- ¿Por qué no pueden verme? – digo después de unos segundos, la mujer me mira de reojo y continua caminando, entonces salimos de los árboles y puedo ver una aldea.
- Tu apariencia. – responde cortante. Me miro los pies y la extraña túnica que llevo encima ¿Qué tiene de malo mi apariencia?
Observo con curiosidad todo lo que me rodea; las mujeres al igual que los hombres llevan el cabello largo pasando las caderas pero adornado con distintos tipos de trenzas y adornos, sus ropas son extrañas como si usaran tela, plantas y pieles para crear sus vestimentas, la mayoría de las mujeres usan vestidos o polleras algunas muestran el abdomen, otras sus hombros y espalda. Los hombres llevan extraños pantalones largos y algunos llevan chalecos que dejan al descubierto el pecho, abdomen y brazos pero otros unas extrañas camisas al estilo pirata; todos llevan el cuerpo tatuado con el maquillaje tribal.
El suelo bajo mis pies es verde con flores de colores, puedo observar varias construcciones hechas de lo que asumo es barro en forma de iglú, pero están recubiertas por el mismo césped, tienen puertas redondas al igual que las ventanas y afuera de algunas puedo observar animales y tubos en posición vertical de los cuales salen plantas.
Siento que alguien tira de mi brazo para que me mueva, giro mi cabeza en dirección a la desconocida quien me mira enojada yo me limito a dejar la inspección para después y la sigo a paso apresurado.
Nos acercamos a una casa igual a las otras, pero esta no tiene animales fuera solo plantas y del techo de entrada cuelgan hilos con huesos y ramos de hierba seca; trago saliva nerviosa ¿A dónde me trajo? La veo abrir la puerta y hacerme señas para que entre, una vez ingreso cierra la puerta a mi espalda; debido al brusco sonido doy un salto en mi lugar.
- Aquí esta.- dice en voz alta y de un tirón me quita la capa, asustada busco a quien le habla entonces de la penumbra asoma un hombre de alrededor de unos 60 años, su piel es blanca tanto como la nieve, sus ojos de un intenso negro lo cual me inquieta mucho, su cara se encuentra repleta de unos extraños tatuajes al igual que su cuello, torso, pecho y brazos; solo viste con un pantalón marrón; su cabello es negro y se encuentra erizado en todas direcciones. Puedo ver como este hombre me observa de la misma manera que hice yo.
Da un paso en mi dirección y asustada retrocedo, pero la mujer detrás de mí no me deja moverme lo cual permite que el hombre se acerque a mi hasta tomar un mechón de mi cabello, cierro mis ojos asustada. Lo siento alejarse y vuelvo a abrirlos, ambos desconocidos se sientas en el suelo alrededor del fuego, allí el arroja una especie de polvo y luego toma una pipa improvisada para darle una calada, sus ojos oscuros no dejan de observarme.
- Es ella a quien viste? – pregunta con el ceño fruncido mi rescatadora o verdugo aún no lo decido.
- Si. – responde sin quitarme la vista de encima el sujeto.
- Bueno, he cumplido con mi misión Cedric. – murmura ella, el ahora nombrado Cedric aparta su vista de mí y la observa por unos segundos en silencio. Misión?
- Debes llevarla a Torum. – dice con una tenebrosa voz.
- ¿yo?¿Porque? – pregunta la mujer, el anciano mira el fuego y luego vuelve su vista a ella.
- Luego del tributo a Belenus. Así lo han decidido los dioses. – pronuncia por última vez y luego no vuelve a hablar, la mujer refunfuña enojada pero se levanta de su lugar y me hace seña para irnos.
La sigo a paso rápido tratando de no caer en el camino, pero me la está poniendo difícil; quiero hacerle muchas preguntas pero dudo que me dé el aliento para hacerlo ahora, caminamos pasando por lugares muy concurridos creo que era una especie de feria o trueque porque me pareció ver comida y encima mi estómago ruge, muero de hambre.
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Descenso
Fiksi Ilmiah✨PRIMER LIBRO DE LA DUOLOGIA DESTINO.✨ Qué harías si un día despiertas en un mundo completamente diferente al que conoces? Criaturas de apariencia extraña, algunas tan tenebrosas que parecen salidas de una pesadilla, dioses vengativos, amores prohi...