Advertencia, contenido explicito.
Xiao Zhan bajo de la camioneta y le dio una ultima mirada Yibo, le preocupaba que este supiera donde vivía. Antes había insistido en que lo dejara por allí para regresar solo a casa, pero el menor insistió en que no lo dejaría ir a menos que lo llevara hasta ella. Tal vez tendría que buscar un nuevo lugar ahora que su residencia se sabía. Suspirando, camino hasta la puerta y la cerro tras de sí. Ni siquiera le había dicho a Ian donde estaba, aseguraba que una gran discusión vendría por eso. Temeroso dio cautelosos pasos hasta que la tensión se fue un poco de su cuerpo al ver a un saludable Duntty bajar por la escalera.
Al acercarse, lo tomo entre sus brazos y camino hacia el sofá, tomando asiento de una manera desordenada. Hoy había tenido muchas emociones y se encontraba agotado, el gato parecía entender ya que se acomodo sobre su plano abdomen y cerro los ojitos. Ambos quedaron dormidos, pero por un corto tiempo. Una mano grande y pálida se deslizo por la cabeza de Zhan hasta la parte trasera donde agarro su cabello y tiro de él, obligando a Xiao abrir los ojos con pánico.
"¿Donde mierda estabas?" Pregunto Ian con las venas resaltantes en su frente.
"Me reencontré con un amigo, teníamos mucho tiempo sin vernos" Explico con un tono suave, buscando calmarlo.
"¿Por qué no respondías las llamadas?" Insistió, intensificando el agarre en el cabello.
"No escuche, de seguro el celular estaba en silencio" Respondió Xiao mientras llevaba su mano atrás, tratando de que Ian lo soltara
El ojiverde suspiro y lo soltó, dándole la espalda. Zhan lo observo caminar hacia las escaleras aliviado. Pensaba que las cosas se iban a poner mas rudas.
"Ven a la habitación, ya es tarde" Escucho y aunque lo que menos quería era estar con él, necesitaba descansar, además quería ver si el día de mañana amanecía con un mensaje de Yibo, aunque le había dicho mil veces que no le escribiera, la verdad anhelaba ver eso en su celular al despertar. No podía evitarlo, lo había amado desde entonces...
Al subir a su habitación, se metió al baño y se deshizo de sus prendas, dándose un largo baño que lleno los vidrios de vapor. Al salir con la bata puesta, busco en el closet alguna pijama para poder dormir cómodo. Pero lo que menos pensó fue que Ian comenzaría a acechar.
Al sentir su respiración en la nuca, un escalofrío recorrió su espalda y quiso alejarse, pero la manos del castaño abrazaron su cintura y lo pegaron a su cuerpo. Zhan sintió con asco algo duro bajo su trasero, sabía lo que Ian quería, pero ahora no estaba dispuesto a tener sexo. Sus pensamientos solo recaían en Yibo, e incluso sentía cargo de conciencia por todo lo que hizo con Ian cuando el menor lo recordaba día tras día en China. Era descarado.
"¿A dónde vas? Quiero estar en ti" Susurró Ian, dando pequeños besos en su cuello.
"Estoy cansado...mejor mañana" Dicho eso, se zafó de su agarre y trato de caminar al baño para cambiarse allí, pero Ian lo agarro hasta arrastrarlo a la cama.
El corazón de Xiao Zhan comenzó a retumbar contra su pecho, nuevamente lo iba a hacer aunque no quisiera. Lucho para que Ian no abriera su bata, pero este era exuberantemente fuerte y en unos segundos ya lo tenía desnudo bajo sí.
"Ian, estoy diciendo que no" Dijo comenzando otra vez a forcejar, pero Ian era oídos sordos. No fue hasta que Xiao soltó un golpe que detuvo sus movimientos.
Aunque esa no había sido su intención, por fin había podido pararlo. Pero al ver que Ian se mantenía en silencio, se incorporó y trato de acercarse para ver su rostro, pero justo en ese momento Ian llevo el puño a la mejilla de Xiao en un fuerte golpe, que de inmediato rompió su mejilla interna y lo dejo algo desorientado.
Sorprendido y lleno de dolor, Zhan retrocedió. Esto había pasado antes, sin embargo, el dolor no era algo a lo que alguien se acostumbrara. Estaba por bajarse cuando su cuerpo fue arrastrado de nuevo y sus muñecas fueron tomadas, asustado miro como Ian comenzaba a sacar su miembro con la mano sobrante y se acomodaba entre sus piernas.
