¡ᴋᴏᴏᴋɪᴇ ᴀᴘᴘᴀ! 𝙥𝙟𝙢 • 𝙟𝙟𝙠 *ˢʷᵉᵉᵗ ˡᵒᵛᵉ*

6

— ¡Cloudie! ¡No, quieto! ¡Estoy en mi derecho! — El pelinegro discutía tontamente con su supuesto amigo fiel, Cloudie había vuelto de casa de su hermano después de un mes, el día en que apareció alegré por la puerta una vez que la abrió, se lanzó literal sobre su esposo, Jimin soltó a reír, el canino no dejaba de ver su vientre, al principio no supo cómo reaccionar pero poco después de comer, se subió junto al rubia al sofá y no tardó en acariciar con su cabeza el abultado vientre, se restregaba en él y lamía, Jimin era muy feliz con los mimos, le agradaba que Cloudie incluso amara a su bebé.
Menos Jungkook, quien ya no podía acercarse a su esposo e hija por que Cloudie se lanzaba sobre él y cada qué intentaba tocar su vientre este empezaba  ladrando y mordiendo.

— ¡WonhSoo dile algo! — así había transcurrido la semana, la pelea entre Cloudie y Jungkook era la misma, el pelinegro gritaba sus razones e intentaba acercarse a su esposo y el can le ignoraba y  ladrando lograba a apartarlo.

—  no es mi culpa, cariño — sonrió el rubio a la vez que se levantaba y tomaba su plato donde había comido, enseguida Cloudie le siguió.

— ya lo llevo yo, amor — intento acercarse a él para quitarle la loza pero el perrito soltó un ladrido — Cloudie es suficiente, ¡Soy el padre! ¡Solo intento tomar el plato! — el can volvió a ladrar y Jimin se rió a carcajadas con la escena, kook por su parte frunció su ceño.

— No es gracioso — se cruzó de brazos con su pequeña rabieta, el rubio negó sonriente y le dio un corto beso inclinándose a la altura de su esposo sentado en el mueble.

— Dejaré esto en alacena y después de dejar a Cloudie en su camita— acercó su boca al oído de su esposo — seremos todo suyo señor Bang.

💕

— Cielo — La pareja veía la televisión mientras se daba mimos en el sillón, Cloudie tomaba una siesta en su casita y Kook había aprovecho la oportunidad para acariciar y hacerle cariños a su pareja. Jimin disfrutaba de los dibujos animados recostado en el pecho de su esposo mientras él cansaba su mentón en el hombro del rubio y acaricia a su pequeña bebé. 

El rubio contesto con un Mhmm ante el llamado de su esposo para que supiera que le escuchaba.

Jungkook suspiró dejando sus manos quietas sobre el vientre de seis meses y dos semanas — ¿Crees que seré un buen papá? — El rubio observó por unos segundos la pantalla antes de apagarla y se volteó para sentarse sobre el regazo del pelinegro, pasó sus manos sobre el cuello de él y se dedicó a acariciar sus cabellos.

— ¿Qué pregunta es esa Señor Jeon? — el mencionado hizo un tipo de puchero bajando su cabeza. A Jimin  se le hizo muy tierno, su pareja no era para nada insegura y su corazón se estrujó ante tal pregunta, comprendía su sentimiento, él incluso se lo había cuestionado los primeros meses.

— No quiero dejarte toda la carga encima, ni siquiera sabía cómo comportarme contigo los primero meses y sí...

— Serás un excelente padre — le cortó la palabra, sus ojos se conectaron por unos largos segundos, el rubio pico sus labios con los de él y ambos sonrieron — igual que eres el mejor esposo del mundo, no podría imaginar un padre más perfecto para mi hija — los ojos del pelinegro comenzaron a empañarse. Sonrió gratamente a la vez que acercaba su rostro al del bajito  y se sumergían en un delicado y lento beso.

— Ahora vamos a la cama — pidió Jimin acercándose a su pecho.

— Pero si lo hicimos hace poco — Chilló el pelinegro, Jimin le miró mal y golpeó su cabeza

— Eso no, tonto — se abrazo al cuello de su pareja — estoy cansado, quiero dormir
— Kookie tomo mejor el más pequeño cuerpo y los dirigió hacia la cama para dormir abrazados.

La noche transcurría con normalidad, Jungkook disfrutaba de su preciado sueño al lado de su hermoso esposo, su nariz se hallaba pérdida entre las largas melenas, el frío de la noche era acogedor tanto que ambos cuerpos se encontraban fundidos bajo las sedosas sábanas.

Hasta pocos después de media noche, cuando el cuerpo de su pequeño esposo empezó a desesperarse entre las frías y acogedoras sábanas, Kook se encontraba más en el mundo de los sueños pero aún así sintió como su brazo fue removido y la cama se movía, la puerta abrirse y unos minutos después la cama se hundió y el olor a lavanda de él lo impregnó, aún con los ojos cerrados estiró su mano y atrajo el cuerpo del más bajito, Jimin exclamó por el repentino asalto, y se dedicó acariciar los cabellos negros de él cuando dejó descansar la cabeza en su regazo.

—¿Que sucede Jiminnie? — preguntó con voz adormilada el pelinegro. El mentado jugo un poco más con el cabello contrario antes de hablar.

— Aún no hemos pensando un nombre para la bebé — admito fijando sus ojos en los de su esposo que seguían cerrados.

— Es muy tarde, mañana lo pensaremos con calma — bostezo el pelinegro. Jimin entrecerró sus ojos y quito sus manos de la cabellera, se incorporó reposando su espalda en la cama y se cruzó de brazos muy molesto.

— Yo quiero pensarlo ahora — exclamó, Kook abrió sus ojos y se encontró con el ceño fruncido del rubio, suspiró hondo e hizo aún lado su preciado sueño.

— Minsung — Soltó éste después de meditarlo un poco. Jimin lo miro esperando, el nombre no sonaba mal. — Es un nombre muy lindo — añadió ante la expresión no tan segura de su esposo.

— dijiste lo primero que se te vino a la mente — le reprochó, sin evitar reírse — Ni siquiera creo que sea un nombre para una niña.

— Hyun Ah — agregó. Jimin negó.

— Es muy lindo pero, pienso que debe ser un nombre con un significado memorable para nosotros ya... — el discurso fue cortado al ver como el pelinegro cabeceaba— ¡Jungkook, no te duermas! ¡Estoy hablando contigo!