Las Monjas - Especial de Halloween 2020

6 ¿Cuándo maúlla el gato?

Última ronda de preguntas de esta noche, y estamos llegando a las mejores escenas candentes de esta historia *u* Es un placer poder traerles este especial que tanto me gusta, y como parece que a ustedes también, no los demoro más y los dejo para que lean y disfruten ^w^ ¡Muchas gracias por seguir aquí! 

6. Esta es difícil, ¡y capciosa! *u* A ver: mi historia Mi Diosa Luna originalmente fue escrita para el concurso de San Valentín de este año. ¿Cierto o falso?

VI. Esta va a estar interesante, fufufu: menciona el nombre de una leyenda de fantasma o monstruo del poblado donde estés. En mi caso, como residente del valle de México, una de las más tenebrosas es la del Charro Negro 9_9 un espectro disfrazado de jinete muy rico que en realidad es el diablo, y se lleva tu alma a cambio de un deseo. ¡Asústenme con sus terroríficos relatos! 

***

Desde que la habían transformado en gato, la verdadera superiora no se había sentido más furiosa. Nadie le hacía caso, la ahuyentaban de todas las habitaciones sin reconocerla, y ahora que parecía que por fin una persona con dones sobrenaturales había llegado a ayudar, resulta que se dejó engañar y había caído en los brazos de la falsa superiora. La situación no podía ser peor.

―Kyupin ―Al escuchar ese sonido, su lomo peludo se erizó, bufó con rabia a quien lo había hecho, y desplegó sus garras ante el enemigo de su convento―. Fufufu, no esté tan enojada superiora. Hay una probabilidad de 98,5% de que hoy mismo encuentren la reliquia, y de ser así, ya no tendrá que seguir soportando mi presencia mucho tiempo.

Emergiendo de las sombras como un siniestro muñeco de cuerda, un joven apuesto de pelo magenta salió haciendo una pirueta que tal vez habría parecido ridícula, de no ser por la persona que la realizaba. Porque no era una persona real. Ese era el gran demonio de la abadía, que sonrió con expresión vacía mientras el gato siseaba contra él. La cola y alas del gran brujo infernal se agitaron pomposamente, y tras hacer un aterrizaje perfecto, se arrodillo para quedar a la altura del felino.

―Me sorprende que usted haya aguantado tanto. ¿Qué?, ¿aún no se ha comido a ninguna de sus monjas por error? ―El minino parecía a punto de saltarle encima a aquel monstruo, pero este simplemente se acomodó los lentes mientras miraba al grupo de ratones blancos que temblaba aterrorizado en una esquina del jardín―. Tiene mis respetos abadesa. Su poder espiritual es tan grande que ha logrado que sus monjas no olviden que eran humanas. Desafortunadamente no pasa lo mismo con las otras. La única que falta de convertirse por completo es Elizabeth, y en cuanto lo haga, mi poder será tan grande que ya no necesitaré a las demás para encontrar a la traidora. ¡Controlaré la mente de todo ser vivo en mi territorio, y la obligaré a venir directo hacia mi! Ja-ja-ja, ja-ja-ja.

Pero esta vez, el lomo del gato no se volvió a erizar. Todo lo contrario. La gata negra se sentó con toda elegancia mientras miraba al demonio con altivez, y comenzó a lamerse la pata en una mueca de desprecio.

―¿Qué?, ¿dice usted que está muy segura de que Elizabeth no caerá? Bueno, tal vez tenga razón, la pobre ya está medio muerta, pero eso no importa. Si no es ella, aún hay otras dos vírgenes que están por entregarse esta noche. En cuanto su energía esté en mi poder, no importa lo que hagan, será tarde para todas. Ahora, si me disculpa, debo preparar todo para la media noche. Después de todo, ¡esa es la hora más divertida en el día de las brujas!

*

―Elaine... Elaine, espera, ¿qué haces?

―Fufufu... ―No había forma de escapar. Sellado. Atrapado sin remedio en una habitación llena de ese extraño humo rojo que le nublaba la mente a Ban. Estaba tan mareado que no podía sostenerse en pie, y como estaba seguro de que la persona frente a él era la verdadera Elaine, tampoco podía defenderse―. Querido zorro... Ban...