecían de las marcas en su cuerpo, si, el mayor era rudo pero eso le gustaba a SeokMin, además, siempre se encargaba de no lastimar al omega.

Giró a ver al pelinegro abrazando su cuello mientras se miraban con amor, MingHao fue el primero en cortar la distancia entre ambos comenzando un tierno beso. De pronto escucharon el despertador del mayor sonando en toda la habitación.

SeokMin se apresuró a saltar enredando sus piernas en la cintura de su novio aferrándose al cuerpo del más alto. Sus ojos se cristalizaron e hizo un puchero.

"Minnie...".

"No". Ocultó su rostro en el cuello del delta mientras negaba. "Por favor no te vayas...". MingHao suspiró.

"Ángel No me hagas esto... Prometo hablarte cuando llegue".

Tal vez SeokMin estaba exagerando, pero no podía evitarlo, MingHao tendría que viajar a otra ciudad para ir a la universidad, porque si, el delta no era tan imbécil después de todo y fue aceptado en una de las universidades más prestigiosas.

Sus hermanos también asistían a esa universidad pero eso no le importa ahora al menor, lo único que quería era su delta no se fuera.

"De acuerdo...". El omega dejó de abrazar al mayor y se separó un poco. MingHao no soportaba verlo triste por lo que se sintió un poco culpable. "Solo prométeme algo...". Se miraron el uno al otro.

"¿Qué cosa?".

"Pensarás en mi la mayor parte del día...". Lee sonrió y besó la frente de SeokMin.

"Incluso en la noche pensaré en ti". Le guiñó un ojo haciendo reír al más bajo.

📚

SeokMin miraba su celular, esperando la ansiosa llamada de MingHao, ya se había tomado la pastilla anticonceptiva que solo tomaba cuando no usaba protección al estar con el delta.

Habían pasado unas horas desde que se fue, sin embargo, aun no recibía ni siquiera un mensaje.

"De seguro ya llegó y se distrajo viendo a algún otro omega". Abrazó sus piernas mientras observaba el celular en la mesa.

"SeokMin por favor, no seas tan exagerado". Dijo su madre sin apartar la vista del libro que leía.

"Si no es eso, ¿entonces por qué no ha llamado?".

"A lo mejor se ha quedado sin batería-". El menor la interrumpió.

"No". Se levantó de golpe fulminando al celular con la mirada. "De seguro es porque se ha detenido hablar con algún resbaloso omega o yo que sé... Pero sabes qué, Kim MingHao". Tomó el celular. "A mi no me importa, es más terminamos, ¡ya no te quiero!". Le gritó al aparato volviéndolo a dejar en la mesa para después caminar a las escaleras.

La omega lo miró irse con una ceja alzada, desde cuándo su hijo era tan tóxico.

El celular comenzó a vibrar mostrando una foto de MingHao, estiró su mano para alcanzarlo pero SeokMin (quien llegó corriendo, tropezándose y estando a punto de morir en las escaleras) lo tomó primero contestando al instante mientras corría al patio trasero.

𝐝𝐞𝐥𝐭𝐚 𝐞𝐬𝐭ú𝐩𝐢𝐝𝐨 - 𝐬𝐞𝐨𝐤𝐡𝐚𝐨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora