Dos cuerpos, Un alma | Damon Salvatore

Capítulo 24: The Mikaelson Ball

Pov's ________

Mi cerebro no estaba procesando el hecho de que la mismisima Katherine Pierce estuviera frente a mí, Suponia que debía odiarla por todo lo sucedido y de cierta forma lo hacía, por ella mi madre me mató, pero más que eso, sentía admiración por ella.

Carrie me había hablado de ella cuando me tenía presa como rata de laboratorio, me contó de cómo había sobrevivido por tantos años, como aprendió a ser independiente y una mujer fuerte, aún que despiadada y su historia era tan parecida a la mía que sentía una conexión con ella, sin contar el hecho de que éramos parientes por su puesto.

Ella, con su mirada penetrante me estaba observando de arriba abajo, me estaba rodeando con pasos lentos, nunca me había sentido tan pequeña al lado de alguien, pero ella tenía el don de intimidar, don que tenía yo también, ahora sabía de quién lo había heredado.
Mantuve mi compostura cada segundo que ella estaba escaneandome de arriba a abajo y de un lado a otro, en ningún momento titubee.

---- Interesante... Había escuchado de ti, no crei que fuera cierto

Me dijo ella, deteniendo su caminata a mí alrededor para Porfin estar frente a mí y nuevamente observarme completa.

--- ¿Que cosa?

---- Que una tú, hija de mi hija seas igual a mí

Su comentario me dio mucha gracia y no pude evitar reír "hija de mi hija".

---- ¿Que? ¿Te cuesta tanto decir la palabra "nieta"?

Ella me observó con una mirada asesina, pero para ese instante yo ya no me sentía intimidada por Katherine cómo lo estaba hace unos segundos, así que por solo provocarla un poco, me reí nuevamente, pero está vez por su mirada "asesina".

Sorprendentemente su reacción fue completamente diferente a lo que yo creí que sería, ella me sonrió y arqueó una ceja.

--- Es un gran golpe de aire fresco que por fin haya alguien más como yo y no como la dulce Elena

Esta vez quién arqueó una ceja fui yo... ¿"Dulce Elena"?.

--- ¿Donde estuviste? Porque... ¿Dulce Elena?... No se tú, pero la réplica que yo conocí no es nada dulce

Katherine pareció sorprendida, pero al segundo cambio su expresión y empezó a reírse, dio unos pocos pasos y unos aplausos leves sonaron cuando ella junto sus manos, aún con una sonrisa triunfal dibujada en su rostro.

--- Lo sabía, una perra siempre se esconde debajo de una máscara de chachorra mojada

Yo estaba apunto de responder a su muy agradable comentario sobre Elena, pero en ese momento, Damon salió de la casa, seguido de Stefan y Bonnie.

--- Tú hablas de perras, pero la perra mayor eres tú

Katherine dio media vuelta para encontrarse cara a cara con Damon, este se cruzó de brazos, pero Katherine solo sonreía con cinismo, pero al ver a Stefan le cambió el rostro por completo, sus facciones se volvieron suaves y delicadas, entonces me si cuenta... Ella estaba enamorada de Stefan, pensadolo bien... Creo que harían una excelente pareja.