La cafetería de su primer encuentro con Jaemin, donde sus mejores momentos habían tenido lugar, donde había pasado la mayor parte de la mayoría de sus días. Ahora se acababa de convertir en el sitio donde su —si es que le podía llamar así— vida se había desmoronado.
<< —Toma. —Renjun le tendió el café a Jaemin. Negro y sin azúcar, como siempre. —Sigo sin entender cómo te puede gustar el café así.
—Me lo está diciendo al que no le gusta el queso.
—¡El queso está malo, Nana! Además, huele fatal. —El menor arrugó la nariz y apartó el rostro de su novio cuando este iba a besarlo.
—¡Hey! —El coreano se hizo el ofendido, ganándose un pequeño golpecito por parte del pelinegro en el brazo. —Dime, Junie, ¿preferirías comer queso o beber de mi café amargo?
—Uhm... Ninguna de las dos. —Después de sacarle la lengua, el chino se dirigió a la barra a coger una napolitana, ventaja de ser el novio del trabajador de la cafetería.
—¿Y si fuera de mis labios? —Preguntó el contrario, relamiendo sus belfos con una sonrisa.
—Tampoco. —Respondió Renjun, divertido por estar dándole largas a su novio.
—¿Seguro? —El pequeño soltó una risita tonta antes de que Na se lanzara hacia él para apoyarlo contra el ventanal, que hacía de pared, y llenar su rostro de besos, dedicándose después a los labios con su dulzura de siempre.
Huang pensaba que no había una persona más romántica que Na Jaemin.
—Vamos, no seáis cursis.
Y luego estaba Zhong Chenle, la persona menos romántica que podía existir.
Chenle, también de origen chino, trabajaba en la cafetería, Jaemin y él se repartían los turnos. Antes, Jaemin solía hacer el turno de noche, pero cuando Renjun apareció, comenzó a descuidar su jornada para dedicarse a entretener al chino por las noches. Por eso, se habían cambiado el turno. Aunque, aun así, Chenle iba mucho por allí, ya fuera por aburrimiento o para atender al chico guapo que se encontraba en el bar.
Ese chico siempre le había dado mala espina a Renjun, le recordaba a los ancianos que vio cuando llegó allí por primera vez —algunos de ellos, incluso seguían ahí, aunque otros se habían marchado. —; mirada perdida, casi sin reaccionar, eran como vegetales.
—¡Chenle! —Llamó Jaemin, haciéndole un gesto al más pequeño de allí, para que se acercara a ellos. —Vamos, déjalo, nunca va a venir del todo.
Las palabras de Jaemin pusieron los pelos de punta a Renjun. No era la primera vez que decía cosas que no conseguía entender, sentía que le faltaba información, que algo se le escapaba, ¿pero el qué? Tal vez, y esperaba que fuera así, sólo eran imaginaciones suyas. Que sacaba las cosas de contexto. Seguramente el chico habría sufrido algún trauma y había quedado en shock, por eso el "nunca va a venir". No pasaba nada. Todo estaba bien.
—No quiero ver como os coméis la boca, prefiero ocuparme de que Jisung esté bien.
En los labios del rubio se pudo apreciar una divertida mueca, para luego abrirlos y soltar una sonora carcajada.
—¿Le has puesto nombre? Chenle, eso da miedo. —Las mejillas del peliverde se tiñeron de un tono carmesí al instante y, el pobre, solo pudo sacudir su cabeza avergonzado.
—Bueno, es un nombre bonito y le pega bastante, ¿no?
Jaemin volvió a reír sin cansancio, incluso secó algunas lágrimas de sus ojos.
—Ay, Chenle... —Suspiró. —¿Qué voy a hacer contigo? Debes de acabar con esa obsesión que tienes con el pobre muchacho.
—Déjame en paz. —Musitó el chino alejándose de la pareja.
—Nana, eres malo... —Murmuró Renjun, dándole un pequeño golpecito a su novio, tratando de contener la risa, pero sin ocultar su sonrisa. —Déjalo tranquilo, no hace nada malo a nadie.
—Es divertido molestarlo, sabes que te hace...
El sonido de la campanilla de ola puerta, interrumpió al más alto, quien siempre callaba con solemnidad al escucharla abrirse. Ambos se giraron para ver quién era. Renjun se levantó.
Después de tantos meses.
Renjun miró a sus padres, y estos, conmocionados y horrorizados al ver a su hijo, le devolvieron la mirada.
Entonces Renjun comprendió todo.
buenop, pues este es el final. gracias a todos por leer y apoyar esta historia, espero que os haya gustado mucho uwu
la semana que viene, si no pasa nada raro, subiré la explicación de la historia para que la entiendan mejor.
ahora sí, me despido!! ♡
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In a dream || Renmin
Fanfiction⠀ Hasta ese momento, la vida de Renjun sí había sido tan fácil como parecía. start: 19.O5.21 ending: 22.O8.21 ⠀© Esta historia y su idea son completamente mías, así que no está permitida ninguna copia y/o adaptación sin mi permiso.