"¡Detente! No quiero hacerlo" Pidió, dándole la espalda para escapar de él.
Ian tomo sus caderas y lo atrajo de nuevo, debido a que Zhan estaba desnudo era muy fácil invadirlo. Así que tomo su hombría en mano y presionó la entrada rosada con fuerza, provocando un grito de parte del pelinegro. Ni siquiera espero un poco para que aquel se acostumbrara, inmediatamente comenzó embestirlo, provocando que cada movimiento fuera sumamente doloroso.
"Detente" Quiso pedir, pero Ian estaba metido en su propio placer y rabia.
"¿Con quién mierda estabas?" Preguntó casi en un gruñido. Zhan no respondió. No quería que nada le sucediera a Yibo.
Al no recibir respuesta, Ian tomo su cabello y empujó con más fuerza contra su trasero, sacándole algunos quejidos y lágrimas.
"¿Es tu viejo amor de china? Ni siquiera dejaste que me acercara, debe ser muy importante para ti, no?" Preguntó, depositando unas rudas nalgadas que marcaron los montículos pálidos del asiático.
"¡Ah! Duele" Dijo Xiao Zhan estirando la mano para detener la pelvis que golpeaba contra sus glúteos, Ian harto de sus quejidos tomo su cabeza y la enterró en las sábanas.
"¿Duele? No me hagas reír. Tu culo es una puta, debería estar acostumbrado a ser follado" Respondió con cinismo mientras se introducía en lo más profundo, provocando que un hilo rojo se deslizara por la entrepierna de Zhan y sus pies tomaran una forma extraña.
Así comenzó una larga noche, donde la bestia con hambre hizo de un armonioso cuerpo un desastre...
***
A la mañana siguiente, la fuerza había abandonado las temblorosas piernas de Xiao Zhan. Estaba adolorido y demasiado agotado, fue ronda tras ronda sin descanso hasta que su cuerpo quedó como un muñeco de trapo, con el cual un niño había jugado tanto que quedó sucio. Su piel era un desastre, tenía marcas de dedos, chupones, mordidas e incluso golpes que Ian depósito para mantenerlo quieto, pareciendo bastante lamentable.
Su celular vibró varias veces, pero no quería hablar con nadie, incluso su voz sonaba algo rota. Por fortuna, Ian debía ir a trabajar y lo dejaba solo un tiempo, así que podía tener algo de tranquilidad después de una horrible noche.
Pasaron unas largas horas dónde durmió. Solo despertó cuando el timbre fue tocado unas tres veces, dado que nadie sabía donde vivía supuso que solo era Ian queriendo molestar porque se le quedo algo. Así que se levanto de la cama y fue hasta abajo para abrir. Su plan era irse de inmediato, pero al abrir un poco la puerta, vio esa figura delgada con ojos rasgados que parecía la misma luna, elegante y con aires de juventud, pero esta vez Zhan solo sintió un vacío en su estomago que le hizo cerrar rápidamente la puerta y lo próximo que escucho fue el quejido de Yibo.
"Zhan-ge, si no querías verme solo lo hubieras dicho, no tenias que lastimar mi mano" Exageró Yibo para recibir su atención.
Xiao Zhan se preocupo y volvió a abrir la puerta, para después tomar la mano de Yibo y revisarla.
"¿Desde cuando eres tan llorón? Tu mano no tiene nada" Lo soltó y se alejo unos pasos "¿Que haces aquí?" Cuestiono acomodando el cuello de su bata para que no se viera ninguna marca, sin embargo, olvido el hematoma en su mejilla.
"¿Que te ocurrió aquí?" Pregunto el mas joven volteando el mentón de Xiao Zhan.
Lo primero que pensó fue en una caída, pero al ver las muñecas del mayor con marcas de dedos y algo rojizo en su cuello, sus manos se alejaron como acto automático y una avalancha de pesados sentimientos le hicieron dar un paso atrás.
"¿Qué has estado haciendo, Xiao Zhan?" Pregunto Yibo con una voz tan gélida y grave que causo en el otro un detestable dolor en el pecho. Se sentía tan sucio que temía tener a Yibo cerca, pero también temía que este al saber la verdad desapareciera.
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Vuelve a mi
FanfictionTras fotos de un beso con Wang Yibo, la carrera de Xiao Zhan se fue a la borda. Cansado de criticas y el mundo del espectáculo, desapareció de un día a otro y huyo a un lejano país donde no fuese reconocido. Allí un falso amor toco su puerta y resul...