Capítulo 7: Beverly Marsh y la farmacia. Parte 1.

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Todos cogimos nuestras bicis. Bill llevó al ''nuevo'', como todos lo llamaban en la escuela, en su bici. Nos dirigíamos al callejón que hay entre la carnicería y la farmacia.

Eddie:

Se pueden amputar las piernas y los brazos, pero,¿como se amputa una cadera?-Dijo a mi hermano mientras iba en bicicleta al callejón.-Los callejones son famosos por tener agujas con sida, ¿no lo sabéis?

Lucy:

Relájate, Eddie.-Dije mientras todos aparcaban las bicis (bueno, más bien dejarlas en el suelo).

Stanley:

Estamos muertos.-Dijo mientras Bill decía lo que hay que hacer.

Bill:

Richie, quédate aquí.-Dijo el guaperas mirándolo fijamente.-Vamos.

Richie se quedó un poco disgustado.

Eddie:

¡Sí!-Dijo, y pensé:''¡Arrea, que niño más tiquismiquis!Con tal de no quedarse en un sucio callejón...''

Todos corrimos hacia la farmacia. En cuanto entramos, Eddie empezó a coger todo lo necesario para curar a Ben, en resumen, todo lo que hay en un hospital.

Eddie:

Esto.-Dijo para sí mismo mientras cogía unas vendas.

Billy:

¿Tenemos para pagar?-Preguntó a Stan.

Stan:

Sólo hay esto.-Dijo mirándonos a todos, con un par de dólares en las manos.

Eddie:

¿Es una broma?

Bill:

Oye, ¿tú no tenías una cuenta aquí?-Dijo mirando a Eddie.

Eddie:

Si mi madre se entera que compré todo esto para mí, pasaré el fin de semana en urgencias sacándome rayos X.-Dijo con un tono firme.

Lucy:

Eso a nosotros no nos afecta, tienes que sacrificarte por el equipo.-Cuando dije eso con el mismo tono firme de Eddie, todos me miraron fijamente con cara de:''lo que te espera, chica'', sobre todo Ed.

Eddie:

¿Ah, sí?¿Pues porqué no usas tu cuenta?Por que tu también tienes, ¿no?

Lucy:

Pero lo mío son unas pastillas para la ansiedad súper caras, lo tuyo es un inhalador de 4 perras.

Eddie:

¿Perdón?Con el asma una persona puede morir ahogado. Lo tuyo sólo es nerviosismo.-Eddie y yo discutimos, bueno, más bien él, porque ni siquiera se me escuchaba a mí.

Stan:

¡Parar de discutir!-Dijo separándonos.

Billy:

Eso, pa-parar, chi-chicos. Mientras mirábamos lo más barato para comprar, apareció una chica pelirroja, con coleta y pantalones piratas vaqueros. Beverly creo que se llamaba. Llevaba unos tampones que rápidamente tapó detrás de su cuerpo, lo vi porque tengo la vista muy desarrollada. A Eddie se le cayó un rollo de esparadrapo al verla.

Stanley:

Eh, ¿estás bien?

Beverly:

Sí, estoy bien. ¿Qué te pasó?

Stan:

No es asunto tuyo.-Dijo mi mellizo rápidamente, a lo que yo añadí:

Lucy:

Eso, son asuntos internos.-Cuando lo dije, mi hermano me chocó la mano como recompensa por ''defender la manada''. La chica se nos quedó mirando como:''lo siento, no pretendía molestar'', a lo que yo respondí con la mirada de:''tranquila, estás perdonada. Después de todo, te has preocupado con nosotros''.

Eddie:

Hay un niño al que lo querían matar.-Dijo con cara de inocente.

Bill:

Pero no tenemos suficiente dinero. Beverly se incorporó como armándose de valor y fue junto al dependiente de la farmacia, que era el padre de Greta. Ella rumoreaba que Bev era prostituta, aunque yo siempre me preguntaba como es que una niña de 13 años iba a serlo. Bueno, el caso es que fue hasta la caja donde estaba el farmacéutico y empezó a ligar con él. No podía escuchar exactamente lo que decía, pero supongo que diría que le gustaban las gafas del padre de Greta y se las dejaría probar. Luego se las quiso devolver y tiró un mini-expositor de cajetillas de tabaco. Nos miró y ahí es cuando corrimos con las vendas al callejón donde estaban Ben y Richie.

 Nos miró y ahí es cuando corrimos con las vendas al callejón donde estaban Ben y Richie

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𝕃𝕒 𝕙𝕖𝕣𝕞𝕒𝕟𝕒 𝕕𝕖 𝕊𝕥𝕒𝕟𝕝𝕖𝕪 𝕌𝕣𝕚𝕤, 𝕃𝕦𝕔𝕪  (𝐁𝐢𝐥𝐥 𝐲 𝐭ú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora