Quién eres

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Miro mis pies descalzos sin entender donde estoy el suelo bajo estos parece hecho de mármol negro, le echo un vistazo a mi ropa y me encuentro con que llevo un vestido blanco y largo... que extraño no recuerdo haberme vestido así hoy. 

Levanto la vista de mis pies para ver a mi alrededor, paredes altas en penumbra, un corredor que solo es alumbrado por la luz de la luna, la cual ingresa debido a los inmensos ventanales que lo recorren. Nunca estuve aquí pero lo siento extrañamente familiar, necesito moverme... mi cuerpo se recorre el lugar como si no fuera un lugar desconocido, mis pies me guían; me detengo frente a una inmensa puerta forjada con oro y acero, luce pesada pero aún así utilizo toda mi fuerza para abrirla de par en par ¿Dónde estoy? El lugar luce como una habitación, una inmensa como esas que se ven en las películas de castillos; veo una chimenea apenas encendida, alfombras de piel de animales por doquier, una cama gigantesca adornada con inmensos doseles que llegan hasta el techo y que apuesto mi cabeza a que son de oro, veo una mesa con distintas botellas y un escritorio en el centro adornado con papeles desparramados.

Pero lo que capta mi atención es la figura masculina que observa por el ventanal inmenso; veo su cuerpo desde atrás, es alto, de hombros anchos y cintura pequeña, lleva puesto un pantalón ajustado como los que usan en la nobleza, a juego con unas botas negras. Su espalda se encuentra al descubierto ya que no lleva nada que lo cubra, su piel luce impecable y pálida; sigo observándolo en detalle de pies a cabeza entonces me percato de que su cabello es blanco, detalle que al principio deje pasar porque para mi no es nada extraño pero para este raro mundo sí.

- ¿Quién eres? - escucho que pronuncia en voz baja, su voz suena ronca y grave como nunca había escuchado lo cual provoca que mi piel se erice. 

- ¿quién eres tú? - devuelvo la pregunta casi inmediatamente entonces lo escucho reír, mi corazón late nervioso por el sonido, me encanta su risa.

- Debido a que tú eres quien se encuentra en mis aposentos, deberías responder tu primero. - comenta mientras se da la vuelta para observarme, mierda es muy atractivo, nunca había visto a un hombre tan atractivo en mi vida, ni siquiera en películas. Su nariz es recta, perfecta, su mandíbula es ancha dándole un aspecto de hombre rudo, sus labios son carnosos y grandes y su pera se encuentra marcada como la de superman. Observo sus ojos y puedo ver que me analiza de pies a cabeza sorprendido.

- Bueno, tus aposentos pero este es  mi sueño. - comento fingiendo orgullo a la vez que me cruzo de brazos, puedo notar que mi respuesta lo dejo sorprendido. - pero como soy educada te diré, mi nombre es Helena. 

Camina en mi dirección y se detiene a unos diez pasos de distancia.

- Bienvenida Helena. - dice con una sonrisa malévola en el rostro, trago saliva nerviosa, se supone que tenga miedo? porque su rostro me resulta malditamente exitante.


Abro los ojos de golpe dándome de lleno con el techo de la casa de Creta, fue todo un sueño... Miro a mi compañera de cuarto descubriendo que aún es de noche ya que sigue dormida, quiero volver a dormir, volver a ese lugar con el hombre misterioso. Cierro mis ojos y recuerdo cada detalle de su apariencia sintiendo a mi corazón latir nervioso ¿que debo hacer para volver a verlo?

 Cierro mis ojos y recuerdo cada detalle de su apariencia sintiendo a mi corazón latir nervioso ¿que debo hacer para volver a verlo?

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Algo así imagino que se vería el hombre de sus sueños pero con cabello blanco.

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⏰ Última actualización: May 17, 2021 ⏰

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