Capitulo 1

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Mi nombre es Joaquín, tengo 19 años de edad. Estudió en la Universidad la carrera de Licenciatura en Ciencias Jurídicas. Mido 1.70 cm. Sí, soy alto. Mi tez es blanca, mis ojos son color Miel. Mi cabello es rubio natural pero yo me lo tiño de castaño oscuro. Mis labios son delgados y mi nariz algo respingada. No voy al gimnasio por lo que no esperen que diga que tengo abdominales de lavadero.

Ya que he dado algunos de mis datos personales, vamos a mi problema.

¿Saben cuál es?

¡Estoy enamorado!

Y ustedes se preguntarán "¿Qué tiene eso de malo?"

Pues bueno, aquí va lo malo: Estoy enamorado de un hombre casado.

Sí, así como leen, estoy enamorado de un hombre casado y para colmo con una hija.

Se preguntarán quién es él, pues fácil, es el sujeto musculoso que está enfrente de mí.

Se llama Emilio, mide 1.82 cm y después del trabajo siempre va al gimnasio. Tiene 32 años. Siempre que lo he visto usa ropa formal, exceptuando la corbata. Tiene cabello negro, sus ojos son de color azul oscuro. Su piel es blanca al igual que la mia. Tiene labios perfectos, ni muy gruesos pero tampoco delgados. Y tiene un cuerpo, que ¡Ah! Me vuelve loco, pero no crean que es el típico hombre obsesionado con sacar músculos, ¡Qué va! Sus brazos tienen la medida exacta cómo para hacer que cualquier hombre o mujer, se sienta protegido entre ellos.Tiene abdominales de lavadero y tiene un trasero. Bueno, creo que me estoy desviando.

Sí, yo sé, ustedes piensan que, ¿qué importa que el sujeto esté casado? Sí esta como Dios quiere, ¿qué importa?

Pues aqui va el otro problema, es mi tio.

Y ahora que he dado una introducción a todo pues continuemos con la escena.

-No podemos- Mencionó en un susurro.

Mi cara se desfiguró por completo, ¿Qué acabo de escuchar?

-Me niego, no renunciaré a ti- Pronuncié tan firme como pude. Él alzo su vista y me miro sin comprenderme.

-¿Qué dices? Joaquín, soy tu tío - Apreté mis puños en un claro gesto de frustración y lo mire completamente enfadado.

-¡No me importa! ¡Emilio, me prometiste que me ibas a dar una oportunidad a pesar de mi edad!-

-¡Deja de decir eso! ¡No soy Emilio, soy tu tio Emi con el que jugabas cuando tenias 7 a la pelota!- Mis ojos se abrieron a más no poder, estaba sorprendido. Desvié mi mirada y solté un suspiro. Me doy por vencido. Giré mi cuerpo por completo y camine hacia la salida dispuesto a irme cuando sentí unos dedos alrededor de mi antebrazo.

-Joaco, por favor no le digas a tu madre nada de esto- Frunci el ceño ante tal indignación, me solté del agarre sin ni siquiera verlo y solté un bufido como respuesta.

-"Idiota"- Mascullé entre dientes

Cerré la puerta de un solo golpe, maldiciendo a todo el que estuviera enfrente de mi camino. No mire a nadie, simplemente salí del hotel en donde me encontraba momentos antes.

Saqué mi móvil y marque el número de mi mejor amigo: Nicolás.

-¿Aló?-Pronuncié deseoso de que fuera la voz de Nico

-¿Si? ¿Joaco?

-Si- Me quedé en silencio un momento -Soy yo. ¿Puedes venir o voy yo?

-¿Qué sucede? ¿Qué no estabas con tu tio?

-Sí, pero el muy cabrón se echó para atrás

-Oh oh, que humor te traes. Bueno, nos vemos en el café de siempre ¿vale?-

Amor Imposible [Emiliaco] +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora