Vuelve a mi

2. Encuentro con brote de loto

Advertencia: contenido explícito.

La noche llegó, Xiao Zhan vestía una camiseta blanca con unos pantalones negros y encima llevaba una chaqueta de cuero negra para evitar el frío. Sus prendas no eran tan llamativas, pero gracias a su atractivo era imposible ocultar que no era alguien corriente, provocaba que quien caminara a su lado volteará a mirarlo por lo bien que lucia, por algo se mantenía entre los rostros más guapos de China. Ian no fue inmune a esto, al verlo no pudo evitar acercarse y depositar un corto beso, mientras deslizaba la mano a su trasero para darle un apretón.

"Luces bien" Alagó tomando la mano de Zhan. Este respondió sin muchas ganas "Ian, de verdad no quiero ir".

En respuesta recibió una mirada severa, indicando que no podía refutar. En silencio, fueron hasta el lujoso auto de Ian y partieron hacia aquel bar. El camino fue tranquilo, había algo de nieve en el camino y el paisaje era hermoso. A pesar de estar ahí, nunca había esquiado, esperaba que este invierno si pudiera hacerlo.

Al llegar al lugar, todo lucía elegante y rústico, la decoración era en madera oscuro acompañada con luces tenues que daban un ambiente intimo y reservado, perfecto para compartir el rato con una persona especial. En el fondo de la barra, la pared estaba hecha de piedras que lucian extrañas y aseguraban un gran costo; en ella, se encontraban repisas con distintas botellas de alcohol, los colores variaban, al igual que la forma, era realmente interesante. Al acercase, un hombre alto con barba y ojos miel los recibió con una gran sonrisa.

"Diablos Ian, ahora sé porque no parabas de mencionarlo antes" Anuncio apoyando los codos en la barra "Después de todo no estabas fanfarroneando".

Xiao Zhan sonrió con algo de timidez, siempre había pensado que exageraban con su físico y en realidad no era muy atractivo. Tomo asiento junto a Ian y tendió su mano para presentarse con el nuevo sujeto, el cual se llamaba Mark, el dueño de este bar y amigo de la infancia del castaño.

"Espero que disfruten esta noche, hay una gran variedad de tragos. Pidan lo que deseen" Al decir eso, los dejo con otro chico y se fue a saludar a más gente.

Debido a que era una apertura, habían personas que se conocían con otras y más que parecer algo público, parecía una fiesta entre conocidos. Xiao Zhan pensó "después de todo, salir no fue mala idea", pero quién pensaba que la presencia de una chica dañaría su noche.

Mientras hablaba, extrañamente entretenido con Ian sobre el próximo viaje que pensaban realizar, una chica tropezó con su espalda fuertemente y de inmediato volteo a verla, sosteniendo sus hombros para que no cayera. De algo que se caracterizaba era por ser muy amable y caballeroso, así que no tardó en levantarse y sentar a esta pobre chica que perdía el equilibrio.

"¿Te encuentras bien?" Pregunto preocupado, pero cuando está levantó la vista, se quedó anonado con su belleza.

Algunas pecas decoraban su nariz y mejillas, que contrastaban perfecto con su piel lechosa. Agregándole a esto, un par ojos grandes y grises tupidos en pestañas llamaban la atención de su pequeño rostro. Hubo un tiempo donde Zhan se consideraba heterosexual, sin embargo, ninguna chica lo había captado como lo hizo está con solo un vistazo. Parecía una muñeca de porcelana. Estaba tan perdido, que solo escuchar un  un carraspeo despego su atención de ella y miro a Ian.

"Déjala sola, es la hermana de Mark...una alcohólica" Dijo no muy interesado y bebió su trago. Zhan abrió sus ojos en señal de que cuidara su lengua, no podía hablar tan libremente frente a ella.

"El tiene razón" Soltó una risa sin gracia la mujer y luego miro a Zhan, llevando la mano directo a su rostro para tocarlo. Impresionado por la acción, la miro escéptico "Wow ¿Eres asiático? Siempre quise tener un novio asiático, ¿Por qué no me lo presentas Ian?" Pregunto sonriendo y tomo el primer trago que vio en la barra para llevárselo a los labios.